El 15 de noviembre de 2019, dos de los representantes más reconocidos del cristianismo y el Islam, el Papa Francisco y el jeque Ahmed El-Tayeb de la universidad islámica egipcia de Al Azhar (este último ha sido considerado por muchos como el más influyente musulmán del mundo) se encontraron y abrazaron como hermanos.
“Durante sus cordiales conversaciones “ anunció el Vaticano en un comunicado de prensa, los dos líderes religiosos discutieron los objetivos de un documento acerca de la fraternidad humana. Más aún, las discusiones se enfocaron fundamentalmente en la promoción del diálogo interreligioso y los valores de la tolerancia y la coexistencia.”
Firmado este año, el 4 de febrero, por el Papa Francisco y Al Tayeb el documento que lleva el título oficial de “ Un documento a favor de la paz mundial y la coexistencia”, rechaza enérgicamente según lo consigna “Noticias del Vaticano” toda justificación de violencia que invoque el nombre de Dios” y afirma” el respeto por los creyentes de todos los lugares de culto, el derecho a la libertad religiosa y el reconocimiento de los derechos de las mujeres”.
Lamentablemente y pese a todo el ruido que rodeó la publicación del documento, que fue calificado de “ cambio histórico”, es difícil darle credibilidad. Después de todo, uno de sus firmantes, el Dr. Ahmed al-Tayeb ha contradicho sistemáticamente, en árabe y hablando para la prensa árabe, todos los conceptos emitidos en el documento por él firmado.
Sirve como precedente la declaración del Instituo de Derechos Humanos de El Cairo que se publicó antes de que el Papa y Al Tayeb firmaran el documento sobre la fraternidad humana.
En marzo de 2016, ante el Parlamento alemán, el jeque Al-Tayeb señaló enfáticamente que el Corán garantiza la libertad de religión, mientras en El Cairo él dice exactamente lo contrario. El combate al terrorismo y a las ideologías religiosas radicales no será eficaz si está enfocado hacia Occidente y hacia instituciones internacionales reconocidas por su apertura a la diversidad de creencias, mientras simultáneamente en el ámbito interno se promueven ideas que contribuyen a la difusión de un violento extremismo que se difunden mediante publicaciones, curriculums educativos y mezquitas.
Esta política de doble cara ha sido desde hace mucho el modus operandi de al-Tayeb. Por ejemplo, el documento sobre la Fraternidad Humana que él firmó afirma que “La libertad de creencias, pensamiento, expresión y actividad es el derecho de toda persona. Debe rechazarse la imposición de una religión, una cultura, o un estilo de vida que otros no están dispuestos a aceptar.”
“Al-Tayeb, sin embargo, dijo muy claramente en árabe que los apóstatas deben ser castigados. En cuanto a la pena que corresponde aplicarles reafirmó : “ Aquellos que han estudiado la ley islámica (al-fuqaha) y los imanes de las cuatro escuelas de jurisprudencia islámica consideran la apostasía un crimen y están de acuerdo en que el apóstata debe renunciar a la apostasía o ser castigado con la muerte.” Para señalar la validez de este juicio, cita un “Hadit” (texto religioso tradicional) del profeta Mahoma.” Aquel que abandona su religión musulmana, debe ser muerto.”
Esto en cuanto a la libertad religiosa.
El documento sobre la fraternidad humana también hace un llamado a los creyentes de diferentes credos, condena toda discriminación, propugna la necesidad de proteger todos los lugares de culto y enfatiza el derecho a la libertad religiosa. Sin embargo, como repetidamente lo han señalado varios reformistas del Islam en Egipto, la minoría cristiana en Egipto, los coptos, sufren una persecución sin precedentes, cuya iniciativa procede directamente de la institución islámica dirigida por al-Tayeb: Al-Azhar.
Por ejemplo, después de que dos iglesias fueron atacadas con bombas, dejando 50 cristianos muertos, el Dr. Islam al-Behery, un popular teólogo musulmán, cuyos llamados incesantes a la reforma del Islam irritaron tanto a Al Azhar que lo acusó de blasfemar contra el Islam, lo que llevó a que fuera encarcelado en 2015, fue entrevistado en el programa de la televisión egipcia “Cada día” dirigido por Amr Adib. Después de ofrecer varios detalles sobre el curriculum radicalizado de al Azhar, opinó que el 70% o el 80% de los actos de terror en Egipto fueron promovidos desde Al Azhar”.
Según un texto utilizado habitualmente en Al Azhar que Behery citó “ todo aquel que mate a un infiel (o kaffir o sea un no musulmán) no debe ser castigado con la muerte, porque la sangre de un infiel es diferente a la de un creyente”. Mientras el predecesor de al-Tayeb, el anterior gran iman egipcio, Sayyid Tantawi (fallecido en el 2010) “ abandonó todos los libros viejos y dejó solo un libro de introducción al Islam, según el-Behery, cuando vino Al-Tayeb “eliminó del programa estudios el libro actualizado y volvió a todos los libros viejos, que todo el tiempo hablan de muertes y derramamientos de sangre.
El comentarista político Dr.Khalid Montasser alguna vez expresó su extrañeza por el hecho de “que en estos tiempos en que asesinos terroristas se basan en textos islámicos que tratan de la apostasía, la revista de “Al-Azhar” ofrece gratuitamente un libro que termina con la exhortación de “cortar la cabeza a quien no crea en el Islam”. Esto notoriamente contradice el Documento “histórico” sobre la fraternidad humana que Al –Tayeb firmó junto con el Papa Francisco, el cual declara de manera inequívoca que las religiones nunca deben incitar a la guerra, a adoptar actitudes de odio, de hostilidad o de extremismo, ni deben incitar a la violencia ni derramar sangre.”
Otros comentaristas en Egipto han señalado que a pesar de la actitud draconiana hacia los “infieles” y los “apòstatas”, cuando se solicitó a Al-Tayeb a que condenara al Estado Islámico como “no islámico”, él se negó. “Es sorprendente, opinó el comentarista de la televisión egipcia Ibrahim Eissa: “Al Azhar nunca deja de condenar a novelistas, escritores y pensadores que contradicen de alguna manera sus puntos de vista. Pero no tienen palabras de condena para el Estado Islámico (ISIS).
En otro comentario televisivo, el Dr.Mohamed Abdulla Nasr, un estudioso de la Ley Islámico y graduado de Al Azhar fue un pasmás lejos en la denuncia de su propia universidad. “Al Azhar” no puede condenar al Estado Islámico como no islámico. Esa organización es de alguna manera un producto de las enseñanzas de Al Azhar. Por lo tanto la universidad no se va a condenar a sí misma. Al Azhar dice que debe haber un califato y que el mundo musulmán debe crearlo. Al Azhar enseña la Ley de la Apostasía y propugna la condena a muerte de los apóstatas. Al Azhar tiene una actitud hostil hacia las minorías y enseña que no debe permitirse la construcción de iglesias. Al Azhar apoya la institución de la”jizia” o sea un método extorsivo para exigir “dinero de protección” a los súbditos no-musulmanes. Al Azhar enseña que la lapidación es un castigo que debe ser aplicado. Entonces ¿ Cómo puede Al Azhar acusarse a sí misma como no-islámica”?
Cuando el mundo reaccionó conmovido ante las imágenes del video del Estado Islámico en el cual sus integrantes quemaron vivo ante la cámara a un piloto jordano en 2015, el periodista egipcio Yusuf al Husayni señaló “ El Estado Islámico solo hace lo que enseña Al Azhar”. El prosiguió citando una cita de textos utilizados por Al Azhar en los cuales se permite quemar vivos a transgresores para el Islam”.
La respuesta de Al Tayeb a todas estas críticas ha sido acusar a Israel. Durante una entrevista egipcia televisada en marzo de 2018, él dijo: “Siempre nos dicen que el terrorismo es islámico. Todos estos charlatanes que gruñen por ignorancia o porque se lo mandaron, nunca hablan de Israel, sobre los genocidios perpetrados por la entidad sionista….Tampoco hablan de los abusos que comete la entidad sionista. Si no fuera por los abusos en la región de la entidad sionista no habría ningún problema.”
Ese es el verdadero rostro del jeque Ahmed al-Tayeb, tal como se le conoce en su patria, Egipto, donde habla libremente en árabe, y no usa el “lenguaje diplomático” usado para el diálogo con los ingenuos líderes occidentales ansiosos de creer lo que quieren oír.
Por ello, la firma de Al-Tayeb en el documento sobre “la Fraternidad Humana, la Paz Mundial y la coexistencia pacífica” no parece valer mucho y sin duda no merece la publicidad que se le ha dado. Pero la situación es peor, porque el Dr. Al-Tayeb es un lobo disfrazado de cordero. El Papa Francisco aparentemente es un pastor que no es capaz de ver que su rebaño es conducido al matadero. Ya ha llegado el momento en que deje de ser una paloma inocente y se vuelva tan astuto como una serpiente, aunque sea para la vida y el bienestar de los millones de cristianos perseguidos bajo el Islam.
***El autor de este artículo, Raymond Ibrahim, es un especialista norteamericano en el mundo musulmán nacido en 1973. Pertenece a una familia cristiana copta oriunda de Egipto emigrada a los Estados. Habla y escribe fluidamente tanto el inglés como el árabe y ha actuado como traductor de la Biblioteca del Congreso norteamericano. Como escritor ha escrito varios libros del cual el más importante es “Sword and scimitar: fourteen centuries of war between Islam and the West” ( La espada y la cimitarra : 14 siglos de guerra entre el Islam y Occidente) publicado en 2018. Ibrahim colabora regularmente con la Fundación (think tank) “Middle East Forum” y el presente texto es una traducción de un texto difundido por dicha institución norteamericana. .
Traducido para Porisrael.org por Egon Friedler.
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