[Casas en una aldea de Nigeria, incendiadas por Boko Haram. Más de 100.000 niños se convierten en refugiados cada mes (Foto: AFP)]
Traducido para porisrael.org por José Blumenfeld
Medio millón de niños se convirtieron en refugiados en los últimos cinco meses, más de 100.000 niños por mes.
La atención de la comunidad internacional no se centra en ellos. Una muy pequeña minoría de diarios los menciona.
No está claro cuántos de ellos han muerto a causa de enfermedades Se han unido a 900.000 niños de la misma zona que se convirtieron en refugiados antes que ellos.
En total, 1,4 millones de niños, según un nuevo informe de la UNESCO, están viviendo en condiciones infernales. Y no hay llanto ni lamentos ni conmoción internacional y no hay manifestaciones en Múnich, París, Londres o San Francisco, ni a favor ni en contra de ellos. Simplemente parecen no existir.
Pero sí existen. Niños de carne y hueso. Son víctimas del miedo sembrado por la organización terrorista Boko Haram.
Sí, es otra rama de la jihad. Y estos niños que sufren, la mayoría menores de cinco años, están huyendo de las zonas afectadas por conflictos en Chad, Camerún, Níger y, por supuesto, Nigeria. Musulmanes están masacrando musulmanes. Y el mundo está en silencio. ¿A quién le importa?
¿Dónde está la conciencia de la humanidad? No la busquen. La conciencia en estos días es un programa de televisión. Un niño, Aylan Kurdi, se convirtió en un icono únicamente porque una cámara lo documentó arrastrado a la playa. Otra víctima de la jihad.
Las últimas palabras del niño: «Papá, no te mueras», eso dijo o no lo dijo, cuando las olas del mar lo depositaron en la orilla – todo aumentó el drama. Hay una historia humana allí. Millones son una estadística. Pero sólo una, si hay una cámara en la zona, es un drama mundial.
No es que el mundo no sabe nada de los otros millones. Después de todo, zonas de África han sido un caos total durante años. Sabemos y nos distanciamos. Sabemos e ignoramos. Nuestra conciencia colectiva está esperando una cámara. De lo contrario, no se despierta.
Pero no hay moralidad aquí. Quien ignore que hoy en día hay un terrible monstruo que produce destrucción y la muerte de millones – es inmoral. Quien ignore que desde hace años un enorme flujo de capitales ha estado yendo desde Arabia Saudita y Qatar a los centros de organizaciones islámicas radicales y terroristas como Hamas – es inmoral.
Alguien cuya conciencia se despierta sólo con un videoclip es un humanista de sillón. Tal vez envíe sus viejas ropas a centros de absorción de refugiados en lugar de tirarlas a la basura, pero esto no cambiará el nivel de sufrimiento. Y la moralidad que no se ocupa del sufrimiento, la moralidad que es una telenovela, es una manipulación de la moralidad.
¿Cómo afecta esto a Israel? Nadie se preocupa por los palestinos y la ocupación le interesa al mundo tanto como la nieve del año pasado. Después de todo, los palestinos han estado languideciendo en campamentos de refugiados en el Líbano desde hace décadas. Sufren del apartheid en todos los sentidos, desde ser excluidos de ciertas profesiones populares hasta restricciones para construir, y así sucesivamente.
Incluso UNRWA, que no ama a Israel, publicó un informe sobre el traumático estado de los que permanecen en los campamentos de refugiados allí. Nadie en los ricos países árabes se preocupa por el estado de los refugiados, no en la década de los años 1950 ni tampoco ahora. Ellos se preocupan por una sola cosa: El flujo de fondos para la difusión de la educación islámica, con el fin de crear nuevas generaciones de la jihad, lo que creará más destrucción y refugiados.
El mundo libre también es indiferente a la difícil situación de los palestinos en el Líbano, que sólo pueden soñar con las mismas condiciones en las que viven los palestinos bajo dominio israelí. Porque allí, en el Líbano, no están luchando contra Israel. Porque no hay cámaras allí. Porque para activar la conciencia de los hipócritas se necesita un videoclip en el que una niña palestina – rubia por supuesto, que sale mucho mejor en la foto – muerde a un soldado que muestra un notable control.
Esta niña es especialmente demandada. Es exhibida en muchas películas Pallywood. Todo niño palestino en el Líbano, todo niño refugiado en campamentos de refugiados en Turquía, Jordania, el Líbano y, por supuesto, en África, vendería a su madre para estar en su lugar. La última frase es una cita de Slavoj Zizek, filósofo estrella de rock y anti-Israel al igual que toda la manada de intelectuales occidentales, que se vieron obligados a admitir que esa situación de los palestinos es mil veces mejor que la verdaderamente miserable de este mundo.
[Los gobernantes de Qatar y Arabia Saudita. Ambos han estado patrocinando el radicalismo islámico durante años (Foto: Reuters)]
Cuando el anterior ministro de educación, Yossi Sarid, escribe que no ama a su país, a causa de la chica que mordió al soldado, tenemos ante nosotros otra muestra de manipulación moral. Muchos más palestinos fueron lastimados mientras él era ministro. Integraba el equipo de negociación que ofreció a los palestinos un estado en las fronteras de 1967. No ayudó. Pasaron los años. Los palestinos siguieron rechazando. Pero el odio, la amargura, la propaganda y las mentiras abrumaron a Sarid. ¿Cuáles son los hechos para él? Él se preocupa con las cámaras. Pero no lo llamen moralidad, conciencia o compasión.
Las cámaras en África podrían añadir algo a la compasión humana. Pero no van allí. No hay videoclips sobre el cólera que está consumiendo a 1,4 millones de niños. Están fuera del marco. Las pantallas están ocupadas mostrando videos de B’Tselem.
Los cazadores-fotógrafos se sientan allí durante horas, días, semanas, meses y años, la mayor cantidad de fotógrafos per cápita del mundo. Fotografían todo. Aquí y allá, una vez cada pocos meses, logran atrapar algo. Una niña rubia que muerde a un soldado. Guau.
Si esos son el despojo de la avalancha de cámaras, un solo evento una vez cada pocos meses, alguien con conciencia debería gritar: ¿Es esta la historia? ¿Esto es lo que ha logrado? Después de todo, incluso en Dinamarca se puede encontrar policías que son menos controlados frente a manifestantes. No hay nada que decir acerca de policías estadounidenses. De hecho, los soldados israelíes, bajo las circunstancias y la provocación, son increíblemente misericordiosos. No matan en masa. No disparan indiscriminadamente. No torturan. Una vez cada pocos meses hay soldados que matan, las excepciones confirman la regla. Y la regla es comportamiento controlado y moral.
En lugar de despreciar al estado, Sarid debería haberle dado al soldado una medalla. Pero Sarid es un soldado en el ejército de la incitación. Se puede contar con que los que parecen preocuparse por los derechos humanos difundan sus productos en todo el mundo.
Se puede contar con la comunidad internacional comprando felizmente bienes. Y el resultado es que habrá mucha más cobertura de una niña rubia, una actriz de serie, que de 1,4 millones de niños en África, cuyas vidas son miserables. Después de todo no están combatiendo a Israel. Son víctimas de la jihad global. Y no hay cámaras allí.
[El soldado israelí mordido por una niña palestina (Foto: Reuters)]
Este resultado es uno de los mayores fraudes de la opinión internacional. El resultado es una campaña de odio contra Israel. El resultado es ignorar el sufrimiento genuino en el mundo. La responsabilidad es de «B’Tselem» y de la abundancia de artículos incitantes. La manipulación está ganando. Y a causa de esta distorsión de la moralidad, millones siguen siendo desdichados. Ellos son las víctimas de la jihad global, desde Siria hasta Somalia, desde Libia hasta Irán, desde Afganistán hasta Camerún.
Y en lugar de combatir contra una ideología asesina, Zizek, Judith Butler, Jeremy Corbyn y el resto de las «fuerzas progresistas» se preocupan por suministrar niñas, justificaciones y empatía para una ideología que ocasiona destrucción, opresión, ruina y derramamiento de sangre. Envían paquetes de ayuda al régimen terrorista de Hamas, y Noam Chomsky incluso se puso de pie para honrar a Nasrallah. Todo en nombre del progreso. Y arrojan barro sobre el único país del mundo que está luchando contra la jihad.
La izquierda mundial seguirá limpiando su conciencia con boicots y manifestaciones contra Israel. B’Tselem continuará proporcionando videoclips con el fin de echar aceite sobre el fuego. Preferiblemente con una niña rubia, llamativa y hermosa. Así es como se puede distorsionar la realidad. Así es como se puede ignorar al monstruo que crea millones de refugiados. Nos vemos en la próxima manifestación contra Israel, en Londres o San Francisco. Y no se olvide de las banderas de Hamas y de Hezbollah
Es realmente trágico lo que ocurre en Nigeria aunque las cámaras occidentales no se enciendan ahí con frecuencia. Pero el problema es solo de Nigeria ? no, para nada. Tampoco es un problema nuevo, en todo caso es un estilo nuevo, la de moda, culpar al islam. Boko Haram es un mounstro de reciente y oportuna aparición, comienza en 2010, curiosamente casi a la vez que las «revoluciones de colores» que dieron su primer batacazo en Túnez con sonado éxito para deleite de sus ideólogos e instigadores, la Hermamdad Musulmana y los halcones de Washington con sus socios de Oriente Medio. Un mounstro al que
tenian con collar y correa y lo hacían morder a discreción y conveniencia desde los años 50. Pero el mounstro hoy muerde incluso sin que el domador del circo se lo indique y ahí tenemos un problema. Pero volviendo a Nigeria, no es casual los problemas que tiene, ya muchos años antes de Boko teníamos al régimen carnicero del general Sani Abacha, que venía ejecutando a 100 personas por año, en fusilamientos y/o ahorcamientos convertidos en espectáculos públicos. Como dijo Roosevelt una vez sobre Somoza, «es nuestro hijo de puta», que ante el asombro y repudio del mundo con la ejecución del escritor nigeriano Ken Saro-Wiwa en 1995 obligó a declarar a Clinton que suspendería la venta de armas a Nigeria, casi una confesión involuntaria de que era nuestro HDP. Obviamente a empresas como Shell y Chevron le conviene una situación estable para hacer su mejor negocio y un dictador brutal es lo ideal.
No es casual que Nigeria tenga petróleo y a Boko Haram, a la vez ahora. Pero el problema de ese país viene de mucho tiempo atrás, desde que era una colonia británica y como convenientemente se dividió a su población originaria, pero eso es otra historia. Es un drama lo que pasa en Nigeria y no sale en los
medios pero no solo es Nigeria la que no sale en los mass media occidentales hoy, tampoco sale Yemen por ejemplo entre otros lugares trágicos como Sudán. Que el autor de este artículo quiera usarlo de excusa para victimizarse porque las cámaras occidentales prestan mas atención a lo que sucede en la entidad sionista como que no estuviese enterado desde donde vienen en Nigeria y el porqué, es un escarnio a sus victimas.