Hoy el mundo es un lugar mucho más peligroso que ayer.
Las principales potencias internacionales han apostado nuestro futuro colectivo en un acuerdo con el principal patrocinador del terrorismo internacional. Han apostado que en un plazo de diez años, el régimen terrorista de Irán cambiará, removiendo a la vez cualquier incentivo para que lo haga. De hecho, el acuerdo le da a Irán todos los incentivos para que no cambie.
En la próxima década, el acuerdo premiará a Irán, el régimen terrorista de Teherán, con cientos de miles de millones de dólares. Esta prosperidad económica avivará el terrorismo iraní en todo el mundo, sus agresiones en la región y sus esfuerzos por destruir a Israel, los cuales ya están en curso.
Sorprendentemente, este mal acuerdo no requiere que Irán cese su agresivo comportamiento en ningún grado. Y no fue sino el viernes recién pasado que este tipo de comportamiento se hizo presente para que todos lo pudieran ver.
Mientras los negociadores sellaban el acuerdo en Viena, el supuestamente moderado presidente iraní decidió asistir a una manifestación en Teherán, y en esta manifestación, una multitud frenética quemó banderas de Estados Unidos e Israel y cantaron «Muerte a América, Muerte a Israel».
Esto no ocurrió hace cuatro años. Esto ocurrió hace cuatro días.
El Líder Supremo de Irán, el Ayatollah Khamenei, dijo el 21 de marzo que el acuerdo no limitará la agresión de Irán en ningún aspecto. Dijo: «Las negociaciones con Estados Unidos son sobre el tema nuclear y sobre nada más».
Y hace tres días volvió a dejarlo en claro. «Estados Unidos», dijo, «personifica la arrogancia mundial, y la batalla en contra de esto continuará sin cesar, incluso después de que el acuerdo sea pactado».
Esto es lo que dijo Hassan Nasrallah, el líder de Hezbolá, el representante terrorista de Irán, sobre el alivio en las sanciones, lo cual es un componente clave del acuerdo. Dijo: «Un Irán rico y fuerte podrá apoyar a todos sus aliados y amigos en la región más de lo que nunca haya podido hacer en el pasado».
El apoyo de Irán al terrorismo y la subversión se verá incrementado luego del acuerdo.
Además de llenar el botín de guerra iraní, este acuerdo repite los errores que se cometieron con Corea del Norte.
Con ellos también nos aseguraron que las inspecciones y verificaciones prevendrían que el malvado régimen desarrollara armas nucleares.
Y todos sabemos cómo terminó la historia.
El resumen de este mal acuerdo es exactamente lo que declaro hoy el presidente iraní: «La comunidad internacional está removiendo las sanciones e Irán está manteniendo su programa nuclear».
Al no desmantelar el programa nuclear de Irán, este acuerdo le dará en una década —a un régimen terrorista que no se ha arrepentido ni ha cambiado y que será mucho más rico— la capacidad de producir muchas bombas nucleares; de hecho, podrá producir todo un arsenal nuclear junto con los medios para lanzarlo.
¡Qué error histórico más sorprendente!
Israel no está limitado por este acuerdo con Irán; no está limitado por este acuerdo porque Irán continúa buscando nuestra destrucción.
Siempre nos defenderemos.
Muchas gracias.
Todo se reduce a números, 4 millones de barriles diarios son 240 millones de dólares, al mes:7200 millones, al año: 86.000 millones, si esto no es buen motivo para atraer a las moscas, cual es??. Ya están los franceses allí negociando y ya van los alemanes a negociar!!. Los griegos están fundidos y Europa los tiene que salvar, pues de donde saldrásn los fondos?, de irán, así de simple!!
Es un engaño creer que a alguien mas que Israel le importa el tema nuclear, ya no hay fantasmas, todos pueden tenerlas y nadie la puede usar, pues, supondría la auto-aniquilación mutua. Así que si se quisiera atacar a la infraestructura nuclear de Irán, con sus fortificaciones actuales, sería mucho mas productivo atacar sus instalaciones petroleras, pero esto supone, asegurarse que no devolverá el golpe, por lo tanto la destrucción debería ser total, ni pensar es esa posibilidad, por lo menos, Israel.
A las pruebas hemos de remitirnos, y la conclución es que Israel, no puede permitirse, depender de nadie, en cuanto a defrensa concierne, so pena de padecer las mismas consecuencias que ha sufrido por los últimos 2600 años.-