Un verde manto oscurece Europa

Musulmanes que han llegado a Alemania y recibidos como refugiados están perpetrando crímenes de odio anticristiano y agresiones contra sus antiguos conciudadanos cristianos.

Las iglesias (católica y protestante) alemanas advierten sobre la creciente opresión de los cristianos en todo el mundo. Las minorías cristianas en el Medio Oriente corren el riesgo de desaparecer por completo, han advertido los líderes de la Iglesia Católica Romana y Protestante en Alemania. Han dicho que la libertad religiosa está amenazada en todo el mundo y que la presencia cristiana en áreas del Medio Oriente –anterior a la aparición del Islam en esas tierras- corre el riesgo de desaparecer por completo.

Pero los ataques contra cristianos por parte de musulmanes afectan mayormente a las mujeres alemanas, consideras como siervas y potenciales esclavas sexuales para los salafistas, por el mero hecho de ser cristianas.

Recientemente un grupo de mujeres alemanas ha lanzado una campaña llamada # 120db para dar voz a las mujeres que han sido atacadas física o sexualmente como resultado de las políticas de migración masiva.

El grupo, que se llama a sí mismo 120 decibelios después de la intensidad del sonido de las alarmas de violación, lanzó un video esta semana en el que varias mujeres enumeran los nombres de las víctimas recientes de violencia cometidas por solicitantes de asilo.

Las mujeres culpan a la migración musulmana masiva, declarando que las fronteras no son seguras, que las autoridades no tienen idea de quién entrará en el país y «se niegan a deportar a los delincuentes».

El Corán enseña que las mujeres infieles (judías, cristianas) pueden ser legalmente tomadas para el uso sexual, en Corán4:3, 4:24, 23:1-6, 33:50, 70:30). El Corán dice: «Oh Profeta, diles a tus mujeres y a tus hijas y a las mujeres de los creyentes que se despojen de sus ropas exteriores. Eso es más adecuado que sean conocidos y no abusados. Y Alá es indulgente y misericordioso». (Corán 33:59) La implicación es que si las mujeres no se cubren adecuadamente con sus vestiduras externas, pueden ser abusadas, y ese abuso estaría justificado. Grupos de migrantes musulmanes en toda Europa han cometido asaltos sexuales masivos y violaciones de mujeres no musulmanas, lo que se explica por la creencia de estos devotos musulmanes que la Sharía les otorga derechos sexuales sobre las mujeres que no están cubiertas.

El salafismo, el integrismo musulmán, y su apoyo ideológico, moral y económico al yihadismo, y el silencio cómplice de la colectividad musulmana, -con muy, pero muy pocas excepciones- , en Alemania están haciendo crecer a la extrema derecha xenófoba y antisemita, que agregado a la judeofobia de la colectividad musulmana generan un resurgimiento del antisemitismo en el país centro europeos que se destacó criminalmente por perpetrar el Holocausto.

Tanto la extrema izquierda, la extrema derecha y el totalitarismo islámico se hermanan en odiar al judío como a Israel, el judío de las naciones.

El odio que comienza con los judíos nunca termina con los judíos. No fueron solo los judíos los que sufrieron bajo Hitler. No fueron los judíos solamente los que sufrieron bajo Stalin. No son los judíos únicamente los que sufren bajo el Estado Islámico, Hamás, Hizbulá, al Qaeda, o la Yihad Islámica.

Ayer fueron por los judíos, hoy van por los cristianos, tal como rezaba el eslogan de la primera intimada palestina: Primero iremos por los del Sábado (los judíos), después por los del domingo (los cristianos).

Tanto el totalitarismo pardo, rojo como verde odian los valores de la civilización judeocristiana, y ahora atacan en el mismo centro de Europa a los “del Domingo”.

Para aquellos que quieren que se fortalezca la civilización frente a la barbarie, deben defender a Israel, a los “del Sábado” para apuntalar a los “del Domingo”.

Si desaparece la luz del Sábado, no hay Domingo, los restantes días devendrán noches oscuras y tenebrosas, las noches del totalitarismo pardo (nazi-fascista), rojo (comunista) y verde (islámico).