Foto: La Moncloa
Sánchez hace una exhibición de narcisismo, otra vez
Su declaración (se puede leer aquí) es un completo disparate, en el que empezó haciendo una exhibición de su ya conocido narcisismo, hablando de «la transcendencia nacional y también internacional de la decisión que hoy vamos a adoptar». La trascendencia de este anuncio consiste en alinear a España con los aliados de los terroristas de Hamás, pero más allá de eso, este anuncio no tendrá ninguna consecuencia real en Oriente Medio.
Haga lo que haga Sánchez, Israel seguirá con sus operaciones para liquidar a Hamás, que es la única forma que tiene de asegurar la seguridad de los ciudadanos israelíes, y la llamada «autoridad nacional palestina» seguirá siendo un gobierno dictatorial que no controla todo el territorio que se atribuye (nunca tuvo ningún control sobre Gaza, en manos de Hamás, y no ha convocado elecciones desde 2006).
Dice querer la paz pero sólo recibe elogios de los enemigos de Israel
Sánchez también ha afirmado que busca «contribuir a que israelíes y palestinos alcancen la paz», una afirmación sin ninguna credibilidad (como todo lo que dice y hace Sánchez, el gobernante más mentiroso que ha tenido España), sobre todo si tenemos en cuenta que es un anuncio unilateral, hecho sin contar con una de las partes (Israel), y contando exclusivamente con elogios de los enemigos de Israel, incluido Hamás, una escoria que no quiere la paz: quiere que Israel desaparezca.
Lo más indignante es que si Israel no hubiese sufrido el terrible ataque terrorista de Hamás el 7 de octubre, seguramente Sánchez no habría hecho este anuncio. La declaración de Sánchez es un mensaje a Israel diciéndole que no puede defenderse del peor ataque que ha sufrido desde 1973 y de la peor masacre sufrida por el pueblo judío desde el Holocausto. Es como decirle a Ucrania que no debería responder a la agresión rusa, o que la paz se alcanzará si se pliega a las exigencias de quienes han provocado la guerra, que no han sido los ucranianos.
Sánchez habla de una Palestina imaginaria y le exige un corredor a Israel
A continuación, Sánchez ha detallado una Palestina que no ha existido nunca: «El Estado de Palestina debe ser, en primer lugar, viable; con Cisjordania y Gaza conectadas por un corredor y con Jerusalén Este como su capital. Y unificadas bajo el gobierno legítimo de la Autoridad Nacional Palestina». Así pues, Sánchez no sólo dice cómo ha de ser ese imaginario estado palestino sino que además le impone un corredor a Israel sobre su territorio: ¿con qué derecho? ¿Qué será lo próximo, imponer a polacos y lituanos un corredor entre Kaliningrado y Rusia? Sánchez actúa como si fuese un niño de 12 años jugando al Risk.
Sánchez se remite a las fronteras de 1967: no había ninguna Palestina entonces
Lo más divertido llega en este punto de la declaración: «no reconoceremos cambios en las líneas fronterizas de 1967 que no sean los acordados por las partes». No he podido evitar reírme al escuchar esta exhibición de ignorancia histórica. Antes de la Guerra de los Seis Días de 1967 no había ningún estado palestino. Existía, por un lado, el Estado de Israel, y por el otro estaban Jordania y Egipto. Gaza estaba ocupada por Egipto y Judea y Samaria (la llamada Cisjordania) eran de Jordania.
Si alguien no me cree, sólo tiene que escuchar a Mosab Hassan Yousef, hijo del fundador de Hamás, entrevistado hace un mes por Piers Morgan. En el minuto 25:33 del vídeo (lo he insertado para que empiece a reproducirse en ese punto) dice lo siguiente sobre las fronteras de 1967:
«Cisjordania estaba bajo el control de Jordania, y Gaza estaba bajo el control de Egipto, eran territorios de Egipto y Jordania, no era una Palestina. Hoy Israel tiene paz con Egipto y con Jordania, así que cuando cuando los árabes lanzaron una guerra y perdieron la guerra en 1967, Israel capturó algo de territorio, éstas son las consecuencias de la guerra y los árabes no quieren aceptar las consecuencias de la derrota. En lugar de decir que fuimos derrotados e Israel ganó, ahora ellos jugaron la carta de víctima, han estado jugando la carta de víctima durante 70 años».
https://www.youtube.com/watch?v=xDTrsysXWt8
¿Lo próximo será reconocer el Estado de Mordor?
Así pues, es lógico preguntarse: ¿Sánchez sugiere que Israel otorgue el control de Gaza a Egipto y el control de Judea y Samaria a Jordania? Porque así estaba la cosa hasta que los árabes fueron derrotados en 1967 en uno de sus intentos de borrar a Israel del mapa. Afirmar que Palestina tenía fronteras en 1967 es un bulo, ya que entonces no había ningún país con ese nombre. Teniendo en cuenta esto, ¿Qué será lo próximo que haga Sánchez, reconocer el Estado de Mordor?
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Foto: La Moncloa.
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