Traducido para Porisrael.org por Israel Winicki
El Embajador de Israel para la UNESCO, Carmel Shama Hacohen, dio el viernes 10/11/17, un encendido discurso en donde habló sobre la decisión de Estados Unidos de abandonar esta organización. En el discurso también hizo referencia a la labor humanitaria de Israel en el mundo y fustigó a los países árabes que atacan a Israel.
“Quisiera agradecer al presidente Trump y a nuestros aliados estadounidenses por su valiente y justa decisión de abandonar la UNESCO y por su continuo apoyo a Israel.
Este nuevo y brillante salón es muy engañoso, ya que uno puede pensar que algo bueno sucede entre las paredes de la UNESCO, cuando la verdad es que esta organización cada vez decae más y más en cada sesión.
La UNESCO parece tener 2 objetivos principales:
El primero es dar una mala reputación a las organizaciones internacionales, y el segundo, desperdiciar mucho dinero y tiempo valioso, como ayer y hoy, en el Comité de Educación, que podría (y debería) haber sido utilizado para promover la educación y la cultura, en lugar de servir a la obsesiva politización contra Israel y el Pueblo Judío.
La triste situación es que, al otro lado del mundo, los países hacen fila y luchan para ver quién tiene la suerte de unirse primero a la OCDE, mientras nosotros, aquí, estamos atrapados en luchas infructuosas que contradicen nuestra misión, mandato y vocación.
Todo esto ocurre ante nuestros propios ojos, mientras la principal potencia mundial, los Estados Unidos de América, opta por abandonar la UNESCO, y no será el último país que planea hacerlo.
Queridos amigos,
No se dejen engañar con las lámparas y los muebles nuevos de esta sala. ¡Todos están a bordo del Titanic!
La UNESCO es el Titanic de las organizaciones internacionales, que ha sido secuestrada y conducida por el Grupo Árabe para estrellarse contra el iceberg de la politización, y que desde entonces, se ha estado hundiendo.
La UNESCO debería haber aspirado a los valores humanos más nobles, tal como figuran en su mandato y efectuar un cambio positivo en la vida de miles de millones de personas en todo el mundo, personas que aún carecen del mínimo de educación, ciencia y cultura, para un mundo mejor y más justo.
Por otra parte, incluso la inauguración de esta misma sala estuvo contaminada con el veneno de la politización, ya que el estado donante repartió a todas las misiones miembros una carta de felicitación y medallas a todas las misiones miembros, menos a una – ISRAEL.
¡Vean el odio! ¡Qué mezquino, qué primitivo, qué patético!
Está claro una vez más que el petrodólar puede comprar muchas cosas, pero no puede comprar sabiduría, buenos modales y etiqueta. Puede que tengan riqueza en dinero, pero en dignidad son más pobres que pobres.
La semana pasada, ese mismo estado organizó un torneo internacional de judo y se negó a permitir a los atletas israelíes portar la bandera de Israel con su uniforme, agitarla o colocarla en ningún lado ni tocar el himno nacional de Israel, Hatikvah, ¡Ni siquiera cuando ganaron medallas!
Esto ocurre a plena luz del día y todos guardan silencio: cómplices silenciosos de la discriminación en los deportes, uno de los fundamentos de la educación y la cultura, y cómplices silenciosos de los intentos de aislar y excluir a Israel en la inauguración de esta sala.
En vez de eso, todos deberían levantarse y felicitar a los atletas israelíes que han demostrado el verdadero espíritu de los deportes y el profesionalismo y han ganado muchas medallas al hacerlo. En cuanto a la medalla de plata que les dieron como regalo, si yo fuera ustedes la devolvería, para no participar en un acto despreciable que no tiene cabida en un mundo libre e ilustrado.
Me gustaría tomar un momento y mencionar los nombres de los atletas que han demostrado una gran dignidad y espíritu deportivo, y han logrado mucho, a pesar de las vergonzosas condiciones en que ocurrió:
- Tal Fliker – medalla de oro
- Uri Sason – medalla de bronce
- Gili Cohen – medalla de bronce
- Tohar Butbul – medalla de bronce
- Peter Palchik – medalla de plata
En cuanto a la medalla en cuestión, algunas misiones nos han dado las suyas, en forma de protesta. Mi instinto inicial fue darle un buen uso como tope para puerta.
Sin embargo, después de pensarlo un poco más, decidí donarlas a los refugiados sirios que deambulan por las frías calles de París.
Estos refugiados incluyen bebés y niños que escaparon de las atrocidades del régimen sirio y los ataques químicos de ese miembro del Grupo Árabe contra sus propias mujeres, niños y civiles inocentes.
Si solo invirtieran en ellos el 1% de los esfuerzos que ponen aquí en contra de Israel, sus vidas mejorarían.
Tristemente, la UNESCO ha sido secuestrada y se ha abusado de ella, usándola como una herramienta para la persecución de Israel y el Pueblo Judío, mientras inventan hechos falsos e historia falsa, con la intención de borrar nuestra historia en Jerusalén y reescribir la historia global.
Innegablemente, los puntos más bajos fueron los intentos de borrar la conexión entre el pueblo judío con el Monte del Templo y el Muro Occidental, nuestro lugar más sagrado, y las continuas resoluciones contra nuestra soberanía en Jerusalén y la declaración de la Tumba de los Patriarcas como un sitio del patrimonio palestino.
No competimos con ninguna religión por el derecho a la libertad de culto en Jerusalén, ni tenemos la intención de cambiar un ápice en el Status Quo existente, que beneficia a las tres religiones.
Nuestro derecho histórico y nuestra conexión con Jerusalén y los lugares sagrados tienen miles de años y no necesitan ninguna afirmación de la UNESCO.
Los 100 años desde la Declaración Balfour, que sin duda promovió el establecimiento de un hogar para el Pueblo Judío después del Holocausto y la difícil situación de miles de años de exilio, nuestro derecho básico e innegable radica en el Libro de los Libros, la Santa Biblia.
Los palestinos y el Grupo Árabe celebran aquí, de vez en cuando, resoluciones políticas antiisraelíes y antijudías que son absolutamente insignificantes, aparte de cumplir con su obsesión enfermiza de aislar a Israel y deshonrarlo. NO he logrado con palabras convencerlos qué equivocados están, así que hoy intentaré usar los números para que quede más claro. No importa dónde se encuentren en el mundo, cada judío reza en una dirección: hacia Jerusalén y el Monte del Templo. Cada novio, en su boda, menciona a Jerusalén. Tres veces al día se menciona a Jerusalén en el libro de oraciones judío. A través de miles de años de exilio e incluso hoy, en días festivos y ocasiones especiales, cada judío dice: “El próximo año en Jerusalén”.
Les prometí números, así que para enfatizar este vínculo especial y correcto, les pregunto ahora ¿Quién sabe cuántas veces se menciona a Jerusalén en la Biblia? ¿O dónde se menciona más, en la Biblia o en el Corán? ¿Tienes alguna idea? Así que aquí va, números que contienen la verdad. En la Biblia ¡Jerusalén se menciona 667 veces! ¡667 veces!
En el Corán, se menciona Jerusalén, ¿Están listos? – No 600 veces, o 300 veces, o siquiera 5 veces, sino CERO. NO HAY MENCIÓN de Jerusalén en el Corán. Cero contra 667 veces en la Biblia. ¿Qué más necesitas? Jerusalén y el Monte del Templo le fueron arrebatados al Pueblo Judío hace 2000 años, y fueron liberados el 7 de junio de 1967, desde el momento en que el comandante de la brigada de paracaidistas, Motta Gur, anunció en la radio: “El Monte del Templo está en nuestras manos. El Monte del Templo está en nuestras manos”.
Después de lo cual, el Jefe del Estado Mayor de las FDI en ese momento, Moshe Dayan, agregó: “Hemos reunido una Jerusalén dividida, estamos de vuelta en el lugar más sagrado de todos, hemos vuelto y nunca más nos separaremos de él”.
Estas fueron las voces en tiempo real. ¿Lo entiende, Sr. representante palestino? ¿Sr. representante jordano? ¿Iraní? No importa cuántas resoluciones se aprueben aquí, e incluso si lo hacen a toda hora, y no importa cuánto esfuerzo ponga Teherán en sus anhelos de nuestra desaparición: la verdad se mantendrá fuerte e ISRAEL ESTA AQUÍ PARA QUEDARSE.
Ahora veamos la belleza de Israel en números, un estado que contribuye positivamente a la humanidad en todos los planos posibles, belleza que ustedes, el Grupo Árabe, intentan ocultar y desfigurar, con mentiras y politización obsesiva que puso a esta organización de rodillas y la destruyó.
En septiembre pasado, México sufrió un terrible terremoto, un país a 12.500 kilómetros de distancia de Israel. A pesar de la distancia, la Misión de Ayuda de Israel fue la segunda en llegar y ayudar, después de Japón, y fue la última en irse. El Israel pequeño y lejano llegó antes que nadie con una delegación de 71 rescatistas.
Ahora, volviendo a los números: ¿A cuántas personas enviaron esos que inician aquí las resoluciones contra Israel y sus aliados? ¿Cuántos deberían haber enviado, proporcionalmente, para compararlo con el pequeño Israel, cuya población total es de menos de 10 millones de personas? ¡La República Islámica de Irán, con 81 millones de personas, debería haber enviado 700 rescatistas!
Señor Embajador Iraní, ¿A cuántos envió a México? ¿O estaban todos ocupados soñando con destruir a Israel, una abominación constantemente repetida por su oscuro y siniestro líder? Usted lidera el mundo con una cifra, durante los últimos 25 años: el número de EJECUCIONES.
¡Pakistán, con 200 millones de habitantes, debería haber enviado 1700 rescatistas! Señor Embajador de Pakistán, comparta con nosotros, ¿A cuántos envió? ¿O estaba demasiado ocupado mirando hacia otro lado mientras más y más mujeres son abusadas y violadas en Karachi? ¿Cuántos enviaron Bangladesh? ¿Argel? ¿Marruecos? ¿Malasia? ¿Líbano?
Lo mismo puede decirse sobre las tragedias en Turquía, Nepal, Haití y en cualquier otro lugar del mundo. Los números siempre mostrarán la belleza del rostro de Israel y su gente y la fealdad de los miembros de pandillas que están obsesionados con pasar aquí ridículas resoluciones en contra de nosotros.
En este punto, la verdad es tan clara como la luz del día: Israel se enorgullece de sus logros, sus premios Nobel, innovaciones médicas, nuevas tecnologías, alta tecnología, tecnología cibernética, agricultura, tecnologías del agua, derechos de las mujeres, LGBTQ y más, no hay comparación en todo lo anterior entre Israel y el pueblo judío, y la coalición obsesiva que nos difama en esta sala.
Una cosa que le dan al mundo, con la que nadie puede competir: son los fabricantes y exportadores de terrorismo. Tristemente, cuando hay noticias de otro ataque terrorista, sin importar dónde ocurran en el mundo, dos cosas se adivinan fácilmente casi con total certeza: cuál era la religión del terrorista, que adoptó e interpretó con el fundamentalismo extremo, y las palabras que dijo mientras mataba inocentes.
Sólo un estado Occidental permaneció en su coalición de la deshonra. En hebreo, tenemos un dicho: “Dime quiénes son tus amigos y te diré quién eres”. Ese estado puede tener las mejores intenciones, pero está cometiendo hechos que causan exactamente lo contrario. Es similar al mejor cirujano ortopédico del mundo que insiste en salvar a su amigo que necesita cirugía cerebral.
Sus triunfos aquí son una derrota completa. No deseamos entrar en un juego de suma cero, sino en el que todos seamos ganadores, superar juntos los desafíos de nuestra región y crear un futuro, un futuro mejor para todos.
Mientras nuestra mano izquierda se estira en son de paz, nuestra mano derecha continuará golpeando a aquellos que ataquen a Israel o intenten atacar a cualquier judío en cualquier parte del mundo. Espero y creo que seré el último embajador israelí en la UNESCO que necesite enfrentar y combatir esta obsesión politizada contra su pueblo.
unasco.. arabe .. nada que ver.. de cultura y humanismo ..