Nuevos informes sobre el brutal tratamiento que están sufriendo los cristianos y otras minorías a manos del Estado Islámico (ISIS por sus siglas en ingles) han sido dados a conocer por Human Right Watch (HRW). El extenso informe fue recogido y publicado por la prensa británica, que cita numerosos testimonios y cantidad de reportes probatorios que serán remitidos a solicitud de la Corte Penal Internacional.
Uno de los casos trata sobre un matrimonio sirio de cristianos ortodoxos griegos que una semana después de que sus hijas de 14 y 16 años fueran secuestradas por terroristas de ISIS, denunciaron a HRW los hechos sucedidos a partir de responder un llamado en la puerta de su casa donde encontraron una bolsa de plástico que contenía partes de los cuerpos de sus hijas y un video de ellas siendo brutalmente torturadas y violadas antes de ser asesinadas.
Otra madre cristiana de Mosul, que logró salir de Siria y reside en Londres, declaró que una mañana abrió la puerta de su casa ante el llamado de un grupo de yihadistas quienes le exigieron comenzar a pagar la yizya (dinero de protección que se exige como tributo a cristianos y judíos conquistados, de acuerdo con el Corán 9:29). La mujer pidió una semana de tiempo para reunir el dinero, su hija estaba en la ducha en ese momento, los terroristas se negaron a darle tiempo. Prendieron fuego la casa. La niña de 13 años murió quemada viva.
El cristianismo es una de las minorías que más sufre el asedio de ISIS
Según el informe de HRW, ISIS decapitó un sacerdote cristiano en el mes de mayo. No hay medios de comunicación que informaron ese crimen a excepción de un diario italiano que la primera semana de agosto tomó conocimiento del asesinato por medio de un inmigrante sirio testigo de los hechos: «Hay informes fiables que el padre Boulos Yacob, fue decapitado por militantes del grupo terrorista mientras ofrecía misa en el altar de su iglesia junto a 23 de sus fieles. Según el testigo denunciante: ‘fueron castigados por su fe'».
El ejemplo más inquietante de genocidio hacia los cristianos y otras minorías religiosas en a manos de islamistas, fue cuando el Estado Islámico entró en un pueblo cercano de la ciudad de Hama, Siria, habitado sólo por cristianos y alawitas, donde asesinaron un número aún no determinado de hombres, mujeres y niños. Los hombres fueron decapitados, mientras las mujeres eran violadas y luego asesinadas. Muchos niños también fueron ejecutados.
No está claro aún con exactitud cuántas personas han muerto, declaró un líder cristiano local a la cadena Al Jazzera, preguntándose:«¿Dónde están los líderes de Occidente, Ban Ki-Moon (Secretario General de la ONU), la UE, la OMS (Organización Mundial de la Salud), y otras organizaciones cristianas? ¿Cuánto tiempo mi nación deberá tolerar esto y dejarse asesinar. Nosotros no tenemos armas y nos están exterminando. ¿Es posible que nuestro sufrimiento no llegue al Papa Francisco y al mundo?».
Millones de personas se vieron obligadas a desplazarse de Siria
Otro testimonio recabado para la Corte Penal Internacional es el delPadre Douglas Bazi, un sacerdote iraquí que fue secuestrado por ISIS y relató su experiencia como cautivo.
«Destruyeron mi coche, volaron mi iglesia frente a mí. Me dispararon con un AK-47, la bala está todavía en mi pierna. Fui secuestrado durante nueve días en los que me rompieron la nariz y los dientes con un martillo», declaró el sacerdote, que fue liberado después que personas de su iglesia pagaran por su rescate, aunque finalmente tuvo que huir de la región por la continua persecución de los yihadistas.
«Ser cristiano en Irak, es una misión imposible», reconoció el padre Bazi. «No me sorprendió que esos criminales atacaran mi pueblo. Me alegra que algunos fieles salvaran sus vidas por milagro de Dios. El mundo debe conocer nuestras historias. Debe saber lo que nos pasa», agregó.
El resto del informe de HRW sobre la persecución de cristianos a manos de musulmanes en todo el mundo no se limita solo a la región bajo dominio de ISIS.
En Uganda, un pastor cristiano de una iglesia Bautista fue envenenado por un militante musulmán. Miqueas Byamukama, de 61 años, murió en mayo, después de ingerir un insecticida que Ahmed Mupere puso en su comida. Ahmed envenenó al pastor porque habló de literatura islámica, incluyendo el Corán. Cinco días después de la discusión, Ahmed, fingiendo no estar enfadado simuló una reconciliación e invitó a cenar al pastor para poner veneno en su comida. Un médico que atendió a la victima declaró a la policía que murió a causa de la ingestión de un insecticida altamente tóxico. Cuando comenzó la investigación, Ahmed huyó. El incidente no fue aislado, formó parte de una serie de ataques, incluyendo otras muertes por envenenamiento de varios cristianos a manos de musulmanes en el Este de Uganda.
Además de la amenaza de ISIS, los cristianos son amenazados en varias partes de Medio Oriente
En otro incidente en el país ubicado en África occidental, un hombre musulmán estranguló a su esposa hasta la muerte por dejar el Islam y convertirse al cristianismo. Awali Kakaire, de 34 años, sospechó que su esposa Mariam Nakiriya, se había convertido al cristianismo. Cuando el imán local le preguntó por qué su esposa e hijos no asistían a la mezquita y la madrasa (escuela islámica). De acuerdo con uno de los hijos de Kakaire: «Nuestro padre despertó a las 6 de la mañana y llamó a su madre para unirse a él en las oraciones de la mañana, nuestra madre se negó, y nuestro padre la mató», dijo su hijo. Kakaire logró escapar y el crimen continúa impune.
«Hombres de ISIS asesinaron un médico cristiano en Kushtia». Así lo anunció un breve comunicado emitido en árabe. El doctor Sanaur Rahman, de 58 años, fue atacado por los terroristas y asesinado a machetazos, en Bangladesh. El médico era muy popular en su pueblo por brindar atención y medicamentos a los pobres de forma gratuita. Su caso también irá a la Corte Penal Internacional.
En el Congo, por su parte, terroristas musulmanes mataron a decenas de aldeanos cristianos en la zona Este del país. Las muertes fueron a machetes y hachas en un pueblo de la provincia de Kivu, al Norte y durante la noche del 3 de mayo. Fuentes locales dijeron que 38 personas fueron asesinadas, incluyendo dos líderes cristianos evangélicos y sus esposas. Según el informe de HRW.
En Sudan el secuestro y asesinato de cristianos es común. El gobierno islámico no hace nada para impedir esto. Se sabe que para la tarea, los musulmanes locales reclutan extranjeros que obligan a los cristianos a convertirse al Islam, de no hacerlo, los asesinan. En una carta publicada hace un año, los Obispos congoleños denunciaron «un clima de genocidio y pasividad del gobierno y la comunidad internacional».
Movilización del Estado Islámico en Mosul (AP)
El 20 de mayo, una mujer cristiana de 70 años de edad, fue desnudada, golpeada salvajemente y violada por varios sujetos al grito de «Alla’hu Akbar» en Egipto. Su crimen era que su hijo fue acusado de tener una relación sentimental con una mujer musulmana, algo prohibido por la ley islámica (sharia).
Recientemente siete iglesias fueron quemadas hasta los cimientos en Tanzania. «Desde 2013 hemos tenido más de 13 iglesias incendiadas en Kagera y nadie ha rendido cuentas», declaró para el informe de HRW Fortunato Bijura, un pastor local. Y agregó: «Tanzania era aproximadamente un 35% musulmana hasta 2013 hoy es 65% islámica».
En Alemania, en tanto, el informe afirma que unos 40.000 cristianos incluyendo a musulmanes convertidos al cristianismo están siendo atacados por musulmanes que residen en hogares de inmigrantes. Según las autoridades alemanas, muchos conversos -al cristianismo- deseaban hacerlo en su tierra natal, pero en Irán o Afganistán la sanción por abandonar la fe islámica puede ser la muerte, por lo que huyeron a Europa. Ahora, en los hogares de asilo están cada vez más en igual peligro ante musulmanes radicales europeos como lo estaban en su país de origen.
En Turquía, aliado de EE.UU. y miembro de la OTAN, se ayuda al Estado islámico en Siria a que maten cristianos proporcionándoles cobertura aérea y «refugio seguro», dijo Mindy Belz, activista y editor en jefe de la revista World.
A pesar del acuerdo nuclear con la administración Obama, la Comisión de EE.UU. sobre Libertad Religiosa Internacional ha encontrado que las minorías religiosas en Irán, incluidos los cristianos, continúan experimentando graves abusos de derechos humanos. El informe indica que las condiciones de libertad religiosa se han deteriorado desde el año pasado con los cristianos, los bahá’ís y la minoría musulmana sunita. En la administración del presidenteHassan Rouhani, las detenciones de índole religiosa aumentaron a pesar que Irán niega violaciones a los derechos de libertad religiosa de las personas. El informe señala que unos 550 cristianos han sido detenidos y recluidos desde 2015, y al menos 90 permanecen en prisión desde febrero de este año por sus creencias religiosas.
Dios cobrará muy caro estas cosas.