Un documento de la Cancillería, aprobado por el Primer Ministro, el cual llegó a “Maariv”, hace hincapié ante los gobiernos extranjeros que: “La ley será revisada por el Tribunal Supremo”. Se puede ver esto como una confirmación de la especulación que afirmaba que Netanyahu se opuso a la ley, pero tenía miedo a las reacciones de la derecha.
Un documento oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores, aprobado por el primer ministro Binyamin Netanyahu, que toca el tema de la Ley de Regulación, resalta que es probable que la ley, aprobada la semana pasada en la Knesset, sea cancelada por el Tribunal Supremo. El documento fue distribuido por el Departamento de Hasbará del Ministerio de Asuntos Exteriores para las representaciones en todo el mundo para permitirle a las diferentes misiones explicar la ley y el fondo de la misma. En realidad fue redactado por el asesor político del primer ministro, Jonathan Schejter y el asesor para asuntos de los medios extranjeros David Keys. El documento, redactado en inglés, contiene ocho puntos. El último párrafo establece que “toda ley de la Knesset (Parlamento israelí) puede ser revisada por el Tribunal Supremo”.
Recordemos, el primer ministro estaba en contra de la ley e hizo hincapié en que a Israel le va a causar problemas frente a la comunidad internacional y podría exponerla a demandas en la Corte Internacional. El documento confirma la evaluación del primer ministro y de algunos ministros que se opusieron a la ley, pero votaron a favor por miedo a la respuesta de los votantes de derecha. El documento revela que los oponentes a la ley colocan ahora sus esperanzas en el Tribunal Supremo, que puede salvar a Israel del aislamiento internacional que podría provocar dicha ley.
Las siete secciones restantes destacan las razones que se explican también en Israel, que en virtud de la nueva ley los propietarios palestinos serán compensados y que el proceso de regulación determina que la tenencia de la tierra será transferida a las autoridades hasta encontrar una “solución diplomática”.
La Ley de Reglamentación, aprobada por la Knesset esta semana, permite la expropiación de tierras pertenecientes a palestinos sobre donde fueron construidas casas ilegales de colonos en asentamientos judíos. A cambio, los palestinos serían compensados en aproximadamente un 125% del valor de la propiedad. Se trata de una ley excepcional que fue criticada fuertemente, tanto a causa de que hacer una diferencia entre judíos y palestinos y por el hecho que la ley permite la expropiación de la propiedad privada no para fines públicos y algo así es extremadamente raro.
La diputada que propuso la ley, diputada Shuli Mualem Rafaeli del partido Bait Hayehudí (La Casa Judía) dijo que: “Este es un día histórico con la aprobación de una ley histórica. Los hogares de los ciudadanos que construyen sus hogares en Judea y Samaria alentados por los sucesivos gobiernos israelíes que ya no será un objetivo para las organizaciones de izquierda, cuyo objetivo es destruir y perjudicar a los asentamientos. El Tribunal Supremo debe entender que ellos no deben ser arrastrados a intervenir en claros temas políticos. Si se hace esto, vamos a trabajar para promover una ley que saltee dichas limitaciones incluyendo la aplicación de la ley israelí sobre todo Judea y Samaria”.
Debes estar conectado para publicar un comentario. Oprime aqui para conectarte.
¿Aún no te has registrado? Regístrate ahora para poder comentar.