Israel y los Emiratos Árabes Unidos están trabajando juntos para eliminar la Agencia de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) sin resolver el problema de los refugiados palestinos, informó el periódico francés Le Monde .
El informe alega que esto ha estado en marcha desde que Israel y los Emiratos Árabes Unidos anunciaron la normalización entre ellos en agosto
Según el informe, los funcionarios emiratíes están considerando un plan de acción destinado a eliminar gradualmente a la UNRWA , sin condicionar este desarrollo a una resolución del problema de los refugiados. Esto es a pesar de que los Emiratos Árabes Unidos han sido una fuente importante de financiación para la UNRWA en 2018 y 2019, junto con Qatar y Arabia Saudita, para compensar la suspensión de fondos del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a la agencia, llevándola al borde de la bancarrota.
Al hacerlo, Abu Dhabi se uniría a una demanda de larga data de Israel, insistiendo durante años en que la UNRWA está obstruyendo la paz.
La agencia de la ONU UNRWA se estableció hace 70 años para brindar ayuda a los refugiados palestinos, y su mandato se renueva cada tres años.
El año pasado, en noviembre, la Asamblea General de la ONU aprobó la extensión del mandato de la UNRWA por tres años más, solo una semana después de que su comisionado general, Pierre Krahenbuhl, renunciara luego que el informe de ética de la ONU alegara mala gestión y abusos de autoridad entre altos funcionarios de la agencia, luego que Israel pidió para el cierre de la UNRWA.
El informe de ética afirma que desde 2015, los miembros del círculo íntimo de la UNRWA han ido consolidando de manera constante su poder, pero que la situación se intensificó notablemente desde principios de 2018, coincidiendo con la decisión de Estados Unidos de retirar su financiación, lo que sirvió «como excusa para una situación extrema de concentración del poder de toma de decisiones en los miembros de la ‘camarilla’ ”.
Además, afirmó que estos desarrollos llevaron a un «éxodo de personal superior y de otro tipo» y una cultura de trabajo «caracterizada por la baja moral, el miedo a represalias … desconfianza, secreto, acoso, intimidación y marginación … y una gestión que es altamente disfuncional, con una ruptura significativa de la estructura regular de rendición de cuentas ”.
Gran parte del informe se centra en las acusaciones que rodean la conducta de Krahenbuhl, que asumió el cargo en marzo de 2014, citando una serie de actividades corruptas y poco profesionales.
Poco después que se conocieran los detalles del informe, los Países Bajos y Suiza suspendieron la financiación de la UNRWA. Fueron seguidos en agosto de 2019 por el gobierno de Nueva Zelanda.
Mientras que la principal agencia de la ONU que se ocupa de los refugiados, ACNUR, se concentra en reasentarlos, facilitar su repatriación voluntaria o su integración local y reasentamiento, UNRWA mantiene a millones de personas como refugiados década tras década, ampliando las cifras año tras año.
Tovah Lazaroff, Neville Teller, Omri Nahmias y Khaled Abu Toameh contribuyeron a este informe.
Traducido paara Porisrael.org por Dori Lustron
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