Liberal Yemení-Egipcio Dra. Elham Manea: ‘Fui a Israel y no me arrepiento’. La paz con Israel es posible

Traducido para Porisrael.org por Dori Lustron

La escritora liberal yemenita-egipcia Dra. Elham Manea, que reside en Suiza donde da conferencias sobre ciencia política en la Universidad de Zurich y es miembro de la Comisión Federal Suiza para Asuntos de la Mujer, escribió un artículo publicado el 27 de julio de 2018 en el sitio web liberal árabe Ahewar.org y titulado «Si no somos los emisarios de la paz, ¿Quién será? Fui a Israel y no me arrepiento [de ello]».

En el artículo, la Dra. Manea declaró que había visitado Israel y contó sobre su agradable y sorprendente experiencia con el control de pasaportes en el aeropuerto Ben Gurion. Ella escribió que planeaba escribir una serie semanal de artículos sobre su visita a Israel, y destacó que reconoce la existencia de Israel, considera que el conflicto palestino-israelí tiene dos lados, no está sesgado hacia ninguno de ellos, y desea paz y seguridad en ambos lados. Continuó condenando » el odio que se aviva en igual medida por el extremismo religioso judío e islámico» y declaró que no importa qué, se niega a odiar a los israelíes.

Su decisión de visitar Israel, agregó, no fue difícil en absoluto, y no se arrepiente. Ella escribió que aprendió mucho de lo que vio con sus propios ojos allí. En su próxima serie de artículos sobre su visita, dijo, tiene la intención de describir sus impresiones del punto de vista israelí con respecto a la búsqueda de la paz; de su visita a Yad Vashem, el monumento oficial de Israel a las víctimas del Holocausto; de su encuentro casual con judíos yemenitas; de sus visitas a Jaffa, Haifa, Jerusalén y Belén; del debate en Israel sobre el tema de la recientemente aprobada Ley de Nacionalidad ; y finalmente reconocer a los israelíes como personas con quienes es posible hacer las paces.

Pidiéndoles a los árabes que renuncien a su creencia  que Israel simplemente desaparecerá un día, porque no lo hará, les instó a buscar una forma de alcanzar la paz con él, por el bien de ambos lados.

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Los siguientes son extractos traducidos del artículo del Dr. Manea del 27 de julio de 2018 sobre Ahewar.org:

«Amamantamos el odio a Israel con la leche de nuestra madre»

«‘¿Cual es el propósito de tu visita?’ el oficial de control de pasaportes en el aeropuerto Ben Gurion en Tel Aviv nos preguntó, mientras ella colocaba nuestros dos pasaportes en la computadora frente a ella y nos miraba de cerca con una mirada fija. Thomas y yo dijimos simultáneamente: ‘Turismo’. Miró a su pantalla de  la computadora sosteniendo los dos pasaportes y, devolviéndonoslos, dijo: «Bienvenido a Israel». Tardé unos segundos en darme cuenta de lo que había dicho, y casi le dije: ‘¿Eso es todo?’ Pero respiramos profundamente y nos fuimos.

«Esperábamos algo diferente. Pensamos que debido a mi visa árabe y los sellos de entrada árabes en mi pasaporte el trato sería más severo, muy duro. Al menos eso era lo que nos había dicho la agencia de viajes suiza que reservaba nuestro vuelo. Thomas me dijo entonces: «Puede que te lleven a una habitación lateral y te pregunten en detalle sobre el motivo de tu visita. No te enojes, solo responde las preguntas». Pero eso no sucedió. Por el contrario, solo dijeron: ‘Bienvenido a Israel’. Esto era música para mis oídos …

«¿Cuántos de nosotros fuimos criados para odiar este país? Amamantamos este odio con la leche de nuestra madre. ¿Cuántos de nosotros hemos aprendido que es el enemigo? ¿Y que el enemigo no tiene derecho a existir? ¿Cuántos?

«Muchos de ustedes dicen repetidamente: ‘No tenemos ningún problema con los judíos, nuestro problema es con Israel’ y agregan: ‘Israel es un estado ilegítimo, un estado artificial que no tiene derecho a existir, un estado creado por el imperialismo que lo haremos desaparecer uno de estos días del mapa de nuestra región ‘. Esto es lo que nos susurramos a nosotros mismos en público y en secreto.

«Pero no ha desaparecido. Sigue existiendo. Si ese es el caso, entonces ha llegado el momento para nosotros, las fuerzas sociales que piden la paz en ambos lados, de buscar juntos un camino hacia nuestro futuro. en este momento, cuando la opción de la paz parece posible. Esto se debe a que la paz no viene en tiempos de seguridad y amor mutuo, sino en tiempos de guerras y odio «.

«El conflicto israelo-palestino» tiene dos lados, y los veo a ambos »

«Antes de contarles acerca de mi visita en una serie semanal de artículos, comenzaré presentando mi posición: nunca he dudado del derecho de Israel a existir. Reconozco el Plan de Partición de las Naciones Unidas de 1948. Veo a Israel como legítimo Se divide entre dos pueblos que no querían vivir juntos, y cada uno de ellos insiste en su propia narrativa histórica. Así como todos los países que rodean a Israel son nuevos estados, también lo es Israel: todos son países nuevos que no tenían existencia como entidades políticas independientes antes de la primera mitad del siglo XX: Siria, Jordania, Iraq, Arabia Saudita, etc., y la lista es larga.

«Tome Iraq, por ejemplo. Descubrirá que la vinculación de Mosul con Bagdad y Basora es también el resultado de una decisión británica, tomada a pesar de las diferentes afiliaciones étnicas de estas tres entidades. A pesar de esto, cualquiera que se atreva a hablar sobre la separación de estas entidades es castigado, silenciado y acusado de trabajar para un elemento extraño … Pero esa es otra historia.

«No odiaré. No odiaré. Escribí esto antes [el 22 de mayo de 2015] en un artículo [titulado]» Para marcar el aniversario de la Nakba / Establecimiento del Estado de Israel: No odiaré «. [1]y digo aquí lo que dije entonces para aclararles esta imagen: «No trato el conflicto palestino-israelí desde un punto de vista parcializado hacia uno de los lados. Estoy predispuesta hacia el aspecto humano. Sí, veo esto como un conflicto que tiene dos lados, y veo ambos lados juntos. Después de eso, veo la humanidad en ellos, y para ser honesto, no veo a los hombres y mujeres israelíes como enemigos. No les deseo ni mal ni destrucción, les deseo vivir en paz y seguridad, tal como deseo esto para los palestinos. Veo la humanidad en los hombres y mujeres israelíes justo cuando veo el miedo que vive dentro de ellos. Al mismo tiempo, no ignoro las tierras que fueron y siguen siendo expropiadas,

¿Le enseñas a un niño de cuatro años a matar? ¿Cómo sostener a otro niño y matarlo con un cuchillo? ¿Qué tipo de persona estás creando?

«Cada una de las partes necesita al otro para que el mensaje de destrucción, que predican, se vuelva más fuerte. Intercambian fuego, mutilando lo que es humano en ambos lados».

El tiempo ha llegado para ver al enemigo como humano, y hacer la paz

«A pesar de todo esto, nuevamente insisto: no odiaré. No odiaré. No odiaré a los hombres y mujeres israelíes. Así como no quiero destruir el Estado de Israel. Y mientras defiendo a los hombres palestinos y el derecho de las mujeres a existir en un estado que les dé independencia, seguridad y bienestar, y se opongan a la política de asentamiento sistemática israelí que desarraiga la paz, me doy cuenta que la mayoría de las voces que se oponen a la política de asentamientos son israelíes e Israel mismo, y que quienes defienden los derechos de los palestinos más que nadie son organizaciones israelíes encabezadas por Peace Now (Paz Ahora) …

«Esto es lo que argumenté en mi artículo anterior. Lo reitero para aclarar mi posición, que es clara y está sesgada hacia el ser humano, sea quien sea.

«En consecuencia, la decisión de visitar Israel no fue difícil para mí. No fue difícil en absoluto. Lo que fue difícil en este asunto fue la publicidad de mi visita. Pero así como yo no odio, tampoco miento. Fui a Israel porque es un estado cuya existencia reconozco. Y, más importante aún, fui allí porque quería ver por mí misma lo que está sucediendo en la realidad: ver al israelí en su entorno natural. No me arrepentí; al contrario, me fui con muchas cosas que me permitirán escribir esta serie, en la que las expondré en detalle. Te diré lo que me impulsó a decirle a Thomas: «Sé a dónde iremos de vacaciones: Tel Aviv». Les hablaré sobre el libro que leí durante mi visita para ayudarme a comprender el punto de vista israelí en la búsqueda de la paz, por Yossi Klein Halevi, titulado Cartas a mi vecina palestina . Les contaré sobre mi visita al Museo del Holocausto es decir, el monumento conmemorativo de Yad Vashem, del cual nadie emerge sin cambios; sobre los israelíes de origen yemení a quienes conocí por casualidad, escribiré  sobre Jaffa, Haifa, Jerusalén y Belén …; sobre la Ley de Nacionalidad Judía promovida por una minoría populista de derecha, la naturaleza de la discusión en torno a ella en Israel y la oposición a ella, sobre un aspecto humano conmovedor de la actitud de Israel hacia algunos de sus vecinos, víctimas de nuestras guerras. Y, lo más importante,  hablaré sobre el israelí: el que ama, se ríe, teme y llora. El que puede ser un amigo El que cuando lo vemos, nos damos cuenta de que la paz es posible.

«Así que no te apresures a maldecirme. Piénsalo un poco. Luchar por la paz no es para tiempos de paz, sino para tiempos de guerra. Para momentos en que tu enemigo se convierte en el objeto de tu odio. Tal vez ha llegado el momento de ver este enemigo como humano, para ser reconocido antes de decretar su sentencia, porque si no somos emisarios de paz, ¿Quién será?

 

[1] Ssrcaw.org, 22 de mayo de 2015.

 

https://www.memri.org/reports/liberal-elham-manea-writes-of-her-visit-to-israel#