Todo territorio que fue conquistado por el Islam pertenece como dotación perpetua al Islam [1] es waqf, es tierra sagrada islámica y que está prohibido por la ley islámica dejar que un waqf permanezca bajo jurisdicción no islámica. Toda tierra que fue conquistada por la Espada del Islam es waqf, el waqf de Alá, y no puede ser cedida, ni vendida, ni negociada.
El panislamismo cree con firme convicción que el Islam se expandió gracias a la ayuda de Alá. La divinidad impulsó y ayudó a los musulmanes, los auténticos creyentes que profesan la religión verdadera, el Islam, a conquistar el mundo para implementar la Sharía, la ley islámica. Pero las sucesivas derrotas de los ejércitos musulmanes fueron debidas al abandono del cumplimiento correcto del Islam por parte de los musulmanes. Es por ello que los panislamistas se adhieren con fuerza al Islam primigenio, el de la Yihad, y sin componendas combaten contra los infieles en cualquier lugar del mundo.
Aquellos territorios que estuvieron sometidos (liberados, en lenguaje islamista) por el Islam como Israel, la península Ibérica (España, Portugal, Gibraltar, sur de Francia), Grecia, Hungría, parte de Austria, Bulgaria, Rumania, Crimea, deben ser reislamizados. Es una creencia generalizada en el mundo musulmán que el Islam reconquistará la Europa que estuvo bajo la Sharía y que el resto de Europa será conquistada [2] por la migración, el vientre de las mujeres musulmanas [3] , y la Espada (terrorismo).
La discusión en el mundo musulmán no es sobre si Europa en general, y España en particular, será o no conquistada por el Islam, sino cómo y cuándo.
El iman Al Qadarawi [4], en 2.005 hizo la siguiente declaración: «El Islam volverá a Europa como conquistador victorioso tras ser expulsado de ella dos veces, una desde el sur, desde Al Ándalus, y la segunda desde el este, cuando llamó a las puertas de Atenas. Conquistando Europa, el mundo será del Islam». (el imam Al Qadarawi, parece que confunde Atenas con Viena).
Y el líder libio Muammar el Gadafi [5] dijo posteriormente: «Hay signos de que Alá garantizará la victoria islámica sobre Europa sin espadas, sin pistolas, sin conquistas. No necesitamos terroristas, no necesitamos suicidas, los más de 50 millones de musulmanes en Europa la convertirán en un continente musulmán en pocas décadas».
El imam y jeque Muhammad Ayed el 11 de septiembre de 2015 [6], (exactamente 14 años después del atentado del 11-S en Nueva York), en su sermón en la mezquita de Al-Aqsa en Jerusalén [7] , se dirigía a sus fieles diciendo que los países europeos no estaban rodando la alfombra roja para los migrantes porque fueran compasivos, sino porque Europa estaba en extrema necesidad de una nueva fuente de mano de obra: “Europa se ha convertido en vieja y decrépita y necesita refuerzo humana … .ellos no están motivados por la compasión por el Oriente Medio, su gente y sus refugiados”, dijo Ayed, y agregó: “Pronto los vamos a pisotear bajo nuestros pies, Alá que lega. […] En toda Europa, todos sus corazones están entusiasmados por el odio hacia los musulmanes. Desean que estemos muertos, pero como han perdido su fertilidad, es por lo que buscan la fertilidad en medio de nosotros. […] Les daremos la fertilidad. Han perdido su fertilidad, Vamos a procrear hijos de ellas, les daremos fertilidad, vamos a conquistar sus países. Les guste o no, alemanes, americanos, franceses, italianos y todos lo que son como vosotros tomad, acoged a los refugiados. No tardaremos en recogerlos en la Venida del Califato, y os diremos: estos son nuestros hijos, y os enviaremos nuestros ejércitos contra vosotros!¡Esto ayudará a expandir el Califato!”.
La Espada del Islam en su versión Estado Islámico y Al Qaeda no va conquistar militarmente Europa, pero si va amedrentar a los europeos y los gobiernos cederán, como ya está ocurriendo, al chantaje islamista: «Si no queréis más violencia, dad más prebendas al colectivo musulmán», «si no nos dais lo que os pedimos, nuestros jóvenes se radicalizarán» estos son los mantras que repiten los líderes musulmanes ante las autoridades occidentales.
El Subsecretario General de la Oficina de las Naciones Unidas contra el Terrorismo, Vladímir Voronkov [8] , en una reunión del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha declarado que el grupo islamista Estado Islámico podría recuperar la capacidad de organizar ataques en todo el mundo en el transcurso del 2021, citando el duodécimo informe del secretario general de la ONU, António Guterres, sobre la amenaza planteada por el Estado Islámico a la paz y la seguridad internacionales.
Por su parte, el embajador ruso ante la ONU, Vasili Nebenzia, dijo que el grupo yihadista Estado Islámico representa una amenaza que podría extenderse a los países del sur de África. «La amenaza del Estado Islámico está ganando fuerza en el Sahara y el Sahel y en áreas de Mali, Burkina Faso y Níger; las entidades del Estado Islámico en el Sahara mayor están tratando de crear el califato islámico», dijo Nebenzia.
En ese sentido, indicó que «dado que los combatientes están ganando terreno en África central, existe la amenaza de que se extiendan a los estados del sur» del continente.
Nebenzia citó la difícil situación actual en Mozambique, donde grupos armados afiliados al Estado Islámico han amenazado los campos de gas del país para obtener una fuente de financiación.
La “yihad” –la guerra santa-, tanto la que lleva a cabo Al Qaeda como la que encabeza Estado Islámico, contiene un componente de dominación universal, el Califato Universal, y es un deseo para los yihadistas acercarse a Europa vía España.
NOTAS
[1] https://www.eldistrito.es/opinion/raad-salam-tierra-conquistada-por-el-islam/
[2] https://www.elfinanciero.com.mx/opinion/leon-opalin/el-islam-reconquista-europa
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