Todavía, Todo es Posible

Tal como están las cosas en este momento, 18 asientos de la Knesset todavía están en juego, esperando a los votantes indecisos. Eso significa que el 15% de los israelíes elegibles para votar en las próximas elecciones aún tienen que tomar una decisión. La mayoría de ellos tomará su decisión de camino a la urna. Algunos de ellos decidirán en función de qué boleta los dirigirá una vez que estén detrás de la pantalla de privacidad.

La emoción desempeña un papel central en el drama electoral, que ha visto cómo los votantes indecisos continúan moviéndose como un barco atrapado en un huracán, todas las mañanas aseguran que votarán por un partido diferente.

Mi amigo encuestador, el profesor Yitzhak Katz, confirma matemáticamente los datos anteriores y argumenta que la mayoría de los votantes aún no decididos se encuentran dentro de los bloques de votación. De acuerdo con otra base de datos, entre un cuarto y un tercio de los votantes activos están deliberando entre el Likud del primer ministro Benjamin Netanyahu y el partido del azul y blanco Benny Gantz. Su diálogo interno suena algo así: «Soy un Likudnik. Obviamente, no hay nadie mejor que Netanyahu. Pero ya es suficiente. Debemos decir ‘gracias’ y darle a alguien una nueva oportunidad, pero eso significa que mi voto debería ¿Permitiría a Yair Lapid [el compañero de Gantz en el Partido Azul y Blanco) convertirse en primer ministro? Ya veremos. Podría votar por Gantz, pero no sé si podré seguir adelante con esto «.

El candidato o estratega político que logra descifrar el ADN de estos votantes indecisos, y es capaz en el último momento de inventar la flecha que puede perforar sus corazones directamente, es el que ganará las elecciones. En la sede de la campaña en todo el país, ahora están pensando en las formas de difamar a sus oponentes y una vez en contra evocan emociones fuertes en favor de sus candidatos.

Ningún resultado sería una sorpresa en esta elección. El resultado más probable sería una pequeña victoria para el bloque de la derecha y para que Netanyahu siga sirviendo como primer ministro. También es posible que el Likud y el bloque de la derecha sellen una victoria decisiva, aunque nadie se sorprendería si hubiera un giro dramático. Por cierto, un gobierno de unidad en el que tres primeros ministros [Netanyahu, Gantz y Lapid] sirven en rotación también es una posibilidad.

Se espera que el 80% de los votantes elegibles se dirijan a los centros de votación el 9 de abril. Recomiendo que todos y cada uno de ellos ejerzan su derecho de voto.