Traducido para Porisrael.org por Yetty Blum
La Policía verifica si los perpetradores tenían ayuda del grupo jordano que administra el sitio, dijo el canal 10.
Policías fronterizos caminan en el Monte del Templo después de un tiroteo en la zona dejó tres heridos, dos de ellos seriamente, el 14 de julio de 2017. (Policía de Israel)
La policía de Israel realizó una serie de arrestos tras el mortal ataque terrorista en el Monte del Templo en Jerusalén el viernes por la mañana, que cobró la vida de dos oficiales de policía israelíes y oficiales estaban a la caza de sospechosos adicionales que podrían haber ayudado a los tres árabes-israelíes, dijo la policía.
También se llevaron a cabo incursiones en las casas de los terroristas, todos de la ciudad de Umm al-Fahm, en el norte de Israel, y se desintegró una carpa de duelo para los terroristas.
El Canal 10 informó el viernes que entre los detenidos había al menos un funcionario del Waqf islámico de Jerusalén, la organización con sede en Jordania que administra el Monte del Templo, bajo sospecha de que los tiradores recibieron ayuda desde el interior.
El canal dijo que el funcionario fue visto en imágenes de seguridad con un comportamiento sospechoso.
La policía también dijo que detuvieron a una persona, de 22 años de edad, de la ciudad norteña, sospechando que estaba directamente involucrado en el ataque.
La policía no ha indicado qué tipo de asistencia creen que el oficial Waqf proporcionó, aunque Channel 10 dijo que pudo haber ayudado a los tiradores a esconder las armas usadas en el ataque. Se impuso una orden de secreto sobre otros aspectos de la investigación relativa al Waqf.
El Canal 10 señaló que la situación era complicada por el hecho de que el grupo de custodio responde a Jordania, no a Israel.
Las noticias del Canal 2 decían más vagamente que era posible que los terroristas hubieran recibido ayuda desde el interior del complejo y que ésta era una de las razones por las que la policía había ordenado el cierre de la zona, y por primera vez en décadas, se llevarían a cabo revisiones de seguridad.
Armas de los terroristas
Los terroristas, Muhammad Ahmed Muhammad Jabarin, de 29 años, Muhammad Hamad Abdel Latif Jabarin, 19 y Muhammad Ahmed Mafdal Jabarin, de 19 años, utilizaron dos subfusiles tipo Carlo y una pistola para llevar a cabo el ataque. Uno de ellos también intentó apuñalar a un oficial después de ser aprehendido.
Después del tiroteo, los terroristas huyeron hacia el Monte del Templo y otros oficiales les dieron caza. La policía abrió fuego, disparando a los terroristas que fueron muertos dentro del complejo.
En imágenes filmadas por la policía el viernes, los terroristas pueden ser vistos corriendo armados desde el Monte del Templo hasta un callejón donde los oficiales, Haiel Sitawe, 30 y Kamil Shnaan, 22, estaban estacionados y dispararon contra ellos.
Master Sgt. Kamil Shnaan, left, and Master Sgt. Haiel Sitawe, asesinados por los terroristas.
Informes durante todo el viernes dijeron que los dos agentes de policía fueron asesinados justo fuera del complejo del Monte del Templo. Sin embargo, el Canal 2 informó el viernes que el segundo policía pudo haber sido asesinado por los asaltantes en el propio monte, después de que habían escapado.
No se sabía de inmediato cómo los terroristas llevaron las armas al lugar sagrado. Los visitantes musulmanes al complejo del Monte del Templo pasan por un control de seguridad menos riguroso que los visitantes no musulmanes que entran a través del Puente de Mughrabi.
El jefe de la policía de Jerusalén, Yoram Halevi, dijo el viernes que los oficiales estaban detectando el Monte del Templo, con la ayuda del Waqf, para buscar más armas.
Después del ataque, el primer ministro Benjamín Netanyahu convocó una reunión con la autoridad máxima de defensa, durante la cual decidieron cerrar el sitio sagrado para el día, un movimiento dramático dado que los viernes son un día santo en el Islam, cuando muchos viajan al Monte del Templo para orar. Israel cerró el recinto por primera vez desde 1969, diciendo que estaba llevando a cabo controles de seguridad, incluso por más armas. Halevi hizo cumplir la decisión, ordenando que el complejo fuera despejado y las entradas al sitio sagrado cerradas. La policía también colocó puestos de control en las entradas a la Ciudad Vieja.
Siguiendo la operación de detección, Halevi dijo que daría su recomendación al gobierno sobre si reabrir el sitio, el más sagrado en el judaísmo. Jordania había instado a Israel, que es responsable de la seguridad de el sitio, de «reabrir de inmediato» el compuesto de Haram al-Sharif, como se le hace referencia en árabe. El sitio también alberga el santuario de la Cúpula de la Roca y es el tercer lugar más sagrado en el Islam. «Israel debe reabrir la mezquita de Al-Aqsa y el Haram al-Sharif (compuesto) de inmediato», dijo el portavoz del gobierno Mohamed Momani, que es también Ministro de información.
Agregó en una declaración llevada a cabo por la agencia de noticias oficial de Petra que Israel debe «abstenerse de tomar cualquier paso encaminado a cambiar el» statu quo histórico. Israel ha negado repetidamente de hacerlo, incluyendo el viernes.
El ministro de Seguridad Pública Gilad Erdan , que es responsable de la policía, calificó el ataque de «un acontecimiento extremadamente grave que cruzó todas las líneas rojas. La investigación está en curso. Necesitaremos reevaluar todos los arreglos de seguridad en el Monte del Templo y sus alrededores. Hago un llamamiento a todos los líderes públicos para que actúen para calmar la situación y asegurar la tranquilidad en Jerusalén «.
Después del ataque, muchos políticos y activistas de derecha llamaron a cambiar los arreglos de larga data en el lugar sagrado que permiten la oración musulmana allí pero prohíben la oración judía y los rituales religiosos. Sin embargo, Netanyahu rechazó esas peticiones con una declaración contundente de su oficina diciendo que «el statu quo estará protegido».
Después del ataque, Israel detuvo brevemente luego liberó al gran mufti de Jerusalén. Dijo que fue puesto en libertad sin cargos después de ser interrogado sobre su llamado a los musulmanes a venir a Jerusalén tras el cierre del Monte del Templo a los fieles, a raíz del ataque. En un discurso en la Ciudad Vieja, el clérigo había condenado el cierre, Israel dijo que se hizo por razones de seguridad, incluyendo la búsqueda de armas. Hussein pidió a las masas musulmanas que inundaran el lugar sagrado y condenó lo que él llamó la «agresión» israelí del viernes, informó la Radio del Ejército – una presunta referencia al cierre del sitio y / o al disparo de las fuerzas israelíes contra los asaltantes. Ningún grupo terrorista asumió la responsabilidad inmediata del ataque, aunque Hamas lo elogió, diciendo que era una «respuesta natural» al terrorismo israelí «.
La AFP contribuyó a este informe
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