Bennett es bueno para Israel

Foto: El Medio

Bennett está orgulloso de ser israelí y de ser judío. Y, como no es progresista, los medios no le van a adular. Pero, en un tiempo en que Israel y los judíos están bajo constante ataque, un hombre que lleva un yarmulke, que sirvió en la unidad de elite Sayeret Matkal de las FDI (Fuerzas de Defensa de Israel) y se hizo millonario por si mismo, es un gran referente para los israelíes y los judíos.

Bennett sabe cómo funcionan las relaciones públicas y lo borda al hablar de las mejores cualidades de Israel, del que es un brillante portavoz. Como ha dicho, “Israel está protegiendo al mundo”.

Nacido de padres que emigraron a Israel desde EEUU, habla inglés a la perfección. Ha mostrado gran capacidad para defender y explicar la situación de seguridad de Israel en las redes internacionales, y lo seguirá haciendo como líder de Israel.

Bennett entiende de diplomacia, de seguridad, de relaciones públicas, pero es también un político rara avis porque conoce de primera mano el mundo de los negocios. En un tiempo en que la justicia social y las cuestiones económicas son de vital importancia para Israel, la suya es una bella historia de éxito. Como emprendedor que se hizo millonario por sí mismo, puede liderar con el ejemplo.

Con un líder como Naftalí Bennett, el Gobierno de Israel puede lucir como el de la Start-Up Nation del planeta. Bennett conoce tanto el mundo laico como el religioso, por lo que está en una posición única para servir de puente entre ambos.

Bennett entró en política para cambiar Israel, y ahora es el nuevo líder del país. Enhorabuena y que coseche grandes éxitos para el Estado de Israel.

© Versión original (en inglés): The Algemeiner
© Versión en español: Revista El Medio