Mientras logra evacuar gran parte de Rafah, Israel reconfirma las metas de la guerra

El jefe del ejército israelí en Gaza (Foto: Dover Tzahal)

En medio de discusiones y polémicas tanto externas como internas, en el terreno continúa la guerra entre Israel y Hamas desatada por la masacre terrorista del 7 de octubre en el sur de Israel. Los dos frentes principales en la Franja de Gaza son Jebália en el norte, donde el ejército sigue encontrando gran cantidad de armas , cohetes e infraestructuras terroristas , y Rafiaj (Rafah) al sur. Allí se amplía el operativo militar, habiendo evacuado ya dicha área por lo menos 900.000 civiles palestinos, que se trasladan – previo aviso de Israel- a la zona humanitaria equipada por Israel con tiendas de campaña, alimentos y servicio médico básico.

Cabe señalar que esto debe ser visto como un gran logro israelí,haber conseguido evacuar a tal cantidad de palestinos, prácticamente sin bajas civiles, desde el 6 de mayo , frente a las oscuras advertencias de Estados Unidos y hasta a las acusaciones anticipadas sobre la enorme cantidad de muertes que habría si el ejército israelí operaba en Rafah.

El control de parte de Rafah es considerado de gran valor estratégico tanto por el hecho que allí hay cuatro batallones de Hamas como porque se estima que probablemente en esa zona esté gran parte de los secuestrados israelíes.

Uno de los hallazgos más importantes de Israel en Rafah  son los aproximadamente 700 túneles terroristas, de los cuales por lo menos 50 cruzan al territorio egipcio vecino. Este es un desafío especialmente importante ya que por allí entran armas que forman la infraestructura militar de Hamas. Israel ya está abocado a la destrucción de los túneles.

“Estamos en una guerra que desde el comienzo dijimos sería prolongada”, declaró este martes el Teniente General Herzi Halevi , Comandante en Jefe de las Fuerzas de Defensa de Israel, al visitar unidades en la Franja de Gaza. “Los terroristas se han atrincherado durante años y esto no puede ser desmantelado en una semana ni en un mes. Y nuestra misión es matar la mayor cantidad posible de terroristas y destruir su infraestructura”.

Y la gran esperanza es que esta presión militar sirva al otro objetivo que se considera prioritario: recuperar a los secuestrados que están en manos de Hamas desde el 7 de octubre.

“Queremos que esta presión nos ayude a traer de vuelta a los rehenes con vida”, dijo Halevi. “Y estamos dispuestos a llevar a cabo operativos peligrosos y complicados también para traer los cuerpos de los secuestrados que ya no están con vida a fin de que puedan recibir sepultura en Israel”.

Halevi, no por primera vez, destacó la importancia central que tiene la recuperación de los secuestrados tanto para las Fuerzas de Defensa de Israel como para el país en general . En la práctica está claro que hay también polémicas en relación a las protestas de las familias de los secuestrados, a las que algunos diputados de la coalición acusaron  de fortalecer a Hamas con sus críticas públicas al gobierno de Israel.