Manipulación tendenciosa

Hace unos días, el programa matutino Café CNN de la cadena de ese nombre, en español, transmitió una entrevista de la periodista María Regina Bustamante a alguien presentado como analista, Maximiliano Sbarbi-Osuna, a fin de explicar el terrorismo de Hezbollah en América Latina, a propósito de la detención de los hermanos Kevin Gamal y Axel Ezequiel Abraham Salomon, en Buenos Aires, debido a sus supuestos nexos con el movimiento libanés.

Sbarbi-Osuna señaló que se pretende criminalizar a estos hermanos argentinos por haber viajado al Líbano para visitar a familiares. Agregó que pararon en Qatar y en ese punto afirmó que sí es un país que apoya el terrorismo, pero de tendencia sunita, distinto al Hezbollah que es chiíta. Sin embargo, para ir al Líbano desde Argentina, es innecesario el desvío a Qatar.

El entrevistado dijo que Hezbollah es un partido político con un brazo armado, pero que no actúa militarmente fuera del Líbano. No obstante, él mismo se vio obligado a reconocer que el “Partido de dios” ha atacado a Israel y, además, participa en Siria, en defensa del dictador Bashar al Assad, por lo que especificó que Hezbollah sólo actúa en el Medio Oriente. Aseguró que únicamente Israel y EEUU acusan a Hezbollah de ser un movimiento terrorista; según Sbarbi-Osuna, Europa no lo hace. Esto es mentira: en 2012, Hezbollah asesinó a turistas israelíes en Bulgaria; las pruebas eran tan contundentes que a Europa no le quedó más remedio que, pese al temor de convertirse en campo de nuevos ataques terroristas, admitir que el ala militar de Hezbollah es terrorista.

Prácticamente, María Regina Bustamante lo dejó hablar a sus anchas, pero en uno de los pocos momentos en que intervino, le preguntó acerca de la presencia de Hezbollah en la triple frontera; a lo que el entrevistado respondió que la actividad en la frontera común entre Argentina, Brasil y Paraguay, sólo está vinculada al contrabando, volviendo a negar acciones terroristas.

Minimizó que a los hermanos Abraham Salomon se les encontraran fotos de Nasrala e insistió en que ello no quiere decir que sean terroristas. Pero no dijo nada acerca de las armas que les decomisaron ni sobre sus contactos con miembros de Hezbollah a través de las redes sociales.

Sbarbi-Osuna reiteró que no hay pruebas de que Hezbollah haya actuado en Argentina. Si bien es cierto que no lo mencionó en forma directa, con ello niega que, en un primer momento, Hezbollah confesó la autoría material del ataque contra la embajada de Israel y, por ende, contra la AMIA. Y, están los decisivos resultados de las investigaciones.

Sbarbi-Osuna manipuló información, dijo medias verdades y desvirtuó hechos probados e información confirmada. Nos preguntamos cuál sería el motivo de mentir con tanto descaro. Vimos que trabaja para Hispan TV, el canal propagandístico del estado iraní en español, con lo cual quedan claros sus intereses y eso mismo debería darle seguridad al público televidente de que este personaje tergiversa la realidad.