Por Israel


Defendemos un ideal no a un gobierno
Síguenos en Facebook Twitter Twitter YouTube RSS Feed
| martes abril 23, 2024

Soleimani está frustrado pero no descansa

Durante muchos meses, el comandante de la Fuerza Quds de Irán ha intentado ajustar el puntaje con Israel sobre los cientos de ataques aéreos que ha llevado a cabo en las instalaciones y bases iraníes en Siria. Su vergüenza más reciente solo aumentará su apetito de venganza.


Foto: Qassem Soleimani   en El Libano

Durante muchos meses, Qassem Soleimani, el comandante de la Fuerza Quds de Irán, ha intentado ajustar el puntaje con Israel sobre los cientos de ataques aéreos que ha realizado en los últimos años en instalaciones iraníes, bases militares y depósitos de armas en Siria. En estos ataques israelíes, miembros del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria iraní, Hezbolá y milicias chiítas han sido asesinados.

Estos intentos, en mayo pasado y en enero de este año, consistieron en gran medida en el lanzamiento de cohetes desde Siria en los Altos del Golán, y no lograron, desde la perspectiva de Soleimani, el efecto deseado. Sin embargo, el apetito del arquitecto iraní del terror en Oriente Medio no disminuyó y solo se ha intensificado en las últimas semanas.

La razón: Israel, según informes de los medios, ha ampliado y rediseñado los límites de su campaña contra los esfuerzos de atrincheramiento de Irán en Siria y ha comenzado a atacar las bases de la milicia chiíta en Irak. Podemos suponer que los cuatro ataques atribuidos a Israel en Irak desde julio, junto con el informe del domingo sobre el asesinato selectivo, por ataque aéreo, de miembros de alto rango de una milicia iraquí en la frontera sirio-iraquí, perturbaron profundamente a Soleimani. Israel está atacando con éxito dentro de un país que comparte una frontera con Irán, se beneficia de la vista gorda por parte de los Estados Unidos, y está causando grandes bajas a las milicias encargadas de luchar contra las fuerzas estadounidenses estacionadas en Irak si las tensiones entre Teherán y Washington se convirtieran en un conflicto abierto.

Esta vez, Soleimani planeó un tipo diferente de venganza: drones cargados de explosivos lanzados contra objetivos civiles y militares en Israel. Él creía que las probabilidades de éxito serían mejores esta vez: silencioso, bajo los preparativos del radar, drones que son más fáciles de contrabandear y esconderse en lugares remotos (y en casas particulares), y solo un pequeño puñado de operativos en el secreto, incluidos al menos dos miembros de Hezbollah.

Si el complot se hubiera concretado, Soleimani hubiera logrado dos objetivos: se habría vengado de Israel mientras restauraba su «honor perdido», sin arriesgar una respuesta israelí dura y dolorosa porque habría limitado el alcance del ataque con drones a solo objetivos específicos.

El plan de venganza falló, pero Soleimani no descansará. Hay cuatro supuestos básicos en esta campaña:

Primero, los iraníes continuarán tratando de dañar a Israel. 

En segundo lugar, Israel tendrá que continuar operando en Siria y, según informes extranjeros, también en Iraq para frustrar los esfuerzos de atrincheramiento de Irán en Oriente Medio. 

Tercero, el éxito no siempre está asegurado porque la inteligencia de calidad, que esta vez, una vez más, ayudó a Israel a sacar la alfombra de debajo de los pies de Soleimani, no siempre está disponible. 

Cuarto, no siempre será fácil para Israel lograr que los estadounidenses y los rusos miren para otro lado.

Fue el líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah, quien acudió en ayuda de Soleimani el domingo. Haciéndose el tonto, Nasrallah afirmó e incluso ofreció pruebas  que solo operativos de Hezbollah, no miembros de la Fuerza Quds, estaban en la casa explotada por Israel al sur de Damasco.

Como era de esperar, aunque Nasrallah y sus amos iraníes ignoraron por completo el ataque de drones evitado, que fue planeado desde la casa destruida, el líder de Hezbollah se apresuró a crear una nueva ecuación: a partir de este momento, cada vez que Israel golpea a operativos de Hezbollah en Siria o en cualquier otro lugar , la organización terrorista responderá atacando a soldados israelíes que patrullan la frontera norte. No hay duda  que Israel tendrá que tener esto en cuenta cuando entre en las próximas etapas de su complejo esfuerzo sisifano* para evitar que Irán establezca una presencia en Siria.

En cuanto a la otra amenaza de Nasrallah: apuntar y derribar aviones israelíes sobre el Líbano, Israel se preparó para ello hace mucho tiempo.

Mito de Sisifo: Sísifo como metáfora del esfuerzo inútil e incesante del hombre

Traducido para Porisrael.org por Dori Lustron

https://www.israelhayom.com/opinions/frustrated-soleimani-wont-rest/

 
Comentarios

Aún no hay comentarios.

Deja un comentario

Debes estar conectado para publicar un comentario. Oprime aqui para conectarte.

¿Aún no te has registrado? Regístrate ahora para poder comentar.