La conducción autónoma es uno de los temas más hablados entre los fabricantes de automóviles. Foto de Chombosan/Shutterstock.com.
La experiencia tecnológica de Israel es ideal para fabricantes que quieran instalar avanzados sistemas en vehículos sin conductor.
¿Cómo es posible que Israel, un país sin industria automotriz, se haya convertido en potencia mundial en tecnología para la conducción autónoma (también conocida como “automóviles sin conductor”)?
“Nos hacen esa pregunta muchas veces”, dijo Yaniv Sulkes, vicepresidente de desarrollo de mercadeo de Autotalks, una compañía emergente que está a la cabeza en ese campo. “Si nos reuniéramos ahora con un fabricante de vehículos, nos diría: ‘¡ustedes son la trigésima compañía de Israel con que hemos hablado.’”
Sulkes dijo a ISRAEL21c que la industria está atravesando por grandes cambios. Si antes se trataba “del motor, la potencia y el diseño, ahora estamos entrando en el campo de la inteligencia artificial, la ciberseguridad y la conectividad. Se está convirtiendo en un campo interdisciplinar, y ese es un ámbito en el que Israel cuenta con bastante propiedad intelectual y experiencia”.
Alon Atsmon, asesor de negocios e inversionista, está de acuerdo con Sulkes. “La fabricación de automóviles ya no se centra en las ruedas o los frenos, sino en la tecnología que hay en el vehículo, los sensores y los algoritmos. Es un paso natural para la experiencia que Israel ha creado con los años”.
A continuación, nuestra selección de las ocho compañías israelíes más prometedoras en la industria.
Con sede en Jerusalén, la firma, que se ha hecho conocer por un molesto pitido cada vez que uno se acerca a otro vehículo o cambia de carril sin poner el direccional, fue comprada a principios de este año por la poderosa Intel por 15.000 millones de dólares. La razón: convertir a ésta en líder en el mercado de la conducción autónoma.
Mobileye desarrolla cámaras integradas, chips y el software para sistemas de asistencia al conductor, que es el componente básico para automóviles sin conductor. El director ejecutivo de Intel, Brian Krzanich, dijo que la compra es como si se combinaran los “ojos del automóvil autónomo con el cerebro de quien conduce el vehículo”.
¿Aún no ha oído hablar de LiDAR? Es un dispositivo indispensable para la conducción autónoma que usa rayos láser para medir distancias, el cual permite que los coches sin conductor “vean”.
Uno de los dos productos de Innoviz, InnovizOne, es un dispositivo que ofrece escaneo en 3D de alta definición. InnovizPro, el otro, lanzado recientemente, está diseñado para probar automóviles sin conductor. La compañía fue fundada en 2016 por ex miembros de las Fuerzas de Defensa de Israel con experiencia en óptica electrónica, visión computerizada y procesamiento de señales. LiDAR es el acrónimo de light detection and ranging (teledetección óptica por láser).
Si InnovizPro facilita probar vehículos autónomos en condiciones reales, Cognata, con sede en Ness Tziona, hace lo mismo pero virtualmente.
La Corporación Rand, una entidad sin ánimo de lucro con sede en California, estima que los automóviles autónomos necesitarán unos 18.000 millones de km de pruebas para demostrar que son mejores que los conducidos por humanos. Eso requeriría una flota de 100 autos que funcionen sin parar durante 500 años. La compañía usa inteligencia artificial y la visión computerizada para simular ciudades reales en 3D.
La primera ciudad virtual de Cognata es San Francisco, Calif., para la cual la compañía creó modelos de cada edificio y cada árbol, y desarrolló modelos de tráfico para estudiar cómo conducen y reaccionan los vehículos autónomos. “Podemos procesar millones de kilómetros en pocas horas”, dijo el director ejecutivo de Cognata, Danny Atsmon.
Esta compañía emergente, con sede en Petah Tikva, trabaja en el mismo objetivo de Innoviz —sensores que ayudan que los vehículos autónomos “vean”—, pero lo hace usando micro-antenas que detectan ondas lumínicas en vez de LiDAR.
Al igual que LiDAR, usa un láser para iluminar la carretera, pero como sucede con el radar tradicional, considera las señales reflejadas como ondas electromagnéticas. Según Oryx, su sistema funciona mejor con mal tiempo, puede ver más lejos que el LiDAR, usa mucha menos energía, y reduce los costos aún más.
A pesar de los avances en la tecnología de autoconducción, los automóviles que circulan en direcciones distintas no pueden verse, lo que aumenta la posibilidad de choques. Autotalks tiene una solución.
Dos autos que tengan instalada una unidad de la compañía pueden comunicarse entre ellos sin importar la visibilidad. La unidad puede pronosticar lo que va a suceder en los próximos cinco o diez segundos, y les da tiempo suficiente para corregir la marcha, explicó el director ejecutivo de Autotalks, Hagai Zyss, a ISRAEL21c.
En la actualidad Autotalks está promocionando sus procesadores B2V, que conectan a automóviles y motocicletas conducidos por personas, pero es un concepto que se puede aplicar también a la conducción autónoma. Autotalks es parte de un estándar emergente de comunicación de vehículo a vehículo en Estados Unidos que estará a la cabeza en esta tecnología en 2021.
El taxi autónomo o vehículo compartido que Ud. tome no tiene un conductor que le diga cuantos pasajeros pueden sentarse en el asiento de atrás o que se ponga el cinturón de seguridad. El sensor de la compañía escanea los movimientos en el interior del vehículo y distingue entre objetos y personas gracias al latido del corazón.
Los sistemas de Guardian reemplazan tecnologías existentes, como los detectores de presión de los asientos y de tensión de los cinturones de seguridad, y reduce los costos y facilita la instalación. Los sensores de pueden avisarle incluso si se olvidó algo, ya sea un bolso o un paquete, o a alguien, como un niño pequeño.
Argus Cyber Security y Karamba Security
“En el futuro, la preocupación no serán tanto los accidentes de tráfico sino los piratas informáticos, o hackers“, advierte Ofer Ben-Noon, director ejecutivo de Argus Cyber Security. Tanto Argus como Karamba, compañía que compite con la anterior, tienen como objetivo proteger que los coches de hoy y los vehículos autónomos del mañana sean víctimas de que alguien con malas intenciones tenga acceso a ellos.
Argus, la empresa más grande de las dos, trabaja con fabricantes de automóviles y proveedores de equipos para integrar su plataforma de seguridad en los sistemas de aquellos. Karamba, por otro lado, se enfoca en proteger los puntos de entrada más vulnerables del vehículo de los piratas informáticos: el centro de información y entretenimiento, y los sistemas que lo mantienen inmovilizado hasta que se ponga en funcionamiento. Argus, provee lo mismo, además de unidades telemáticas, las redes de los vehículos y los dispositivos que se agreguen después de la compra.
En junio, Argus fue incluida por The Wall Street Journal en su lista de las 25 mejores compañías tecnológicas para tener en cuenta.
Tal vez Ud. no piense que su automóvil sea una computadora, pero en eso se ha convertido. Y así como las computadoras generan información sobre lo que hacen sus usuarios, los vehículos conectados lo hacen también, tales como el nivel de carburante, la presión de las ruedas, la velocidad, la duración de un viaje y el número de pasajeros que han viajado. La cantidad de información aumentará cuando la conducción autónoma se haga realidad.
Otonomo está haciendo con esa información lo que Google hizo con los resultados de búsquedas en Internet, y ha desarrollado un sistema para compartirla con terceros, como compañías de seguros y fabricantes de vehículos, para mejorar la autonomía del futuro.
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