Según los resultados publicados por los canales de televisión israelíes, los resultados de boca de urna de los comicios para la Knesset N° 20 en Israel atribuyen al premier Biniamín Netanyahu una posibilidad cómoda de formar un gobierno de derecha más homogéneo que el anterior. Sin embargo, esto no echa por tierra de modo total la posibilidad de formar un gobierno estrecho de centro-izquierda por parte de Itjzak Herzog, líder de Hamajané Hatzioní. Los analistas tampoco descartan la posibilidad de un gobierno de unidad nacional entre Likud y Hamajané Hatzioní.
He aquí los resultados según el Canal 2 de televisión:
Likud 28
Majané Tzioní 27
Lista Árabe Unificada 13
Yesh Atid (Lapid) 12
Kulanu (Kajlón) 9
Habait Hayehudí 8
Shas 7
Yahadut Hatorá 6
Meretz 5
Israel Beiteinu (Liberman) 5
Yajad (Eli Ishai) 0 (No alcanzó el umbral mínimo de 3,25%, 4 diputados)
Alé Yarok 0 (No alcanzó el umbral mínimo de 3,25%, 4 diputados)
Si estos son los resultados finales mañana miércoles a la mañana, Biniamín Netanyahu puede formar dos gobiernos: uno de derecha junto con los partidos religiosos, y otro de unidad nacional con Hamajané Hatzioní. Éste, en cambio, no puede formar gobierno de unidad nacional, y la formación de un gobierno de centro-izquierda, si bien es posible, estará sujeto a negociaciones arduas con asociaciones que pueden resultar endebles.
Escenarios:
1. Gobierno de derecha, Primer Ministro Biniamín Netanyahu:
Likud 28
Kulanu (Kajlón) 9
Habait Hayehudí 8
Shas 7
Yahadut Hatorá 6
Israel Beiteinu (Liberman) 5
Total diputados: 64
2. Gobierno de unidad nacional, Primer Ministro Biniamín Netanyahu o rotación con Itzjak Herzog:
Likud 28
Majané Tzioní 27
Kulanu (Kajlón) 9
Shas 7
Yahadut Hatorá 6
Total diputados: 77
3. Gobierno de centro izquierda, Primer Ministro Itzjak Herzog:
Majané Tzioní 27
Yesh Atid (Lapid) 12
Kulanu (Kajlón) 9
Shas 7
Meretz 5
Yahadut Hatorá 6
Total diputados: 66
Si bien la Lista Árabe Unificada apoyaría desde afuera a la coalición de centro-izquierda, Herzog necesita a Yahadut Hatorá, ultraortodoxos ashkenazim, para reclamar el derecho, siquiera, a intentar formar coalición. La dificultad está dada por la casi imposibilidad de que este partido religioso comparta el gabinete con Yesh Atid de Yair Lapid, responsable de la ley de reclutamiento de los estudiantes de ieshivá (casa de estudios religiosos).
La ventaja obtenida por el premier Netanyahu, después de sufrir una desventaja de cuatro mandatos en la última encuesta de intención de voto frente a Herzog (que lo aventajaba por 26 contra 22 diputados), se debió a la habilidad del primero en efectuar un bombardeo táctico de entrevistas en los medios y un contacto sin precedente con la calle israelí, donde llamó a los votantes tradicionales del Likud, dispersos por otros partidos mayormente nuevos (como Yajad) a “volver a casa”. El Likud pudo así “chupar” a último momento diputados, de partidos nuevos como Yajad, que quedó fuera del parlamento, y también de Habait Hayehudí.
A pesar de la decepción de los laboristas, la recuperación del Likud no fue a expensas de la alianza entre Herzog y Livni, sino de otros partidos de derecha. Hamajané Hatzioní mantuvo su nivel e incluso lo superó en un mandato, siempre los sondeos de boca de urna. Los resultados finales, mañana miércoles a la mañana.
Bien por la victoria. Fue el dedo de Dios. ¡Adelante!