Israel observó los combates entre la unidad Radwan de Hezbolá y las fuerzas turcas en la provincia siria de Idlib muy de cerca, al enterarse de que a la unidad de élite le resultaba difícil enfrentarse a un ejército convencional.
A principios de febrero, los militares de Turquía desplegaron tanques, vehículos blindados, artillería y tropas en Idlib para detener una ofensiva del régimen sirio para recuperar el último bastión de la oposición del país, que fue respaldado por cientos de tropas de Hezbolá y milicias chiítas apoyadas por milicias. El Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica.
Si bien Hezbolá ha perdido miles de combatientes desde que el grupo terrorista libanés entró en la lucha del lado del presidente del régimen sirio Bashar Assad, la operación turca en Idlib, que es aproximadamente la mitad del tamaño del vecino Líbano, causó pérdidas no vistas en años.
Las pérdidas incluyeron innumerables agentes pertenecientes a la unidad de élite Radwan de Hezbolá.
El ejército de Israel pudo identificar a varios operativos de Radwan asesinados durante los combates con Turquía por parches usados por los combatientes.
La unidad, nombrada en honor al comandante militar de Hezbolá, Imad Mughniyeh, alias al-Hajj Radwan, quien fue asesinado en Damasco en 2008 en una operación atribuida a Israel, se estableció para llevar a cabo operaciones encubiertas contra Israel.
Mientras que los operativos de la unidad lucharon en Siria durante varios años y obtuvieron una amplia experiencia operativa, la mayoría regresó al sur del Líbano.
Se espera que los operativos de Radwan estén a la vanguardia de cualquier ataque de Hezbolá contra Israel, infiltrándose en las comunidades israelíes acompañadas por una gran cantidad de cohetes, morteros, misiles antitanque y más.
Aunque Hezbolá ha redistribuido tropas a la frontera entre Líbano e Israel, las FDI no creen que un ataque preventivo contra las fuerzas de Radwan sea el movimiento correcto en este momento.
Israel ha estado trabajando para fortalecer su frontera norte durante varios años, pero debido a restricciones financieras solo ha completado 14 km. de una barrera de hormigón a lo largo de la frontera libanesa. El resto del límite con el Líbano es una valla que se construyó originalmente en la década de 1980, y aunque se han actualizado varias secciones, se dice que está en mal estado.
La cerca proporciona al ejército indicios de violaciones, lo que permite a las tropas llegar rápidamente a la escena, pero los altos oficiales han admitido que no detendrá las infiltraciones de los agentes de Radwan.
Debido a la amenaza de infiltraciones de Hezbolá, se espera que decenas de comunidades a lo largo de la frontera con el Líbano sean evacuadas en caso de que estalle una guerra.
Las FDI, que afirman que cada tercera casa en el sur del Líbano es utilizada con fines militares por el grupo, se centraría en destruir las aldeas a lo largo de la frontera para evitar que se usen operativos y armas adicionales de Radwan contra Israel.
Sin embargo, aunque Israel no cree que Hezbolá planee provocar una guerra con Israel en el futuro cercano, a las FDI les preocupa cualquier evento importante que amenace al régimen en Teherán, como un error de cálculo de Washington contra Irán en el Golfo Pérsico o en Irak , podría llevar a Hezbolá a atacar a Israel.
Traducido para Porisrael.org por Dori Lustron
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