En un mundo de cuentos de hadas, se podría luchar contra el terrorismo sin violencia y sin que a nadie se le caiga un pelo. Sin tomar medidas firmes y sin que para salvar a unos, otros se vean afectadas. En realidad, en un mundo de cuentos de hadas, no habría terrorismo y por ende no sería necesario combatirlo. Pero dado que en la vida de todos los días son varias las luchas por librar, sin duda en Israel, siempre ...