“LA VOZ DE LOS SILENCIADOS”-Inquisición vigente en el Siglo XXI- por Martha Wolff

IDENTIDAD
-INDIVIDUO+DIVERSIDAD+DIÁLOGO+INTERRELIGIOSO=
CONVIVENCIA

Es una historia que nació de una presentación y luego una entrevista radial.

El testimonio franco y directo de una mujer que escuchó la confesión de su padre, que siempre había sido una transmisión familiar desde hacía más de 500, me llevó a contar su vida.

Hija única de padres de pertenencia religiosa dudosa, ni católica ni practicante de nada, la fue formando en la observación de su entorno y en ciertos datos confusos sobre la fe y hasta su acercamiento hacia el adventismo. En su andar de joven a través de esa iglesia se enamoró y su esposo resultó ser también mapuche. Estas dos identidades enriquecieron su vida hasta que supo su verdadero origen judío. El replanteo de su pertenencia, la búsqueda de sus raíces, el encontrar datos de su verdad ocultada, la felicidad de haber ido despejando sus dudas, la alegría de saber quién era y el replanteo de su decisión a sus familiares sobre la decisión de convertirse la hizo recorrer un camino de indagación y de esclarecimiento. No fue fácil enfrentar bajo un mismo techo la elección de respetar a los suyos sin dejar de ser ella misma. Y ante una familia en la que prevaleció el amor las diferencias se hicieron menos profundas y la convivencia una realidad.

Me siento privilegiada por haber conocido a una mujer tan transparente en su planteo así como a su esposo, ya que ambos me dieron su testimonio para poder armar el mapa de sus almas y raíces. Como escribí en la contratapa:”… al enterarse de que su apellido tenía origen judío, un secreto guardado por más de 500 años, Ana emprendió la fascinante búsqueda de sus verdadera identidad. Tuve la suerte de poder acompañarla en su travesía. A medida que las investigaciones históricas fueron avanzando, nos dimos cuenta de que no se trataba de una única historia, sino que estábamos desentrañando el silencio de los silenciados por la Inquisición de anteayer, de ayer y aún vigente.”

Estos dos poemas que escribí como prólogo y como epílogo del libro sintetizan su contenido:

PALABRAS PRELIMINARES…

Escribí este libro porque encontré una mujer singular.
Singular por su sensatez y por irradiar felicidad.
Felicidad para descifrar saber quién era.
Ella era otra.
Me la presentó su amiga.
Su amiga me contó su historia.
Ella me la detalló.
Yo me enamoré de su franqueza, de su simpleza.
Ella era otra.
Ahora es ella misma.
Su padre le confesó su verdadero origen.
Ella lo hizo carnadura
Bebió de las fuentes de la sabiduría.
Halló su identidad.
Ella es un Golem femenino.

PALABRAS FINALES…

Ana y su historia me conmovieron.
Su búsqueda y su encuentro me motivaron.
Madre y esposa, creyente y practicante,
Sola abrió un surco en la tierra de sus ancestros
Y sembró su pertenencia hasta ver florecer su identidad.
Mi libro para ella es un regalo a su valentía
Y otro para mí por haberla escuchado.
Decidir convertirse para ser judía
Por haber sido extraviada por centurias su fe
En un mundo de renuncias y conveniencias
Es haber agregado a mi ser judía ese regalo.
Ana, es la *teshuvá (retorno al origen) aquí en Buenos Aires.
La voz de los silenciados sigue buscando alguien que la escuche,
Alguien que no los olvide, alguien que como Ana
Volvió a su origen: una epopeya del siglo XXI.

*Teshuvá: palabra hebrea que significa volver a las raíces.