Hotel de Lujo en Gaza. Facebook
Los líderes son millonarios y la causa es defendida desde los hoteles más caros de Doha mientras en la Franja de Gaza los terrenos más exclusivos quedan en manos de unos pocos. Vamos a correr el velo sobre un tema que va a enojar mucho a los fanáticos de la guerra perpetua: el dinero de Hamas.
Tratar sobre la corrupción y el desmanejo de los fondos que llegan a los territorios bajo control palestino llevaría para un tiempo muy largo, pero vamos a organizar un poco el tema: vamos a comenzar por Hamas, la Yihad Islámica Palestina y la Franja de Gaza, el laboratorio de todo lo que no puede ser nunca un estado palestino.
Otra aclaración previa que corresponde es desmentir eso de que la Franja de Gaza es una enorme villa miseria, lo correcto es hablar de un territorio que sufre lo propio gracias a que hace 18 años asaltó el poder una organización terrorista. Sin embargo, las bonanzas de Gaza existen en manos de Hamas.
En 2017 la revista Forbes anunció un ranking de las 10 organizaciones terroristas más ricas de todo el mundo y allí se encontraba, para sorpresa de muchos (increíblemente) Hamas ocupando el tercer lugar. El primero lo ocupó Hezbollah, la agrupación financiada por Irán y que se conforma como su guerra proxy más cercana. Es decir, mientras la UNRWA denunciaba que los palestinos vivían un estado de apartheid y eran objeto de las peores miserias, Hamas guardaba en 2017 más de 700 millones de dólares en sus cuentas bancarias, además de los costosos túneles, las bases de misiles y los jets privados.
Mientras aumentaba la presión mediática e internacional para enviar dinero a los palestinos, los líderes de Hamas estaban muy cómodos hablando de apartheid y ocupación desde las playas de Doha o los hoteles de Ankara y Estambul. Vamos con algo de historia reciente sobre Gaza.
El laboratorio de Hamas
En 2005 Israel se retiró de forma unilateral de la Franja de Gaza dejando así su control en manos de la Autoridad Palestina. Unos meses después, la cosa cambiaría para mal. Al ganar Hamas las elecciones la Gaza, el control quedaba entonces para quienes se oponían al manejo de la Autoridad Palestina y abría una lucha que hoy todavía aumenta: entre disparos, ejecuciones y redadas, la organización terrorista de Hamas se apoderó del territorio.
Es importante destacar también que los palestinos no tienen un liderazgo único, sino que entre todos están esperando el momento (que probablemente sea la muerte de Mahmoud Abbas que ya tiene 87 años) para sacarse los ojos. Aquí entra Hamas, la Yihad Palestina, AP, Fatah y otros clanes que actualmente se disputan poder en Gaza.
La Franja de Gaza, a escasísimos kilómetros del territorio israelí, quedaba así bajo el mando de una agrupación terrorista que tenía como su objetivo la destrucción y el aniquilamiento de los judíos y que creían en el terrorismo como la forma para conseguirlo.
En estos días donde los ataques en Jerusalén dejaron fatales saldos en víctimas mortales, en Gaza también se da la clásica repartija de dulces y fuegos artificiales para celebrar el asesinato de israelíes. Gaza es, lamentablemente, la mejor muestra de lo que sería un estado palestino. En estos 18 años que transcurrieron desde la retirada israelí, Hamas logró amasar enormes cantidades de recursos de distintas fuentes: la primera es la UNRWA, la curiosa y extravagante agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos junto su presión mediática.
UNRWA es parte del problema y no la solución
La agencia tiene algo bastante curioso: les da a los palestinos un favoritismo que no tiene ningún otro refugiado en el mundo. Aunque existan muchos en Siria, Ucrania o Venezuela, la ONU desde 1949 destinó una enorme cantidad de recursos para los interminables refugiados palestinos. Los ingresos que UNRWA declara provienen de fondos públicos y esto es un elemento muy importante para entender lo siguiente: todo lo que recauda la organización (que además emplea a los propios palestinos) termina en las arcas que controla Hamas, es decir, en la guerra contra Israel.
La falta de control y rendición de cuentas hace que esa ayuda humanitaria se destine no en la población palestina, sino en los túneles que Hamas tiene por todo Gaza, el material antisemita en las escuelas y en la base de cohetes que utiliza Hamas y Yihad para atacar a Israel.
También Hamas recauda impuestos de los gazatíes y recibe el financiamiento de sus dos socios foráneos más destacados como son Catar e Irán que asiste a los de Hamas aún siendo estos sunitas. ¿Sabrá UNRWA que mientras exprime fondos públicos Hamas tiene sus arcas llenas?
Veamos el caso de UNRWA España: recibe el 66% de sus ingresos de las administraciones públicas y con un total de ingresos en 2021 que casi llega a los 10.000.000 de euros destinados, entre otras cosas, a ayudas en efectivo. Hablar de la ocupación israelí en Gaza, aunque ya Israel no tenga nada que ver desde hace casi dos décadas, es parte del discurso palestino que viene inmediatamente acompañado por acusar al sionismo (aunque no sepan qué es el sionismo) de la pobreza en Gaza.
Los primeros señalamientos contra la corrupción de Hamas no salen de medios israelíes como algunos dirán, sino de los propios líderes de la Autoridad Palestina. Un ministro del gobierno de Ramala, Majdi Al-Saleh, acusó a Hamas de robo en la obra de infraestructura. De hecho han sido muchas veces los propios portavoces de Fatah que señalaron que dentro de Hamas había 1.700 millonarios en 2014. Resulta entonces que Gaza no es una cárcel a cielo abierto, sino un exclusivo resort solo disponible para Hamas y hoteles cinco estrellas.
¿Cuántas veces mostraron a los palestinos llorando porque fuerzas israelíes demolían sus casas y así buscaban argumentar sobre la ya desmentida existencia de un estado apartheid y de ocupación? Vamos a ver algo de las poco conocidas demoliciones de Hamas.
En Gaza, el poder territorial lo controla Hamas. Ellos de buenas a primeras buscan propiedades y buscan quedárselas porque consideran que son tierras del gobierno y que deben estar bajo su poder. Para eso, si ya había personas allí antes, los expulsan y demuelen sus casas. Este es el caso de Rafah, una de las ciudades de Gaza en donde la propiedad privada puede ser fácilmente desmantelada por Hamas en caso que se les ocurra decir que son tierras públicas y gubernamentales.
El desvío de las subvenciones omanís
Escándalos como estos están también presentes cuando alguno de los países islámicos promueve ayuda a Gaza: en 2018 algunos informes de prensa denunciaron que funcionarios de Hamas desviaron los fondos para construcción de viviendas provenientes del fondo de subvención que Omán había enviado. Estas denuncias apuntaron a Yousef Ibrahim y a la entrega de estas casas, supuestamente dirigidas para los palestinos necesitados, a personas cercanas al poder y muchas de ellas que frecuentan muy seguido los centros gubernamentales de Hamas. Pero esto no termina aquí.
Hay testimonios también que los palestinos de Gaza, bajo la promesa de recibir casas nuevas, son obligados a salir en cámara para denunciar la inexistente ocupación israelí y agradecer a quienes envían los fondos como Omán o Catar. Las cámaras se apagan y las casas nunca llegan.
Sin embargo, así como no existe tampoco la Franja de Gaza como una villa miseria, sí existe un buró de millonarios al servicio de las ayudas humanitarias y que personifican lo realmente rentable de la guerra: los líderes de Hamas son millonarios. Algunas fuentes del mundo árabe hablan de que los líderes de Hamas tendrían una fortuna que casi duplicaría a las cuentas de Hamas, es decir, unos 1.200 millones de dólares. Uno de los que mejor le ha ido con la causa palestina es Ismail Haniyeh, conocido como el propietario.
Los pobres líderes de Hamas
Nacido en un campo de refugiados del norte de Gaza, Haniyeh comenzó a aumentar sus arcas después de 2006 cuando adquirió el título de líder dentro de Hamas, puesto al que nunca había accedido y que los gazatíes por supuesto no reconocían. Medios egipcios informaron en 2010 que Haniyeh había pagado una módica suma de 4 millones de dólares por una parcela en Rimal, un exclusivo barrio frente a las playas de Gaza y un territorio inaccesible para más del 90% de los residentes.
El mismo año en que asaltaron el poder y expulsaron a la AP, hubo un poco claro incidente familiar cuando el hijo de Haniyeh fue detenido en la frontera egipcia con una suma de 35 millones de euros que habrían tenido origen iraní. Ismail inauguró así el recorrido de muchos de los líderes palestinos que han encontrado también la comodidad revolucionaria muy lejos de las causas que dicen defender. Años después, los Haniyeh (encabezados por Hazem, hijo de Ismail) dejaron la Franja para pasar a vivir en Turquía y Catar.
Como es Egipto quien también mantiene el bloqueo de Gaza, los nombres de quienes dejan Gaza deben ser aprobados también por el gobierno egipcio y esto guarda un sentido: Hamas, además de todo, tiene relación con los Hermanos Musulmanes (enfrentados a Egipto). Los Hermanos Musulmanes, nacidos en Egipto en 1928, lograron su apogeo en 2011 después de la caída de Mubarak y las revueltas árabes. Durante esos años, asociados a Hamas, el tráfico y el dinero entre Egipto y Gaza corrió muy rápido. Fueron años de cierta bonanza para Hamas.
Haniyeh ya no vive en la Franja de Gaza desde 2019, sino que reside en Turquía y por estos días se corrió con fuerza el rumor de que su hijo ya tendría la nacionalidad turca, algo que desconcierta a quienes hablan de la causa palestina como algo indeclinable.
Otro que siguió los pasos de Haniyeh fue Khalil Alahia quien era el encargado de las relaciones entre Hamas y otros países islámicos. Tanto Haniyeh como otros líderes de Hamas se habrían enriquecido por el cobro clandestino que hacían del tráfico dentro de los túneles de Gaza. Estos túneles, además de proveer operatividad para los ataques contra Israel, son utilizados con frecuencia para el traslado clandestino y el tráfico: armas, mercancías y también combustible sobre el cual distintos liderazgos de Hamas retendrían hasta un 30% del tráfico.
Medios del Líbano informaron sobre esto en 2021 cuando denunciaron la lujosa vida de los líderes de Hamas y también de la Yihad Islámica Palestina que estaba calificada como una de las 10 con más dinero según Forbes. Con la Yihad pasó algo bastante similar. Sheikh Nafz Azzam que se mudó al Líbano y Muhammad Alhindi que se mudó a Turquía, al igual que Haniyeh, Hay otro nombre reconocido por vivir de la rentable causa palestina en el extranjero con una fortuna que superaría los 5 mil millones de dólares: Khaled Mashal.
La historia de la familia Mashal es uno de los casos más frecuentes en la corruptela de Hamas: lujosas noches en los hoteles más caros de Doha, Catar. La buena vida de los Mashal empezó en 2011 en Damasco, Siria, unos meses antes de que estallara la guerra y con una boda para su hija. Para ese momento, se habló que Khaled Mashal había pagado poco más de 2 millones de dólares y que había conseguido tasas de ocupación en lujos hoteles de casi el 100%. Esto se interrumpió cuando las relaciones entre Hamas y Al Assad se debilitaron.
Al explotar la guerra en Siria, enfrentando a los rebeldes con el gobierno de Al Assad, los activos financieros e inmobiliarios de Hamas en Damasco (500 millones de dólares) estaban en peligro. De a poco, toda la buena vida de Hamas se fue pasando a Doha, la capital catarí. En 2012, con una fortuna que ya superaba los 2,6 millones de dólares repartidos entre bancos de Catar y Egipto, también repartida entre su familia y algunas manos cercanas como Moussa Abu Marzook quien era el supervisor de las cuentas fuera de Gaza, especialmente Siria.
En Qatar hubo un episodio que tensionó a Mashal con el resto de los liderazgos de Hamas: cuando se perdieron, por arte de magia, 12 millones de dólares que aparentemente habrían estado en una caja de seguridad.
En 2012, unos años antes de la escalada entre Hamas e Israel, el Hotel Sheraton Doha fue el lugar que eligió Mashal para unas vacaciones de dos semanas costando más de 2 millones de riales cataríes y con algunas dudas sobre quién fue el que pagó la factura.
Hace mucho tiempo que corresponde exigirle a Hamas la factura por todo el dinero que ingresa a la Franja de Gaza, que rindan cuentas por lo que hacen y no hacen también con fondos públicos que pagan ni más ni menos que ciudadanos de todos los países adheridos a UNRWA.
Si apelan a la solución de los dos estados, ¿Por qué seguimos con eso de que sean los organismos internacionales y la ayuda humanitaria la que subsidie la buena vida de Hamas, sus cohetes y los atentados que ocurren contra los civiles israelíes? Esa creo que es la pregunta.
Si los líderes de Hamas deciden condenar al pueblo y sostener una causa ya indiferente en el mundo árabe es justamente por la rentabilidad que esa causa genera: ¿quién de ellos podría estar molesto con una causa que arroja millones de dólares sin control alguno?
Parte 1 El verdadero bloqueo de Gaza
https://porisrael.org/2023/01/16/el-verdadero-bloqueo-en-gaza/
Los «palestinos» de Gaza, son dueños de su própio destino, aquel mismo que se granjearon cuando decidieron que Hamas les representará, a nadie pues mas que a ellos mismo pueden imputar ese error, ni achacar la falta de espectativas que asédia principalmente a los mas jóvenes de entre su poblacion …
Hamas es una organizacion terrorista como quiere que se mire, y no debe como tal ser tenido por interlocutor o mediador de conservasion alguna que procure un acercamiento con vistas a pacificar la Fránja …
pues al igual que sucede con los «hermanos musulmanes» derrocados en Egipto, o Hizbulah en el Líbano, su ideario consiste a debilitar Israel, y sometérlo a una guerra sin ejército conformada por «milicianos» adiestrados para cometer por doquier, actos de terrorismo indiscriminado …es ademas de todo ello, una organizacion corrupta, que substrae fondos destinados a ayudar a los mas necesitados y a crear infrastructuras de todo tipo, que presten servicio a la poblacion civil, entre ellas, colégios, y hospitales …