Con la campaña electoral en Israel tomando fuerza, Hamas está tratando de influir en la atmósfera de la sociedad israelí mediante el uso de sus armas más «efectivas». Caminando por la cuerda floja, la organización terrorista está presentando al gobierno de transición aquí en Israel con un dilema planteado por los misiles y las encuestas.
Ha pasado un año desde que Hamas comenzó a intensificar los disturbios en la frontera de Israel con la Franja de Gaza. Con el tiempo, comenzó a reforzarlos mediante el uso de armas «mejoradas», como cometas y globos incendiarios. Los disturbios fronterizos, que comenzaron después que Estados Unidos trasladó su embajada a Jerusalén, se vieron afectados por el impacto que tuvieron en los residentes de las comunidades israelíes adyacentes a Gaza.
Cuando los globos y las cometas cargados de explosivos ennegrecieron el Negev occidental a través de los incendios que provocaron el verano pasado, nos acordamos del «discurso de kalaniot» del ex Jefe de Estado Mayor Benny Gantz, en el que se declaró en el apogeo de la Operación Margen Protector de 2014 que el silencio había sido restaurado en el sur de israel. Hamas estaba tratando de presionar al gobierno israelí para que aceptara un alto el fuego a largo plazo, lo que le daría a Hamas la oportunidad de reconstruir sus fuerzas.
Con la administración egipcia tratando de mediar un alto el fuego, Hamas continúa tratando de presionar al escalón diplomático en Israel al retener a los residentes como rehén del sur. Pero el gobierno israelí ha decidido una política de contención. Desde un punto de vista político, esto demostró a los opositores del Primer Ministro Benjamin Netanyahu, quienes creían que para evitar las investigaciones y alentar al electorado tomaría una acción militar contra Hamas, se equivocaron. En cambio, el gobierno planteó la necesidad operativa de abordar los túneles de terrorismo transfronterizos de Hezbolá en el norte como justificación para evitar una escalada en el sur. Netanyahu no jugó en las manos de sus oponentes con lo que hubiera sido visto como un movimiento político autoengrandecedor.
En los últimos meses, el frente sur ha estado relativamente tranquilo, debido en gran parte al flujo de ayuda qatarí a Gaza. Por un tiempo, Hamas incluso acabó con la violencia fronteriza. Pero durante el mes pasado, hemos visto un regreso a los choques intensos y violentos, del tipo que se intensifican e incluyen el lanzamiento de cohetes y misiles desde Gaza. Por ahora, Israel se ha adherido a su política de contención y envío de mensajes entre bastidores.
Cualquiera puede ver que esta escalada no es una coincidencia y que Hamas está tratando de burlarse del gobierno israelí durante una temporada electoral. Pero el grupo terrorista se equivoca … Las Fuerzas de Defensa de Israel tienen planes. Está bien entrenado y listo. La pregunta sigue siendo: ¿Qué beneficios habría para embarcarse en una operación militar en este momento?
La única ventaja discutible sería la restauración de la disuasión a la frontera sur. Ninguna de las operaciones llevadas a cabo tras la retirada de Gaza en 2005 ha provocado una disuasión a largo plazo. La única opción es avanzar hacia la acción que cambiará fundamentalmente la realidad en el terreno. En ausencia de estabilidad política, es muy poco probable que el gobierno elija esa opción. Como resultado, Israel ha optado por la táctica de responder a las provocaciones de Hamas.
Lo que podemos esperar en los próximos meses, entonces, es más de lo mismo: las escaladas periódicas que se acercan pero no superan el punto de no retorno. Ambas partes entienden esto, pero también los egipcios.
Una cosa es segura: Hamas tiene más que perder debido a una escalada a gran escala en el sur, independientemente del tipo de gobierno que se forme en Jerusalén. Sobre este tema, al menos, hay un consenso entre los candidatos centrales en la arena política: cuando se trata de Hamas, no se habla, se pelea.
Una figura que se está probando en este momento es el nuevo Jefe de Estado Mayor de las FDI, el teniente general Aviv Kochavi. Hasta el momento, Kochavi ha empleado el poder de las FDI en el norte, continuando los esfuerzos de las fuerzas de guerra entre las FDI contra la infraestructura iraní en Siria, pero aún tiene que ser probado en el Sur. Él está muy familiarizado con esta arena: lo ordenó y también estuvo a cargo cuando nos retiramos de Gaza, un evento que sería muy difícil llamar éxito. Hay que esperar que a medida que llegue la primavera, no repetiremos los errores del pasado. Entre los misiles y los cohetes, el ejército tiene un papel importante que desempeñar para neutralizar los intentos de nuestros enemigos de influir en la campaña electoral.
***El Coronel (res.) Ronen Itsik es un ex comandante en el Cuerpo blindado y autor de «Un hombre en un tanque».
http://www.israelhayom.com/opinions/the-palestinians-dangerous-gamble/
Van a perder y feo