– «La universidad debe ser tribuna de ideas, no espacio de pancartas…»
-“Es un secuestro permanente de la causa palestina por parte del yihaidismo, el islamismo, el panarabismo, todo el mundo ha usado la causa palestina”.
La universidad debiera recuperar su figura de tribuna de las ideas, de la inteligencia, en lugar de perpetuar los prejuicios o convertirse en el espacio de las pancartas. “No significa que los universitarios se queden sin las rebeliones, sin causas, deberían recuperar más las preguntas”, asegura la ex legisladora y periodista española Pilar Rahola.
Para la también filóloga y activista la esperanza para encontrar soluciones al conflicto en Medio Oriente está en la educación, en particular la de las mujeres.
“Ahí está la esperanza, porque en ningún lugar de ningún texto sagrado dice que los ciudadanos musulmanes tengan que vivir en dictaduras, tengan que vivir secuestrados, en la intolerancia, en el odio y en el fenómeno yihadista. No lo pone ningún texto sagrado”.
En su visita a México, Pilar Rahola (Barcelona, 1958), ex integrante del Consejo Asesor de la Transición Nacional española y miembro de honor de la Universidad de Tel Aviv, asegura en entrevista con EL UNIVERSAL que el futuro del islam está en la mujer musulmana.
La galardonada con el Premio Scopus 2007 por parte de la Universidad Hebrea de Jerusalén dice que es momento de darle mayor “voz a los musulmanes democráticos, porque siempre se les otorga a aquellos que tienen el cerebro lleno de odio e intolerancia, diciendo barbaridades sobre las mujeres y los homosexuales. Es momento de preguntar: ¿por qué los interlocutores no pueden ser las mujeres?
“Liberar a esa tierra y a esa gente de esa locura” es la propuesta de la periodista catalana.
En un hotel capitalino, la mujer que en la labor periodística estuvo presente en la guerra de los Balcanes, la primera guerra del Golfo, la caída del Muro de Berlín y el asalto al Parlamento Ruso, considera que en este momento la lucha no es contra los musulmanes, sino contra aquellos que utilizan el islam para el odio.
Autora de varios libros, Rahola considera que en el conflicto de Medio Oriente deben quedar claros al menos cuatro tópicos que pueden ser “provocadores”: que Israel no es parte del problema sino de la solución; que existe un conflicto localizado que en realidad es de tipo geopolítico en donde “todo el mundo toma decisiones”.
Además de que “la paz no está (no se construye) en Jerusalén ni en Ramalha, si no la quieren los iraníes, si no la quiere el yihadismo global, si no la quieren los sirios; es muy complicado que se pueda resolver (el conflicto)”.
Para encontrar una solución se debe asumir que “no hay solución en ese conflicto sin Israel, todas las soluciones pasan por Israel y la inmensa mayoría de las veces, los problemas no nacen en Israel y si no entendemos esto, si no entendemos que el pueblo palestino sólo tiene futuro con Israel”, será muy complicado lo que siga ocurriendo en esa zona después de seis décadas.
En el análisis que realiza, Rahola es tajante y afirma que hasta ahora “no hay ningún país solidario con los palestinos; los utilizan, les financian sus peores caras: ya sea el terrorismo, las bombas humanas, los mantienen en un planteamiento ideológico —desde mi punto de vista— antimoderno”.
Considera que “es un secuestro permanente de la causa palestina por parte del yihaidismo, el islamismo, el panarabismo, todo el mundo ha usado la causa palestina”.
Cuestiona que en el mundo existe una lupa diferente para mirar lo que ocurre en esa zona y el papel de Israel, por lo que insiste que “el problema no es Israel, de hecho no lo ha sido nunca, ni tan sólo el problema es Palestina, que tampoco debería serlo”.
Ello, frente grupos de poder de Egipto, Doha y Qatar que brindan apoyo a la población palestina en función del no respeto de derechos básicos.
La «solucion» a la situacion que vive medio oriente, y por extension el mundo árabe en su conjunto, se antoja complicada, desde el momento que los sistemas «educativos» implantados en esa área del mundo, inciden en la percepcion posterior de sus jóvenes respecto a occidente, y mas concretamente a Israel …
Trastocar este estado de cosas, implica hacerlo tambien en la orientacion politica adoptada por sus respectivos gobiernos, como paso previo, lo cual habla a las claras de la complejidad de tal empresa …
Honestamente, no atisbo como tal proceso se podriá llevar a cabo, máxime teniendo en cuenta, el nivel de fanatizacion alcanzado por la poblacion de esos paises, y la linea tendenciosa y continuista seguida por sus dirigentes …