Quizás no sea lo más relevante a destacar al comienzo de esta nota, pero para nosotros es muy importante. Quien escribe y firma esta nota, la cual incluye por cierto opinión basada en información puntual, es una persona que apoya la creación de un Estado palestino independiente y soberano que viva en paz y seguridad junto a Israel, que desea buena vida a los palestinos como vecinos de Israel y no se alegra jamás cuando mueren palestinos no involucrados en terrorismo. No vemos en el pueblo palestino a un enemigo sino solamente en los terroristas o quienes los defienden, sea directamente o con excusas y mentiras con las que compartimos hoy aquí en esta nueva nota.Creemos que todo aquel que piensa así, debería ser el primero en condenar los mensajes que emanan demasiado a menudo del liderazgo palestino.
Abbas Zaki, una de las figuras más conocidas de Al Fatah, la base de la OLP, ha vuelto a dar un ejemplo de ello, según informó un reporte de Palestinian Media Watch, que tradujo al inglés un discurso de Zaki pronunciado en árabe y reproducido en la página oficial de Fatah en Facebook.Esa publicación, claro está, es avalar la postura allí planteada y presentarla como representativa del movimiento.
Hace ya varias semanas, el 19 de octubre 2019, la página oficial de Al Fatah citó a Abbas Zaki, miembro del Comité Central de Fatah, refiriéndose a un ataque cometido por un palestino cuatro años antes, en octubre del 2015, en Jerusalem:
“Cuando los hijos de Palestina sintieron tiempo atrás que el liderazgo (A.J: en referencia a la Autoridad Palestina) no sabía qué hacer, Muhannad Halabi salió con un cuchillo. Logró infiltrarse a Jerusalem y matar a un rabino. Cuando vió a un niño pequeño, una mujer y su hijo, no los mató. Esto viene del Todopoderoso Alá. Es que nosotros no matamos gente como se nos antoja. Hay valores, costumbres”.
Empecemos por un comentario general. ¿Matar al rabino estaba bien? Ese es el mensaje. ¿Acaso tiene alguna justificación, matar a un rabino que iba caminando por la Ciudad Vieja con su esposa y sus dos hijos en camino a la oración?
Pero más allá de ello, Abbas Zaki mintió descaradamente.
Ante todo, se refería al atentado cometido, como adelantamos, en octubre del 2015, en el que fueron asesinados a puñaladas Nehamia Lavi y Aharon Banita. La verdad de lo ocurrido, dista mucho de lo descripto por Abbas Zaki.
Aharon Banita y su esposa Adele, con sus dos hijos pequeños, Matan de 2 años y un bebé-cada uno en su cochecito-estaban caminando por un callejón de la Ciudad Vieja, cerca de la Puerta de los Leones, cuando Muhannad Halabi se abalanzó sobre ellos y comenzó a acuchillarlos a ambos. Ambos trataron de combatirlo, Adele corrió a pedir ayuda, primero a dueños de los negocios árabes cercanos-que según contó le escupieron, se rieron y no hicieron nada- y luego a un grupo de policías que divisó a lo lejos. Mientras tanto el rabino Nehemia Lavi , que vivía cerca y oyó ruidos, salió a ver lo que ocurría y trató de ayudar, pero fue acuchillado de muerte. El terrorista apuñaló a los Banita repetidamente hasta que un efectivo de la Guardia de Fronteras le disparó.
Según Abbas Zaki, al matar al padre solamente, Halabi estaba siguiendo “valores” palestinos.
Tal como explica PMW, aquí hay una doble mentira.
1) En la práctica, la AP ha manifestado repetidamente su apoyo al asesinato también de mujeres y niños.
2) El terrorista sí atacó a la mujer y a uno de los niños. Adele resultó seriamente herida y su hijo Matan sufrió heridas leves. Ambos fueron hospitalizados. Ella en el hospital Hadassah Ein Karem y su hijo en el Shaarei Tzedek.
Además, resulta increíble que con tanta desfachatez se proclame como “valor” palestino, el haber matado al padre.
PMW recuerda que la Autoridad Palestina paga a todos los terroristas-o sus familias, si ellos murieron-por la participación en atentados contra israelíes. Cuando más años de prisión les fueron sentenciados y cuanto más cruento haya sido el resultado del atentado, más dinero reciben.
Uno de los ejemplos más terribles se refiere al del atentado cometido el 11 de marzo del 2011 en el asentamiento Itamar , cuando los primos Awad irrumpieron a la casa de la familia Fogel, asesinaron a los padres Ruth y Ehud y a sus tres hijos: Yoav de 11 años, Elad de 4 y Hadas de 3 meses. Desde su detención, los asesinos recibieron de la Autoridad Palestina una suma equivalente a 156.000 dólares.
Además, la televisión oficial de la Autoridad Palestina entrevistó meses después (19 y 21 de enero del 2012) a la madre de uno de los asesinos y a una tía. Se habló de uno de los Awad como “el héroe, la leyenda”.
Claro que los ejemplos son numerosos y se remontan a muchos años atrás. Con estos alcanza por hoy.
Creer en la posibilidad de 1 estado arabe pacifico en tierra históricamente israeli es vivir de ilusiones