El Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, durante su visita a Ramallah, el 29 de agosto de 2017. (Fuente de la imagen: Foto de la ONU / Ahed Izhiman)
Traducido para PorIsrael.org por Yetty Blum
Una de las madres que asistieron a la reunión con el jefe de la ONU fue Latifa Abu Hmaid. Cuatro de sus hijos, Nasser, Sharif, Nasr y Mohammed están cumpliendo múltiples penas de cadena perpetua por su papel en el terrorismo. La Autoridad Palestina (AP) eligió a la madre de estos terroristas porque todos son miembros de la facción del Fatah, del presidente Mahmoud Abbas y que los medios de comunicación occidentales describen regularmente como un partido palestino moderado y pragmático que cree en la solución de los dos estados y la paz con Israel.
El mínimo que el jefe de la ONU y sus ayudantes podrían haber hecho es llamar a la dirección de la AP y condenarla por la emboscada y el informe fabricado de la agencia de noticias oficial palestina. Si Israel hubiese estado involucrado en un incidente similar, habríamos presenciado una crisis diplomática, provocada por el secretario general de la ONU y sus portavoces, así como por los medios de comunicación internacionales. Los palestinos, como de costumbre, reciben un pase.
La mentira sobre los «extremistas judíos» que prendieron fuego a la Mezquita de Al-Aqsa se ha extendido y aceptado de tal manera que incluso eruditos musulmanes como el Gran Mufti de Abbas, el jeque Mohamed Hussein, también han estado difundiendo el libelo de sangre. Él y la mayoría de los palestinos continúan describiendo al incendiario cristiano australiano como un «extremista judío».
Según la máquina de propaganda palestina, casi sin excepción, los terroristas estaban de camino a comprar pan para sus madres o visitar a sus abuelas. Estas eran víctimas inocentes, según la historia, detenidas o fusiladas por Israel sin motivo alguno. Luego tenemos las mentiras sobre los israelíes que «plantan» cuchillos cerca de los cuerpos de terroristas que apuñalan o intentan asesinar a judíos. Periodistas occidentales y otros aceptan estas mentiras como hechos.
Las noticias falsas son una vieja historia en el mundo palestino. Sin embargo, recientemente, falsas noticias han sido llevadas a nuevas alturas por embaucadores palestinos, que han estado trabajando horas extras para engañar a la comunidad internacional y los medios de comunicación. Una serie de historias publicadas en los últimos días en los medios de comunicación palestinos demuestran hasta qué punto los palestinos están dispuestos a ir a engañar al mundo e impactar a la opinión pública internacional.
La excelencia es a menudo una virtud – excepto cuando uno sobresale en la mentira. Y si hay una cosa en la que los palestinos han sobresalido en las últimas décadas, es que estuvieron esparciendo mentiras sobre su conflicto con Israel. Los principales medios de comunicación en Occidente usualmente toman el cebo de las falsas noticias: ¡venden papeles! – y demuestran tolerancia, si no simpatía, hacia la fabricación de noticias falsas producidas por palestinos.
El caso más reciente de falsas noticias palestinas surgió durante la visita del secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, a Ramallah, la capital de facto de los palestinos. El jefe de la ONU, que no parece estar familiarizado con la cultura palestina de mentiras, fue víctima de un truco típico de relaciones públicas organizado por sus anfitriones palestinos.
De acuerdo con la agencia de noticias Wafa, el órgano oficial de la Autoridad Palestina (AP), Guterres «celebró una reunión el martes por la noche (29 de agosto) con familias de mártires palestinos y prisioneros detenidos en prisiones de ocupación israelíes». El informe dijo que las familias pidieron al secretario general de la ONU que tome medidas rápidas y serias para salvar la vida de más de 6500 prisioneros y presas detenidos en prisiones israelíes. Wafa citó a Guterres diciendo: «Entendemos el sufrimiento de los prisioneros palestinos y trabajaremos con los partidos pertinentes para poner fin a su sufrimiento».
En primer lugar, debería ser de interés que los «prisioneros» y «mártires» sean palestinos que estuvieron involucrados, directa e indirectamente, en ataques terroristas. Muchos de los prisioneros tienen sangre judía en sus manos y fueron condenados por crímenes a menudo indescriptibles.
En segundo lugar, rápidamente quedó claro que la reunión entre el jefe de la ONU y las familias palestinas era parte de una emboscada organizada por sus anfitriones palestinos en Ramallah. Según un portavoz de la ONU, Guterres se sorprendió por la súbita petición de la Autoridad Palestina de reunirse con las «madres de niños detenidos», pero aceptó reunirse con ellos. A su gran crédito, Guterres también emitió una aclaración que el informe en Wafa que había expresado simpatía por la situación de los prisioneros fue «fabricado».
En tercer lugar, cabe destacar que una de las madres que asistieron a la reunión con el jefe de la ONU fue Latifa Abu Hmaid, del campo de refugiados de Al-Ama’ri, cerca de Ramallah. Cuatro de sus hijos, Nasser, Sharif, Nasr y Mohammed están cumpliendo múltiples penas de cadena perpetua por su papel en el terrorismo. La Autoridad Palestina eligió a la madre de estos terroristas porque todos son miembros de la facción Fatah del presidente Mahmoud Abbas, que los medios occidentales describen regularmente como un partido palestino moderado y pragmático que cree en la solución de dos Estados y en la paz con Israel.
La respuesta del portavoz del jefe de la ONU a la «el informe de la agencia de noticias Wafa de Abbas y la reunión no programada con las familias de los «prisioneros «y» mártires» es un buen ejemplo de cómo la Autoridad Palestina manipula al máximo diplomático del mundo. La AP y otros palestinos, sin embargo, lo mínimo que el jefe de la ONU y sus ayudantes podrían haber hecho es llamar a la dirección de la Autoridad Palestina y condenarla por la emboscada y el informe fabricado en la agencia oficial de noticias palestina.
Si Israel hubiera estado involucrado en un incidente similar, habría sido testigo de una crisis diplomática, provocada por el secretario general de la ONU y sus portavoces, así como por los medios de comunicación internacionales. Los palestinos, como de costumbre, reciben un salvoconducto.
En otro ejemplo de noticias falsas palestinas diseñadas para calumniar a Israel y ganar simpatía internacional, varios medios de comunicación palestinos han estado reportando durante el pasado semana que una agente femenina israelí disfrazada de enfermera ha sido descubierta en un hospital palestino en Hebrón. Según los informes falsos, la «enfermera» era un colono israelí que había ayudado a las Fuerzas de Defensa de Israel a infiltrarse en el hospital para detener y disparar contra palestinos fugitivos. Una rápida comprobación de los hechos reveló que los palestinos aparentemente se referían a un voluntario occidental que había trabajado en el hospital para tratar a pacientes palestinos. La administración del hospital ha rechazado fuertemente los informes, que continúan extendiéndose como el fuego en los medios sociales y los sitios de noticias palestinos.
El propósito de los informes falsos es implicar a Israel y presentarlo como un estado que muestra desprecio por los hospitales y los pacientes. Este caso demuestra que los rumores y las noticias falsas se aceptan regularmente como hechos en el mundo de los palestinos y los árabes. O consideremos otro ejemplo de cómo funciona la máquina de propaganda palestina.
El 23 de agosto, la misma agencia de noticias palestina, Wafa, informó sobre el aniversario del incendio de 1969 en la Mezquita Al-Aqsa en Jerusalén. En primer lugar, los hechos históricos: El 21 de agosto de 1969, un ciudadano australiano llamado Denis Michael Rohan prendió fuego al púlpito de la mezquita Al-Aqsa. Rohan fue arrestado por el incendio provocado, juzgado y diagnosticado como loco. Fue hospitalizado en una institución mental antes de ser finalmente deportado de Israel en 1974. Sin embargo, desde 1969, los palestinos han repetido la mentira que Israel y los judíos estaban detrás del incendio provocado. El hecho de que Rohan fuera un cristiano es aparentemente insignificante para ellos.
Así que este año, marcando el aniversario del incendio provocado, esto es lo que el portavoz oficial de Abbas, Wafa, tuvo este perjurio invaluable para decir: «La mezquita Al-Aqsa fue incendiada por los extremistas judíos en 1969. «La mentira sobre los «extremistas judíos»que prendieron fuego a la Mezquita de Al-Aqsa se ha extendido y aceptado de tal manera que hasta eruditos musulmanes como el Gran Mufti de Abbas, el jeque Mohamed Hussein, ha estado promoviendo este libelo. Ellos y la mayoría de los palestinos continúan describiendo al incendiario cristiano australiano como un «extremista judío».
Estas mentiras son simplemente algunos ejemplos recientes que abarcan una larga lista de noticias falsas palestinas y libelos de sangre encaminados a condenar a Israel e incitar al mundo en su contra. Tomemos, por ejemplo, las famosas mentiras palestinas sobre los terroristas: según la máquina de propaganda palestina, casi sin excepción, los terroristas estaban en camino de comprar pan para sus madres o visitar a sus abuelas. Estas eran víctimas inocentes, según la historia, detenidas o fusiladas por Israel sin motivo alguno. Luego están las mentiras sobre los israelíes que «plantan» cuchillos cerca de los cuerpos de terroristas que apuñalan o intentan asesinar a judíos. Los periodistas occidentales y otros aceptan estas mentiras como hechos.
La manipulación del jefe de la ONU en Ramallah no sorprende a quienes están familiarizados con las tácticas palestinas de engaño.
La pregunta, sin embargo, permanece: ¿Por cuánto tiempo la comunidad internacional recibirá con ecuanimidad las mentiras que los palestinos escupen en su cara, mentiras que hora tras hora, día tras día, sólo ponen en peligro la vida tanto de los palestinos como de los judíos, promueven un antisemitismo demasiado bienvenido y lo peor, contrario a las afirmaciones de aquellos que pretenden ayudarles, prolongan el sufrimiento de los palestinos que sueñan con un día vivir en libertad -como sus vecinos, los israelíes- con instituciones democráticas como la libertad de expresión, un poder judicial independiente y un sistema educativo, y sobre todo, con un liderazgo responsable?
Bassam Tawil es un musulmán radicado en el Medio Oriente.
https://www.gatestoneinstitute.org/10921/palestinian-fake-news
Atroz…..