Imagen: Tal Cohen
Cuando nos referimos al antisemitismo islámico, lo primero que manifiestan los árabes musulmanes es que no puede existir tal acepción denominada antisemitismo, puesto que ellos son un pueblo semita también. Si bien esto es cierto, los árabes representan sólo el 20% aproximadamente del total de islámicos en el mundo, el otro 80 % no es árabe. Por eso cuando hablamos de antisemitismo islámico, el término hace referencia exclusivamente a antijudaísmo pues el pueblo judío es el único que sufre este flagelo de la discriminación, ya sea verbal, física, o de cualquier otro tipo por parte de ciertos sectores del Islam. Además se argumenta que la mayor parte de los islámicos no son antisemitas, ni siquiera terroristas, ni que están de acuerdo con las acciones terroristas en cualquiera de sus manifestaciones, lo cual es una verdad también.
Pero esta verdad convive con el hecho de que la mayoría de los terroristas en el mundo de hoy son islámicos, teniendo como principales objetivos de sus atentados no solo a países occidentales sino también a Israel y al pueblo judío, sin que se observen manifestaciones masivas de la mayor parte de los musulmanes que están a favor de la convivencia pacífica, y ni siquiera manifestaciones públicas de sus prominentes líderes expresan rechazo al antisemitismo y al odio a Israel y a Occidente. Este artículo no tiene la intención de abarcar la enorme cantidad de atentados antisemitas islámicos realizados en Europa y en otras partes del mundo en distintos momentos de la historia, sino solamente tratar de entender cual es el basamento de cierta parte del Islam para justificar su antijudaísmo a ultranza.
El Corán siempre ha proclamado que es la única religión verdadera, y que su objetivo es que todo el mundo acepte esta verdad, como bien señala José Javier Esparza en su libro “La historia de la Yihad”, por lo tanto el fundamentalismo islámico no sería una desviación ni un accidente, sino una tendencia permanente que bebe en las fuentes del Islam. Por lo tanto, según este autor, la Yihad espiritual es una de las partes y es la lucha interior del musulmán para cumplir las leyes del Corán, aunque también es necesario llevar este combate al mundo físico, o sea, combatir contra todos los enemigos del Islam por eso la yihad se puede dividir en
-Yihad Mayor que es una lucha personal por mejorar a los ojos de Dios.
-Yihad Menor que es un combate físico contra los enemigos del Islam.
La interpretación del Corán en sus cuatro escuelas, ya sea Hanbali, Shaafi, Hanafi o Maliki ( los nombres de las escuelas están relacionados con sus inspiradores), no ha sido precisamente generosa con los que no son islámicos en cuanto a la convivencia con ellos, especialmente considerando que los que no profesan esta religión en países con gobiernos islámicos viven como ciudadanos de segunda (dimmih), teniendo que pagar un impuesto de sumisión para poder seguir viviendo allí. Ello afecta no solo a los judíos, sino también a los cristianos y a cualquier persona que no sea islámica. El Corán tiene muchas citas donde se refiere a los judíos como simios y monos y ello da una idea de la manera de educar a las generaciones islámicas jóvenes en un círculo de odio y discriminación hacia Israel.
LIDERES Y PENSADORES ISLÁMICOS.
Estos son algunos pensadores islámicos que con sus posturas han contribuido a la base legal en que se basan los terroristas para justificar sus execrables acciones.
1.Abu ibn Muhammad ibn Rushd.
Este pensador es conocido en la historia con el nombre de Averroes (el nieto), era un pensador y un intelectual islámico nacido en Córdoba en el año 1126 (España) y dedica un capítulo entero del libro Al Bidayah (capitulo 10) escrito en el año 1168 a la Yihad y a la acción de aplicar la ortodoxia de la sharia que es la ley religiosa islámica a todos los aspectos de la vida. Esto revela que su erudición e inteligencia, no es un obstáculo para aceptar la Yihad como algo natural en la vida del Islam, por el contrario, cree que la Yihad está justificada y es una obligación de los musulmanes, con la única condición que sea una Yihad comunitaria y no individual. El escritor José Javier Esparza en el libro anteriormente citado explica que la guerra santa o Yihad persigue el ingreso de la gente en el Islam ya que el Islam es la única religión verdadera y en consecuencia debe prevalecer.
2. Taqi Al-Din Ahmed Ibn Taymiyya
Este hombre era un teólogo, jurisconsulto y yihadista que nació en el año 1264 y era uno de los héroes de Osama Bin Laden quien lo citaba frecuentemente. Era un integrista dispuesto a tomar las armas, un yihadista pleno. Era sunita, y adscribía a la escuela Hanbali, la más fundamentalista de las cuatro escuelas islámicas, y estaba en contra de cualquier innovación en la práctica del Islam y decía que lo peor que le podía pasar al Islam era el alejamiento de la ortodoxia. Cualquier mínima desviación del Corán era una blasfemia que no debía ser tolerada. Era uno de los más radicales en la historia islámica. Creía que la yihad debía ejercerse contra los enemigos del Islam y también contra los falsos musulmanes. Fallece a los 75 años de edad y hoy sus enseñanzas son minuciosamente llevadas a cabo por los fundamentalistas islámicos.
3)Hassan Al Bana
Es el fundador en el año 1928 de la organización Hermanos Musulmanes, era seguidor de la escuela fundamentalista Hanbali y había estudiado en la prestigiosa escuela teológica islámica Al Azhar de El Cairo, Egipto. Los Hermanos Musulmanes son la matriz ideológica del movimiento terrorista Hamas que está en contra del Estado de Israel y el sionismo. Es interesante el intento del movimiento Hamas de limpiar su imagen al mundo con una nueva constitución que elimina su referencia a los Hermanos Musulmanes y no llama al exterminio del pueblo judío como lo hacìa en el año 1988. El mismo lobo cambiando su retórica antijudía. Hasan Al Bana muere en un tiroteo en el año 1949 en Egipto. Su liderazgo es heredado por Al-Hudaybi quien muere también en Egipto en arresto domiciliario en el año 1973.
4)Sayyid Qtub
Nacido en el año 1906 educado en el Cairo, Egipto. Viaja entre los años 1948 a 1950 a las universidades norteamericanas de Washington y Standord. A su regreso a Egipto equipara a EE. UU. como Sodoma y Gomorra. Ingresa en el año 1951 a los Hermanos Musulmanes y participa del complot para asesinar al Coronel Nasser en el año 1954. Es encarcelado y en prisión alumbra y justifica los principios del yihadismo contemporáneo. Cree que la decadencia del islam es consecuencia de la enfermedad espiritual y piensa que hay que volver a los tiempos del profeta Mahoma para restaurar los principios islámicos y que el musulmán que no vive como tal es un apóstata y le cabe la yihad ofensiva y no defensiva. Sayyid Qtub dio el paso que divide Yihad e Islam e influye también enormemente en Los Hermanos Musulmanes. Fue ahorcado en Egipto el 29-8-1966 y muchos lo consideran un mártir. De la predica de Sayyid Qtub nace el grupo Al-Gama Al Islamiya o sea el Grupo Islamico terrorista y la secta Yama a Al-Muslimim (Sociedad de Musulmanes) y se rebautiza luego con el nombre Takfir war Hijra que quiere decir apostasía y exilio que fuera fundada por un discípulo de Sayyid Qtub que se llamaba Sukri Mustafa cuyo nombre está ligado a los atentados más sangrientos y desde aquí nace luego la organización Yihad Islámica.
5)Muhamad-Ibn Abd Al Wahab
Clérigo Sunni nacido en el año 1792 de la tribu de los Banu Tamim. Preconizaba la vuelta al Islam puro y se convirtió en una prestigiosa autoridad religiosa. Fundador del wahabismo que es una corriente islámica sunni y es una visión más estricta de la religión islámica. Perteneció a la Escuela Hanbali, que es la escuela islámica más fundamentalista. Es este wahabismo el que tiene la enorme influencia en Arabia Saudita y en el Golfo Pérsico. Como ha señalado la cadena de noticias BBC el 17-12-2015 en su publicación, el wahabismo es una forma estricta y conservadora del islam y algunos afirman que sus pensamientos lo constituyen en el padre ideológico del Estado Islámico o ISIS.
6)Amin-Al Husayn
Nacido en Jerusalem en el año 1895 fue un líder nacionalista árabe y un líder religioso musulmán y se constituyó en el Gran Mufti de Jerusalem. Era un antisemita declarado, encabezó pogroms contra los judíos durante el Mandato Británico de Palestina y se convirtió en el principal aliado islámico del Tercer Reich durante la Segunda Guerra Mundial, incluso llegó a reunirse con Adolf Hitler. Promovió la creación y el reclutamiento de musulmanes bosnios y albaneses para el ejército alemán, las Waffen-SS, y ayudó a formar la división 13 de Montaña SS Handschar, la que fue célebre por las masacres cometidas contra los partisanos yugoslavos. En consecuencia, existen antecedentes sobrados a través de la historia, que ciertas escuelas y pensadores no están dispuestos a convivir con el mundo no islámico.
CREACIÓN DEL ESTADO DE ISRAEL.
Con la creación del Estado de Israel votado a favor por las Naciones Unidas en la Resolución 181 del 29 de Noviembre de 1947, el odio árabe e islámico a lo judío se profundiza aún más y empieza a reverdecer lo que se denomina el Islam Político. Este movimiento político pretende en nombre de la ortodoxia religiosa extender el gobierno de la ley religiosa islámica (Sharia) a todas las esferas de la vida, como señala Javier Jose Esparza en el libro citado, el Islam Político se asimila a Integrismo o Fundamentalismo, y no solo pretende la destrucción de Israel sino la aplicación de la ley religiosa islámica en todos los territorios que se conquisten.
Este problema no tiene solución si no se combate el odio desde su base. Este odio ha ido extendiéndose cada vez más a la población árabe e islámica, constituyendo un verdadero “racismo de estado” contra lo judío e Israel, y es precisamente ese odio lo que es incompatible con la paz.
La creación del Estado de Israel ha sido un hecho inadmisible para cierta parte del mundo islámico. Países como Irán, aún hoy en día amenazan a Israel con su destrucción, sin que la ONU sancione de ninguna manera a Irán por dicha proclama.
El conflicto palestino, además es utilizado por dichos dirigentes palestinos y otros del mundo islámico por convenir a sus intereses estratégicos, políticos y económicos, dándole la espalda a cualquier tipo de solución y enarbolando dicho conflicto y su falta de solución al mismo como excusa para atacar a Israel y diseminar por el mundo un vómito antisemita digno de Hitler. Enarbolan el discurso de los Protocolos de los Sabios de Sion, asqueroso libelo antisemita publicado por primera vez en 1902 en la Rusia zarista, con el cual pretendían demostrar que los judíos tienen un plan mundial para la dominación de todo el globo terráqueo. Incluso este libelo, según señala el periódico The Times era un torpe plagio de la obra “Diálogo en el infierno entre Maquiavelo y Montesquieu”, obra de Maurice Joy en la que se critica el gobierno de Napoleón III.
ÉXODO JUDÍO DE PAÍSES ISLÁMICOS.
Como bien señala el Profesor Shmuel Trigano, entre los años 1920 y 1970 fueron expulsados de los países árabes y de otros países musulmanes cerca de 900.000 judíos. Como bien señala el diario de noticias digital Iton Gadol el 30-11-2015 los judíos de estos países debieron forzosamente abandonar sus lugares donde habían nacido y vivido durante siglos, despojados de sus bienes y posesiones materiales, además de haber sufrido pogromos, persecuciones, detenciones y ejecuciones. Como consecuencia de ello dejaron de existir comunidades judías con historias milenarias, llevándose a cabo una “limpieza étnica” de la población judía en los países árabes e islámicos. De ello casi no se habla y ha sido el éxodo judío olvidado. En la historia también se registran matanzas de judíos como por ejemplo los judíos del clan de Banu Qurayza, realizada en Arabia Saudita en el año 627, en la cual asesinaron a todos los hombres, y tomaron como esclavas a las mujeres y niños de dicha tribu. También las tribus judías de los Banu Kaynuka y los Banu Nadir que vivían en lo que es ahora Arabia Saudita en esa zona fueron expulsados en el siglo VII. Estos hechos demuestran que el antisemitismo islámico en la región no necesitó de la creación del Estado de Israel para causar estragos. Los hechos históricos relatados en este apartado son anteriores en muchos siglos a la creación de Israel.
REFLEXIONES ADICIONALES.
El primer paso es entender los peligros propuestos por el antisemitismo árabe e islámico, según lo señala la publicación MEMRI (Instituto de Investigación de Medio Oriente) el 27 de Mayo de 2008, en un artículo firmado por N. Maruani. Este antisemitismo forma la opinión pública a lo largo del mundo árabe e islámico y crea una atmósfera en donde a los judíos, individual y colectivamente, no se los considera totalmente humanos. Esto es, según el escritor Norman Cohn una garantía para el genocidio y no se necesita deletrear la siniestra implicación de esto.
Tendría que haber además una enorme presión diplomática internacional sobre los países que prohíjan estos pensamientos y prejuicios sin temor a ningún tipo de represalias, y anteponer la dignidad de la vida a intereses políticos. Por consiguiente, oponerse al antisemitismo árabe e islámico no es meramente un asunto solamente de combatir la falsedad y el prejuicio: es un componente vital en la lucha de los judíos en Israel y en otras partes del mundo por la seguridad, la paz y la dignidad humana.
CONCLUSIONES
Es necesario entender que hace falta un cambio de mentalidad en parte del mundo islámico. Los cambios en el caso que se produzcan requieren de mucho tiempo. Es un camino donde debe empezarse por entender entre otras cosas lo siguiente:
a) Que Israel es una realidad que no tiene marcha atrás.
b) Que Israel es parte de la solución para el conflicto palestino.
c) La miseria a la que los dirigentes palestinos y árabes condenan a su pueblo solo se basa en intereses espurios personales que no tienen que ver con el futuro de la llamada población palestina. Tienen que encontrar la forma de tener líderes que no declamen el odio a Israel y se dediquen a pavimentar el camino de la paz.
d) Que el Islam es parte necesaria de la solución, y debe purgar de su seno a la minoría racista islámica que pretende enarbolar el Islam Político, para que el mundo no sea un lugar de conflicto contra lo judío y todo lo que no sea islámico.
e) Que la verdadera NAKBA (Tragedia) no fue la creación del Estado de Israel, sino la no aceptación del mundo islámico de la creación de este país. Gran parte de los árabes islámicos viven en condiciones deplorables en Medio Oriente mientras que Israel es una de las mayores potencias científicas y tecnológicas del mundo, pudiendo contribuir a los países islámicos para mejorar sus vidas.
f) Es una obligación moral del Islam desterrar la minimización del holocausto del pueblo judío, que exterminó a 6.000.000 de este pueblo y cesar la prédica maliciosa, injusta y mentirosa de asociar a los judíos con las prácticas nazis.
G) Es una obligación de las Naciones Unidas luchar incesantemente contra el flagelo del antisemitismo, entre otros, y luchar denodadamente contra el intento de deslegitimar el Estado de Israel.
g) Aceptar que el destino de la humanidad es la convivencia de todos los pueblos, culturas, religiones y creencias, ya que la humanidad es más rica en la diversidad que en la división y ello implica aceptar al diferente.
Finalmente, la paz no es solamente algo que uno declama y desea, sino lo que uno hace para conseguirla.
Hola Alberto. Tu nota esta muy clara y es importante. Pero no entiendo xq usas el lenguaje de nuestros enemigos. Los auténticos palestinos son los judíos que era