Por Israel


Defendemos un ideal no a un gobierno
Síguenos en Facebook Twitter Twitter YouTube RSS Feed
| sábado noviembre 16, 2024

“Es un acto israelí”: El desarme de Hezbollah enfrenta a los libaneses


Este último fin de semana los manifestantes volvieron a las calles de Beirut y otras ciudades del Líbano, y con ellos los fantasmas de la guerra civil.

La revuelta contra el gobierno comenzó en octubre del año pasado, cuando la gente salió a protestar contra la corrupción y el sectarismo, a exigir un reparto más equitativo de los recursos y la renuncia de toda la clase política, bajo el lema “todos significa todos”.

Aquellas protestas llevaron a la renuncia del entonces primer ministro (sunita) Saad Hariri, del Movimiento del Futuro, que pertenece al bloque 14 de marzo y también se retiró del gobierno. El nuevo ejecutivo llegó al poder de la mano de la coalición alineada con el movimiento chiita Hezbollah, el bloque 8 de marzo.

Las protestas y acampadas fueron suspendidas debido al brote de coronavirus, pero la indignación y rabia de los libaneses permaneció contenida y ahora resurge con más intensidad por la grave crisis económica que atraviesa el país, agigantada por las consecuencias de la pandemia.

“Una voz hebrea, incluso si habla en árabe”

En la noche del sábado, en la ciudad de Beirut, los manifestantes que volvieron a salir a las calles protagonizaron más de un enfrentamiento violento.

En primer lugar, se enfrentaron a soldados y la policía antidisturbios. Sin embargo, rápidamente los efectivos de seguridad tuvieron que pararse como un muro humano y separar a manifestantes y contra-manifestantes, éstos últimos de los movimientos Hezbollah y Amal, que avanzaban unos hacia los otros, corriendo, enfurecidos.

Según la agencia de noticias France Presse, en el barrio Khandaq al-Ghamiq ocurrió el incidente que encendió la mecha: partidarios de Hezbollah y Amal corearon cánticos ofensivos e insultos a figuras históricas veneradas por los sunitas, principalmente contra una de las esposas del profeta Mahoma, Aysha.

Varios videos sobre este incidente se difundieron en las redes y se hicieron virales, tras lo cual más gente salió a las calles, especialmente en los distritos sunitas de la capital libanesa. En algunas zonas hubo intercambio de disparos y bloqueo de calles y carreteras.

También se informó sobre choques violentos en un área cristiana-chiíta asociada con el comienzo de la Guerra Civil de 1975-1990, la zona de Shiyah-Ain al-Rummaneh, lo que provocó que las fuerzas de seguridad se desplegaran en grandes cantidades.

Políticos y líderes religiosos difundieron declaraciones con las que intentaban apaciguar los ánimos y frenar la violencia y Hezbollah se desentendió oficialmente de sus partidarios que provocaron los disturbios con sus cánticos.

El presidente del Parlamento, Nabih Berri, condenó la agresión y la violencia sectarias del fin de semana. Berri, quien es el político chiíta más destacado del país, dijo que “las provocaciones intestinas son peores que el asesinato y buscan matar al país».

En un comunicado emitido por la Oficina de Prensa del Parlamento, Nabih Berri aseguró que “todo acto, de cualquier lado, que atenta contra la unidad, seguridad, estabilidad y medios de vida libaneses es un acto israelí”.

“Cualquier voz que promueva la lucha entre los libaneses es una voz hebrea, incluso si habla en árabe», finalizó el presidente del Parlamento.

“No a las armas, no a Hezbollah”

Entre las pancartas se podía leer: “No a las armas, no a Hezbollah”, y “Sólo armas legales”, “1559, haz que se haga realidad”.

«Con sus armas, controlan el estado, controlan todo», declaró al sitio Al Arabiya uno de los manifestantes, que no dio su nombre.

“El contrabando proviene de las armas, la pobreza proviene de las armas, el robo proviene de las armas. Si nos deshacemos de las armas, el resto de los problemas se resolverán”, agregó.

Otra mujer explicó a este medio que apuntaba a Hezbollah porque “nadie además de ellos tiene armas en el terreno”. “Estamos pidiendo deshacernos de las armas ilegales y nadie debería tener armas excepto el ejército libanés”.

Sin embargo, no todos los manifestantes estaban de acuerdo. Algunos, porque no querían “politizar” las protestas y otros porque apoyan la idea de que Hezbollah conserve sus armas.

Muchos de los grupos de activistas pidieron que la gente se mantenga unida bajo las demandas originales, las de octubre de 2019, y que se limiten a exigir un cambio de sistema y el fin de esta clase política, a la que acusan de corrupción, mala administración y derroche de fondos públicos.

“Lo más importante para nosotros es abordar la crisis económica y pedir la renuncia del gobierno, terminar con la corrupción de los últimos 30 años”, dijo un hombre en una entrevista televisada, citado por The Daily Star. «No somos parte de este eslogan contra las armas de Hezbollah. Esto no es de lo que se trata en este momento”, explicó el manifestante.

La activista Hoda Hafez declaró a The Daily Star: «La prioridad hoy es no desarmar a Hezbollah, y las llamadas que se lanzaron resultan sospechosas».

Algunos jóvenes sostenían pancartas afirmando su derecho a portar armas. «Las armas son mi derecho y me resisto», se podía leer.

Muchos manifestantes que marcharon en la ciudad de Sidón el viernes dijeron a la Agencia Nacional de Noticias del Líbano que no participarían en las protestas del sábado en Beirut debido al desacuerdo en las demandas.

Entre los grupos de manifestantes están los que exigen elecciones anticipadas y los que no están de acuerdo y aseguran que, si hay elecciones sin que antes se cambie el sistema los políticos corruptos de hoy serán reemplazados por corruptos nuevos. Están los que exigen el desarme de Hezbollah y los que rechazan la exigencia. También hay quienes quieren que las manifestaciones no tengan tinte político y sólo exijan mejorar la vida de los ciudadanos libaneses en su país.

Pero todos parecen coincidir en el miedo a que estas disidencias y enfrentamientos violentos lleven a una nueva guerra civil y el temor de que – a la sombra de las divisiones internas – las manifestaciones pierdan fuerza y que finalmente nada cambie para los desesperados ciudadanos libaneses.

 

 

Focoenmediooriente

 
Comentarios

Aún no hay comentarios.

Deja un comentario

Debes estar conectado para publicar un comentario. Oprime aqui para conectarte.

¿Aún no te has registrado? Regístrate ahora para poder comentar.