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| lunes diciembre 23, 2024

10 hechos sobre los hutíes que todos deben conocer

Lo que debes saber sobre este grupo terrorista radical.


¿Quiénes son los hutíes y por qué interrumpen la navegación internacional? ¿Por qué atacan a Israel? ¿Cuáles son sus nexos con Hamás?

Aquí hay 10 datos claves sobre los hutíes, incluyendo su historia, su ideología y lo que quieren:

1. Los hutíes actuales son una rama fanática del islam

Los hutíes son una tribu de Yemen de la cual surge gran parte del movimiento hutí actual y por cuyo nombre se lo conoce. El nombre oficial del movimiento hutí es Ansar Allah (los partidarios de Alá).

El islam tiene dos grandes ramas; el islam sunita, que cuenta con mayor cantidad de adherentes en el mundo, incluyendo a Yemen, y el islam chiita. Los hutíes son parte de la rama chiita, pero no son los chiitas convencionales, sino zaidíes, es decir que reverencian a Zayd bin Ali, un líder musulmán del siglo VIII, un mártir admirado que representa al gobierno islámico puro. Los hutíes, como otros zaidíes, tradicionalmente consideran la corrupción política como una prioridad clave.

Los hutíes llevan cientos de años compitiendo en la compleja lucha de poder de Yemen. Entre 1918 y 1962, los hutíes gobernaron el norte de Yemen antes de perder el poder con la revolución sunita respaldada por Egipto. Ellos lograron mayor cohesión y el apodo de «hutíes» en la década de 1990, cuando fueron liderados por el fanático y proiraní Hussein Al Hutí. Él trató de construir un movimiento político siguiendo tanto «religiosa como ideológicamente» el modelo de Irán. Siendo un protegido de los teócratas chiitas de Irán, Al Hutí se opuso amargamente al líder de Yemen, Alí Abdula Salé. Después de que Al Hutí fuera asesinado por orden de Salé en el 2004, el grupo hutí actual dio a su movimiento el nombre de «hutíes».

2. Los hutíes están comprometidos a luchar contra los judíos, los Estados Unidos e Israel

En el 2003, tras la invasión de los Estados Unidos a Irak, los hutíes se volvieorn todavía más radicales. Ellos comenzaron a compararse con Hezbolá, un ejército aliado de Irán en el Líbano, y construyeron sus arsenales militares con apoyo de Irán. También comenzaron a llamarse a sí mismos Ansar Allah (los partidarios de Dios), considerándose a sí mismos un ejército santo, designado por la divinidad.

El grito de batalla de los hutíes es: «Dios es grande. Muerte a los Estados Unidos. Muerte a Israel. Maldición a los judíos y victoria para el islam».

También adoptaron un nuevo eslogan: «Dios es grande. Muerte a los Estados Unidos. Muerte a Israel. Maldición a los judíos y victoria para el islam». Esa declaración sigue siendo el grito de batalla y la base fundamental de los hutíes en la actualidad.

El 17 de enero del 2024, los Estados Unidos volvieron a colocar a Ansar Allah en la lista de terrorismo del país, después de una pausa de dos años.

3. Hoy en día, los hutíes gobiernan gran parte de Yemen

Los hutíes, además de otras fuerzas de la oposición en Yemen, atacaron el gobierno de Sana en el 2011. Esto fue parte del embriagador movimiento de la Primavera Árabe. Durante tres largos años, las fuerzas hutíes lucharon contra el ejército del gobierno de Sana. Fue un período complejo: durante esta época de agitación y violencia, los hutíes a veces lucharon solos, como parte de una amplia alianza rebelde, y también negociaron y rompieron acuerdos secretos con Ali Abdula Saleh, su antiguo enemigo.

Un luchador, leal a los rebeldes hutíes de Yemen, monta guardia durante una protesta después de que las fuerzas de Estados Unidos y Gran Bretaña atacaran la capital de Sanaa, bajo control hutí, el 12 de enero del 2024.

En el 2015, los hutíes, como parte de una coalición de fuerzas antigubernamentales, capturaron la ciudad capital de Yemen, Sanaa. Los combatientes hutíes rápidamente capturaron Al Hodeidah, la cuarta ciudad de Yemen y un importante puerto al Mar Rojo. Los combatientes hutíes comenzaron a ir hacia la ciudad de Aden, considerada la capital de Yemen del sur, y un importante puerto sobre el Océano Indico. En las ciudades que ellos controlaban, los hutíes de inmediato publicitaron su amistad con Irán. Abrieron vuelos director entre Sanaa y Teherán, la capital de Irán, que prometió públicamente abastecer a su nuevo aliado, Yemen, con petróleo subsidiado.

Al enfrentar en Yemen a un estado aliado con Irán, Arabia Saudita, que comparte con Yemen una frontera de 1.307 kilómetros, reunió a una coalición de países para luchar contras los hutíes y otros rebeldes, y restaurar el poder al gobierno anterior. Estados Unidos, Gran Bretaña, los Emiratos Árabes Unidos y Bahréin apoyaron la intervención de Arabia Saudita en Yemen, para instalar y apuntalar a Abdrabbuh Mansour Hadi, el previo vicepresidente de Yemen, y un musulmán sunita. La amarga guerra civil de los últimos nueve años ha causado un sufrimiento incalculable y hasta ahora no ha logrado desalojar a las fuerzas hutíes.

Una tregua en el 2022 consolidó la postura de los hutíes. Los hutíes continúan tratando de controlar a Sanaa, la capital de Yemen, así como grandes porciones del país.

4. La Guerra Civil en Yemen fue un desastre humanitario

Antes de que la ONU declarara a Gaza el «peor» desastre humanitario, esa gráfica denominación se aplicaba de forma rutinaria a Yemen prácticamente bajo el dominio de los hutíes. Más de 370.000 yemenitas murieron entre el 2015 y 2022, un número que probablemente hoy es mucho mayor. Los hutíes se abrieron camino en el Mar Rojo, evitando la pesca y robando ayuda alimentaria. El sistema financiero del país ha colapsado. Un informe de la ONU del 2021 declara que Yemen es «la peor crisis humanitaria del mundo» e informa que «casi el 80% o más de 24 millones de sus habitantes necesitan ayuda humanitaria y protección, y más de 13 millones corren peligro de morir de hambre. Se estima que más de la mitad de los yemenitas están en riesgo de inanición».

Desde el 2015, Irán trató de enviar armas y otros bienes a Yemen. En respuesta, Arabia Saudita (a veces ayudada por los Estados Unidos) mantuvo un despiadado bloqueo naval. Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos llevaron a cabo más de 25.000 ataques aéreos en áreas hutíes, matando a más de 19.000 civiles. En el 2021 y 2022, los combatientes hutíes llevaron a cabo ataques aéreos sobre objetivos sauditas. Durante casi una década, las agencias de ayuda tuvieron dificultades para llevar a Yemen alimentos que pueden salvar vidas.

En diciembre del 2023, el Programa Mundial de Alimentos de la ONU anunció que suspendía sus operaciones en Yemen debido a la incapacidad de los hutíes y de otros grupos de garantizar que los alimentos sean distribuidos a quienes los necesitan.

5. Los hutíes torturan y esclavizan

Un informe de las Naciones Unidas del 2018 pintó una imagen grave de lo que era la vida bajo el gobierno hutí, así como bajo el gobierno de otras facciones que compiten por el poder en Yemen. “El gobierno de Yemen, los Emiratos Árabes Unidos y las fuerzas de Huti-Saleh han participado en arrestos y detenciones arbitrarias, hicieron desaparecer personas y torturaron. Los hutíes han ejecutado sumariamente individuos, detuvieron personas únicamente por razones políticas o económicas y destruyeron sistemáticamente los hogares de aquellos que percibían como sus enemigos. Los hutíes también obstruyen rutinariamente el acceso y la distribución de la ayuda humanitaria». (Cita de la carta del 26 de enero de 2018, del Panel de Expertos en Yemen bajo ordena de la Resolución 2342 del Consejo de Seguridad [2017], dirigida al presidente del Consejo de Seguridad).

El Departamento de Estado de los Estados Unidos informó horrores similares en un informe del 2022, citando a una organización yemení que documentó 17.638 casos de tortura en las cárceles hutíes entre 2015 y 2021, «incluido el maltrato de 587 niños, 150 mujeres» y 178 prisioneros, incluidos 10 niños, que murieron al ser torturados por los hutíes

El Departamento de Estado también estima que más del 3% de la población de Yemen en este momento está esclavizada, y que si bien en Yemen se abolió la esclavitud hace 60 años, algunas formas de esclavitud siguen siendo legales en el país. Los hutíes esclavizan de varias formas, especialmente obligando a luchar a los hombres de la minoría muhamasheen de piel oscura, y matando a quienes se niegan a hacerlo.

6. En las áreas hutíes no existen los derechos de las mujeres

Los hutíes, ardientes islamistas, restringen los derechos de las mujeres todavía más que sus patrocinadores en Irán. Las mujeres en las áreas gobernadas por los hutíes tienen prohibido trabajar, no pueden usar métodos anticonceptivos, no pueden salir a la calle con la cabeza descubierta o usando maquillaje, y al viajar deben tener un escolta masculino. Las mujeres pueden entrar a un restaurante después de presentar un contrato válido de matrimonio.

7. Los hutíes persiguieron a los judíos de Yemen

En 1949, a causa del intenso antisemitismo, la mayor parte de la comunidad judía de aproximadamente 50.000 personas de Yemen fue trasladada en avión al nuevo estado de Israel, en una ambiciosa misión llamada «Operación alfombra mágica«. Los cientos de judíos que quedaron allí debieron enfrentar el antisemitismo cada vez mayor de los grupos yemeníes, incluyendo a los hutíes.

Al hacerse cargo del territorio, los hutíes acosaron a los judíos y los obligaron a dejar sus hogares y comunidades, donde habían vivido durante generaciones. (La comunidad judía de Yemen remonta sus orígenes a los tiempos bíblicos.) Un rabino yemenita llamado Yahya Yusif Mosa habló con el «Jerusalem Post» en el 2013 desde un complejo en Sanaa, donde él y otros judíos yemenitas fueron confinados después de que los combatientes hutíes los expulsaran de la ciudad yemenita de Raida. En el 2011, los hutíes le dijeron a un líder de los judíos yemenitas que todos los judíos que quedaban en Yemen tendrían que convertirse al islam o huir del país.

Prácticamente hasta el último judío yemenita escuchó a los terroristas hutíes y huyó. Trágicamente, en este momento hay un judío como rehén y siendo torturado por los hutíes en Yemen. Cuando los judíos huyeron en el 2016, Levi Marhabi ayudó a una familia a sacar un Séfer Torá del país. Los hutíes lo arrestaron por este «crimen» y siguen manteniéndolo en la cárcel. La Comisión de Libertad Religiosa Internacional de los Estados Unidos señala que “Marhabi vive en condiciones de prisión inhumanas y su salud continúa deteriorándose. Según los informes, sufre de problemas de riñón y pulmón y ha perdido todos sus dientes por ser torturado repetidamente «.

8. Los hutíes están bien financiados

Irán sigue siendo la principal fuente de financiación de los hutíes. En diciembre del 2023, Estados Unidos anunció nuevas sanciones a 13 individuos y empresas que ellos estiman que ayudan a Irán a canalizar «decenas de millones» de dólares a los hutíes cada año. El Departamento del Tesoro de los Estados Unidos descubrió que el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, una rama del ejército de Irán, controla un vasto imperio comercial en todo el mundo, incluso en Turquía y el Caribe.

Un informe de la ONU del 2023 revela que además de las donaciones iraníes, los hutíes se enriquecen de una vasta red de negocios en Yemen y en todo el mundo. «Los hutíes continúan controlando las fuentes de ingresos legales e ilegales», concluyó la ONU.

Los hutíes también «venden petróleo en el mercado negro y recolectan tarifas ilegales de tales ventas». El 11 de enero del 2024, las fuerzas navales de los Estados Unidos vieron un barco que navegaba cerca de Somalia con destino a Yemen cercano, que no llevaba una bandera nacional, en violación de la ley marítima. Los marineros estadounidenses abordaron el barco y encontraron piezas de misiles balísticos fabricadas en Irán. En el curso de la operación se perdieron en el mar dos soldados SEAL de la Marina de los Estados Unidos, bajas de la lucha para evitar que Irán arme a los hutíes violando las sanciones internacionales.

9. Los hutíes están motivados por mejorar su postura, no porque simpaticen con Gaza

En gran parte del Occidente se ha vuelto axiomático que los hutíes están motivados a atacar los buques comerciales en el Mar Rojo por el deseo de mostrar solidaridad con los civiles de Gaza atrapados en la lucha entre Hamás e Israel. Pero en verdad, los hutíes, una secta chiíta que tiene poco en común con los musulmanes sunitas de Gaza, están motivados por sus propias preocupaciones domésticas.

Dentro de Yemen, los hutíes se volvieron cada vez menos populares. Bombardear y atacar a los británicos, estadounidenses y otros barcos, y declarar que lo hacen para demostrar su odio hacia Israel, les ha dado a los hutíes un gran impulso en Yemen y en todo el mundo.

El observador de políticas de Medio Oriente Nicholas Brumfield señala que “los hutíes enfrentan desafíos reales con el público yemenita. Cada vez más totalitarios, incapaces o no dispuestos a pagar los salarios, y vistos por muchos como intentando establecer una teocracia, los hutíes enfrentaban una de sus mayores crisis políticas de la historia en los meses previos al 7 de octubre, con protestas populares para obligar al grupo a retirarse e intentar una ‘restructuración radical’ del estado yemenita «.

El vicioso ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023 les dio a los hutíes una nueva y potente herramienta de reclutamiento. «Los hutíes han reclutado una gran cantidad de combatientes con la promesa de que lucharían en Palestina, sólo para enviar a esos combatientes a los frentes que enfrenta el gobierno yemenita», señala Brumfield. «Esta acumulación de fuerzas reciente ha sido suficientemente significativa como para que el gobierno yemenita declarara recientemente que cree que los hutíes se están preparando para una ofensiva a gran escala en la ciudad de Marib, sobre la cual existe una larga disputa». Los ataques hutíes contra los barcos internacionales no han hecho nada para ayudar a los habitantes de Gaza. Los hutíes simplemente se aprovechan cínicamente la guerra en Gaza para fortalecerse.

10. Los hutíes son populares

A medida que su prestigio crece en Yemen, los hutíes también están siendo aceptados en todo el mundo, incluso en Occidente, como luchadores por la libertad. En el último tiempo, los manifestantes en Gran Bretaña, Canadá y Estados Unidos han declarado su apoyo al movimiento hutí.

Es imperativo que todos nos pongamos de pie y señalemos la verdad: los hutíes no son luchadores por la libertad. No son nobles, y no son nuestros amigos o aliados de ninguna manera. A medida que Irán extiende su influencia por todo el Medio Oriente, financiando ejércitos genocidas como Hezbolá, Hutíes y Hamás, es crucial informarnos sobre estas organizaciones venales y trabajar para asegurar que sus complejas historias y agendas se den a conocer.

 
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