Sitio desde donde salio el drone. Fuente IDF
Es prematuro vaticinar si los incidentes de este sábado 10 de febrero fueron la antesala de una conflagración de gran envergadura que tiene como marco el complejo mosaico Siria-Irán- Israel y Rusia, o una escalada puntual que se ha terminado… al menos hasta la próxima. Pero es indiscutible, diga lo que diga el Presidente de la República Islámica de Irán Hassan Rouhani, que la escalada no la inició Israel sino Irán.
Unos puntos para analizar la situación.
– Todo comenzó a raíz del envío hacia Israel, de un drone iraní, manejado por iraníes, desde la base militar siria Tiyas, conocida también como T-4, en dirección a territorio israelí. El drone fue detectado por los radares israelíes ya cuando inició su vuelo. Lo “siguieron” todo el tiempo, esperaron que cruzara la frontera, y lo derribaron un minuto y medio después de haberse infiltrado ya en territorio israelí.
– Irán alega que no es cierto, que Israel miente, que no hubo drone, no hubo infiltración ni ataque ninguno por parte de Irán. Israel tiene pruebas, claro está. Es la primera vez que un drone iraní entra al espacio aéreo de Israel, lo cual debe ser visto como un intento de probar la alerta de Israel, la capacidad israelí de lidiar con ese desafío , un deseo de provocar, o una combinación de todo esto junto.
– Israel respondió con gran precisión, lanzando cuatro aviones F-16 de la Fuerza Aérea a destruir la estructura desde la que se manejaba el drone. Los aviones lo “persiguieron”. El “cerebro” que maniobraba el dispositivo no piloteado, manejado por iraníes, se hallaba en un vehículo en marcha. Los aviones lo destruyeron completamente.
– Siria disparó intenso fuego anti -aéreo hacia los aviones israelíes, logrando al parecer uno de los proyectiles pegarle a uno de los aviones, que fue derribado y cayó sobre territorio israelí, cerca de localidades civiles. “Al parecer”, decimos, ya que la Fuerza Aérea estudia todo lo ocurrido, incluyendo el análisis de la caja negra del avión de combate, pero dando ya a entender que eso es lo más probable, o sea que el motivo de la caída del avión haya sido el impacto de un proyectil sirio. Esta habría sido pues la primera vez desde 1981 que Siria logra derribar un avión israelí.
– Por más festejos de Hizbalá, que salió a repartir caramelos, y de proclamaciones entusiastas de Irán, donde el vice comandante de las Guardias Revolucionarias declaró que “podemos imponer un infierno a la entidad sionista”, Irán sabe que inclusive habiendo perdido un avión sofisticado, Israel ganó aquí varios puntos a raíz de la infiltración del drone. Ahora tiene en sus manos por primera vez restos de un drone iraní de avanzada, lo cual es clave desde el punto de vista de Inteligencia. Y además, la capacidad de los F-16 de alcanzar a la estructura desde la cual se manejaba el drone, mostró no sólo la determinación de Israel sino sus posibilidades operativas, ya que dicha estructura, que estaba en marcha, se hallaba en el otro extremo de Siria, una zona muy alejada de la frontera con Israel, a unos 60 kms de Palmyra.
– De fondo de todo esto está el redoblado esfuerzo de Irán en los últimos tiempos, por instalarse militarmente en territorio sirio. El apoyo iraní al régimen sirio en la guerra civil ha sido absoluto todos estos últimos años. Claro está que lo ha hecho porque ello sirve a sus intereses y porque controlando Siria, logra una continuidad territorial desde Líbano a Yemen, de regímenes favorables al radicalismo chiita. Israel no puede verlo como un asunto interno ni de Irán ni de Siria, ya que toda presencia iraní en el territorio vecino, es una amenaza directa a su seguridad. Lo sería, aunque el líder supremo de Irán el Ayatollah Ali Khamenai no se pasara diciendo que Israel debe ser borrado de la faz de la tierra.
– Israel ha advertido repetidamente contra estos esfuerzos iraníes, aclarando que no los tolerará. Ayer, al infiltrarse por primera vez un drone iraní enviado desde la propia Siria, fue la oportunidad para dejar en claro que habla en serio.
-Es por ello que la respuesta israelí tuvo una segunda parte: el ataque a doce blancos sirios e iraníes en territorio sirio, entre ellos varias baterías de misiles anti aéreos de Siria. Según fuentes allegadas al ejército israelí, fue destruida más de la mitad del poderío anti aéreo de Siria. Esto constituyó un fortísimo golpe tanto a Siria como a Irán. Vieron la capacidad operativa y la determinación de Israel.
– Israel no podía limitarse a destruir el drone iraní. Si no iba más allá, no transmitía suficientemente la firmeza de su mensaje. Ayer, reiteró así que se mantiene firme en su política de no permitir la instalación iraní en Siria que amenace su seguridad. El Primer Ministro Netanyahu lo declaró categóricamente.
– Rusia es una pieza especialmente compleja en este mosaico. Por un lado, hay un asiduo contacto entre Netanyahu y Putin, también el sábado volvieron a hablar y en Israel recalcan que hay coordinación, pero lo que cuenta para Putin, siempre, son solamente los intereses rusos en Siria. Según analistas israelíes de seguridad que se manifestaron este sábado sobre los últimos acontecimientos, es indudable que nada de lo sucedido en la última jornada podría haber ocurrido sin conocimiento de Rusia, que tiene presencia directa en el terreno y tropas en Siria.
-Eso obligó a Israel a un esfuerzo de extremo equilibrio. Por un lado, notificó a Rusia del ataque, aunque no se reveló si fue antes, durante o después del mismo. Por otro, se sabía por cierto de antemano que las baterías anti aéreas que serían destruidas, son las proporcionadas por Rusia a Siria. Además, los ataques debían ser sumamente quirúrgicos y puntuales, ya que en por lo menos una de las bases militares sirias atacadas, también operan fuerzas rusas, a las que Israel no quería ni tenía por qué dañar.
– Por toda esta compleja situación, inclusive si para Israel era clave recalcar su mensaje, su manejo del desafío también era como jugar con fuego. Es que no es fácil maniobrar entre el declarado deseo de que no haya guerra y la declarada necesidad de seguir defendiéndose y no permitir violación de su soberanía. Las cosas pueden irse fácilmente de las manos y desembocar en una guerra no deseada.
– Este sábado, consideramos que Israel manejó el tema exitosamente, a pesar de haber perdido un avión.
– No tenemos dudas que países árabes pragmáticos, deseaban suerte a Israel en esta vuelta, frente a Irán. La República islámica es la gran fuente de desestabilización en Oriente Medio y se sabe claramente que preocupa al mundo árabe.
– La gran pregunta es si todo esto es el comienzo de un nuevo desafío: una plena coordinación entre Siria e Irán para atacar a Israel desde territorio sirio. El presidente Assad, entre envalentonado por sus éxitos en el plano bélico interno, y de hecho dominado en gran medida por Irán, puede cometer serios errores.
– Creemos que no les vale la pena arriesgarse a probar a Israel. A sus espaldas, Israel tiene solamente el Mediterráneo. No se puede arriesgar a perder.
Fuente de las imagenes> IDF
http://porisrael.org/2018/02/11/vale-la-pena-tener-esto-presente