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| domingo octubre 6, 2024

Así se convirtió Hezbolá en la fuerza más poderosa de Líbano

Lo explica el experto en temática libanesa Jacques Neria


Es importante recalcar que esta entrevista fue realizada unos días antes de la eliminación de Hassan Nasrallah por parte de Israel. Dado que el punto central de la conversación era entender cómo Hezbolá llegó a ser la fuerza más poderosa de Líbano, el tema no ha perdido ninguna relevancia. Esto, además del hecho que la muerte de Nasrallah y los fuertes ataques de Israel que han debilitado seriamente a la organización terrorista, no han eliminado aún a Hezbolá. No hay punto de comparación entre lo que era hace dos semanas y media y lo que es hoy, pero nos parece importante comprender cuál fue la evolución de la organización.

El Coronel (ret) Jacques Neria, investigador en el Centro de Jerusalem para Asuntos Exteriores y Seguridad y en su momento asesor político del entonces Primer Ministro Itzjak Rabin, es experto en el tema de Líbano. Neria nos comentó la sensación de orgullo que le había inspirado el ataque de los beepers explosivos del 17 de setiembre que se atribuyó a Israel, por el alto nivel de Inteligencia y tecnología que logra desplegar también en la guerra contra el terrorismo.  Ese operativo neutralizó el sistema de comunicaciones de Hezbolá. Y le hizo recordar a Neria otra situación relacionada a las comunicaciones, que fue clave en el proceso que llevó a Hezbolá a ser la fuerza más fuerte en Líbano.

Coronel Jacques Neria

“En el 2008, el entonces Primer Ministro de Líbano Fuad Siniora trató de impedir que Hezbolá instale un sistema de comunicaciones independiente. Hezbolá irrumpió entonces a toda la capital, subió al monte del Líbano y conquistó el palacio presidencial. Fueron tres días que cambiaron la realidad libanesa”, recuerda Jacques Neria.

 

Los chiitas en Líbano y sus luchas de poder

P: Recordemos  cómo fue el proceso que llevó  a que Hezbolá se convierta en la fuerza más fuerte de Líbano, controlando el país.

R: Hay que entender ante todo que la población chiita de Líbano tiene desde hace 500 años vínculos con los chiitas en Irán e Irak, o sea que la base no nació ayer. La comunidad chiita siempre estuvo en los niveles socio-económicos más bajos de Líbano, en general en los trabajos más simples, sea cargando los cestos a la espalda en los mercados, barriendo las calles, dominados en una estructura feudal durante muchos años. Los cristianos y los musulmanes chiitas se repartieron entre sí el poder y les dejaron migajas a los chiitas. El cargo principal que recibieron con el reparto entre las comunidades, fue la presidencia del Parlamento.

P: La Presidencia del estado libanés era para los maronitas y el cargo de Primer Ministro para los musulmanes sunitas.

R: Así es. En 1974 llegó a Líbano un clérigo chiita iraní llamado Musa Sadr que logró crear la organización Amal, la cual llevó a un despertar y renacimiento de los chiitas en Líbano. Eso condujo a que parte de los chiitas se convirtieron en aliados de la OLP lo cual se vio claramente en la guerra civil libanesa. Después de la revolución islámica en Irán trató de controlar Amal para quitar del medio a los opositores al régimen iraní pero Amal era una organización libanesa registrada en el padrón de partidos políticos de Líbano como tal y no quería esa intervención extranjera. En Irán decidieron pues crear una organización chiita que desafíe a Amal y esa fue Hezbolá.

 

P: Hezbolá fue entonces una creación absoluta de Irán.

R: Exacto. Al principio no estaba muy claro qué era esa organización. Había chiitas que eran miembros tanto de Amal como de Hezbolá pero gradualmente los iraníes fueron construyendo a través de clérigos chiitas locales un ethos libanés. Lo hicieron a través de dinero, no en efectivo sino a través de la prestación de servicios en hospitales y clínicas, de escuelas, campamentos de verano y mucho más.  El dinero iraní hizo lo suyo. A ello se agregaron los primeros ataques suicidas que lanzaron contra las tropas de Estados Unidos, Francia e Israel que estaban en Líbano, que los presentaron como fuertes y exitosos. Muchos quisieron sumarse al “éxito”. La presencia israelí en Líbano en aquel entonces, producto de la guerra contra la OLP que atacaba el norte de Israel con katyushas desde Líbano, le sirvió a Hezbolá como entrenamiento. Recibieron cada vez más equipos y armas y de a poco Hezbolá se fortaleció considerablemente y se convirtió claramente en un socio estratégico de la OLP de Yasser Arafat. Cuando Arafat abandonó Beirut en 1982, le entregó las llaves de sus depósitos de armas a Imad Murnía, el máximo jefe de operaciones de Hezbolá.

 

P: ¿Y qué pasó con la rivalidad entre Amal y Hezbolá? ¿Cómo era la situación en el terreno?

R: Entre 1986 y 1989 hubo literalmente una guerra entre ambas organizaciones por la supremacía entre los chiitas de Líbano. Recuerdo que cuando nosotros negociamos para tratar de recuperar al copiloto Ron Arad que había caído en Líbano y había sido capturado originalmente por Amal, uno de los pedidos de Amal era que les demos armas para combatir a Hezbolá . Como sabemos, la presión de Hezbolá llevó a la retirada israelí de la franja de seguridad  en el sur del Líbano en mayo del 2000. Y en el 2006 Hezbolá lanzó la guerra contra Israel en la que siguió atacando durante más de 30 días, por lo cual se convirtió en campeón del mundo árabe que veía que desde Saladino nadie se había “enfrentado a un invasor Cruzado”, que es como ellos percibían el tema.

P: Recordemos que Israel conquistó el sur libanés a raíz de los ataques de la OLP y la gran polémica fue su permanencia en la franja de seguridad concebida para alejar los cohetes de la frontera, pero convertida finalmente en escenario de muerte de numerosos soldados israelíes, ya no víctimas de la OLP que se había tenido que ir de allí sino de Hezbolá.

R: Así es.

 

Dinero y armas de Irán. Gran poderío militar.

P: En cuanto a la creación iraní de Hezbolá, usted mencionó el dinero  que compró influencias. ¿Pero desde el comienzo estuvo también la dimensión militar?

R: Por supuesto. Campamentos militares, entrenamiento de Hezbolá por parte de las Guardias Revolucionarias iraníes. En realidad, es interesante recordar que fue precisamente por esos entrenamientos que todos se enteraron recién en 1985 que existía Hezbolá. Hubo un accidente en un entrenamiento en el que murieron varios jóvenes. Tuvieron que notificar a las familias y fue recién entonces que se reveló el secreto, que existía una organización llamada Hezbolá. Al principio clérigos chiitas en Líbano se oponían, preguntándose desde cuándo Alá tiene un partido, ya que ese es el sentido del nombre de la organización.

P: Claro, hizb es partido y Alá, Dios.

R: Exacto. Evidentemente, ganaron los iraníes y el nombre quedó.

P: Usted mencionó la guerra del 2006 contra Israel . Fue clave en la historia de Hezbolá en Líbano.

R: Sin duda ninguna.Se vio a Hezbolá como quien logró enfrentarse a Israel. Claro que después de la guerra Nasrallah salió del bunker y dijo que si hubiera sabido cuál sería la reacción de Israel no habría empezado la guerra.

P: Es que, recordemos, él atacó masivamente el norte con cohetes pero eso era sólo una forma de esconder lo central para él, el ataque a una patrulla que recorría el lado israelí de la frontera y el secuestro de dos soldados que volvieron dos años después en ataúdes.

R: Así es. Pero lo que cuenta es que sistemáticamente fue construyendo un ejército que llegó a tener no menos de 100.000 miembros. Dividió a Líbano en cinco regiones, en base a una estrategia de personal local. O sea, los miembros de Hezbolá en el sur libanés, por dar un ejemplo, viven allí. El miembro de Hezbolá recibe la indicación de salir a un operativo, sale y cuando vuelve a su casa se quita el uniforme y sigue viviendo como una persona normal en su país, en su aldea.

P: Aunque en la práctica está sirviendo en una organización que responde a la agenda de Irán. Es una agenda extranjera, no libanesa.

R: Por supuesto. Claro que Hezbolá también construyó unidades élites especiales como la de los drones, defensa anti aérea, la fuerza marítima, todo tipo de unidades de los distintos tipos de misiles y cohetes. Y siempre entendió cuáles eran sus fortalezas y sus debilidades, como por ejemplo el hecho que no tiene aviones, no tiene Fuerza Aérea ni tampoco blindados. Pero desarrolló contra los blindados el uso de los cohetes Kornet. Y por supuesto puso énfasis en los misiles.

P: Esa siempre fue su arma principal.

R: En el 2006 se estimaba que tenía unos 10.000 cohetes. Desde el 2011, en lo que se conoce como la lucha entre las guerras, Israel intentó repetidamente impedir que Hezbolá se fortalezca, que lleguen a sus manos las armas que manda Irán.

 

Israel no intervino lo suficiente

P: No sabemos cuánto más habría tenido si no fuera por esos ataques de Israel a los cargamentos de armas, pero seguro que lejos estuvo Israel de lograrlo todo.

R: Es evidente. Es que hasta ahora la estimación era de casi 200.000 cohetes  de distintos tipos y misiles. Logramos frenar parte pero no impedir su fortalecimiento.

P: Tengo claro que no se puede dar porcentajes exactos, pero me pregunto en qué medida ese enorme fortalecimiento de Hezbolá fue producto del esfuerzo iraní o también de los errores de Israel que no atacó esa enorme capacidad militar en todos los últimos años desde el 2006.

R: Es una combinación. Está claro que decidimos no atacar a Hezbolá desde el 2006, salvo un caso puntual que hubo en el 2021 ó 2022 en el que enviamos drones a Beirut.

P: Sí, lo recuerdo, para destruir un componente clave en el armado de los misiles de precisión.

R: Exacto. Pero es cierto que evitamos lidiar con Hezbolá en Líbano, así que la organización continuó fortaleciéndose y desarrollando su enorme infraestructura armada. Fue un gran error de Israel.

P: Me pregunto si Israel evitó ese choque por consideraciones de evitar guerra regional, cosas similares, o porque no sabía lo que Hezbolá estaba construyendo. O Israel simplemente no se animó.

R: Un poco de todo, parte no sabíamos, parte no éramos capaces de impedirlo. Es un hecho que al igual que Hamas, Hezbolá también hizo producción local, desarrolló fábricas de armas, algunas de ellas en Siria, desde donde transferían todo de a poco a Líbano. Y de a poco Hezbolá desarrolló una industria local de misiles y todo tipo de armas. Hay fábricas de drones en Líbano. Construyeron gradualmente una enorme fuerza logística y fuerza de combate.

 

Hezbolá, obra de Irán con semi autonomía

P: ¿Cómo describiría a Hezbolá? Está claro que es una creación de Irán, pero no sería correcto decir que es un mero títere de Irán.

R: En todo discurso de Nasrallah, ante todo hay un pronunciamiento sobre la obediencia absoluta a Teherán como guía supremo. Eso es primordial. Recuerdo que en los primeros años de Hezbolá, todos los hombres de la organización que morían estaban cubiertos con la bandera de Hezbolá, no de Líbano. En la oficina de Nasrallah había solamente una bandera de Hezbolá. Claro que también fotos del líder supremo de Irán Khamenai por todo Beirut. Últimamente, se ve que le hicieron observaciones al respecto, tenía también una bandera de Líbano. Pero hay otro elemento del que creo que poca gente se percató. Al principio  hablaba de “resistencia libanesa” pero luego pasó a hablar de “resistencia islámica”, exactamente como Hamas y como cualquier organización terrorista islamista. De hecho él se sacó a sí mismo del marco del Estado libanés y convirtió a Hezbolá en una burbuja que decide sin consultar nada con Líbano mismo. Por eso los cristianos se quejaban que él arrastra al país a una guerra, con sus ataques a Israel “en apoyo” a Hamas, sin consultar con nadie, arriesgando a todos. Le increparon que trae una tragedia a todos sin preguntar nada a nadie.

 

P: Y a Nasrallah nunca le importó lo que critican los demás dentro de Líbano.

R: En absoluto.

P: Pero mi pregunta anterior iba un poco más allá de ello. ¿Todo es orden de Irán o decisiones propias de Nasrallah?

R: Hassan Nasrallah fue siempre muy constante con su línea. Y basta con mirar hacia atrás para comprender muchas cosas. En uno de sus discursos en 1985 dijo que su objetivo es incorporar a Líbano como provincia número 32 de la República Islámica de Irán, o sea que esa era una meta que nunca olvidó. Esa era su dirección.

En cuanto a su proceder general, si recibe órdenes de Irán o actúa solo, yo diría que es semi autónomo. O sea, en las decisiones diarias, siempre decidió solo. Pero hay cosas en las que coordina con Irán, como por ejemplo en el 2009 cuando se sumó por primera vez al gobierno libanés. Precisaba el visto bueno de Teherán.

Otro punto importante, su participación en la guerra en Siria. No fue iniciativa de Nasrallah sino una orden de Irán. Lo mismo para ampliar la guerra contra Israel.

P: Hace mucho se dice que Irán guarda a Hezbolá para que ataque a Israel si Irán entiende que Israel va a atacar sus instalaciones nucleares. Pero originalmente ¿cómo resumir por qué Irán creó a Hezbolá?

R: Claro que no sólo para las instalaciones nucleares. Hezbolá se convirtió en el largo brazo de Irán. Entrena a las milicias chiitas en Siria, a las milicias chiitas en Irak, en el lanzamiento de misiles y mucho más. Está involucrado hasta el cuello en todo el tema de Hamas, fomenta terrorismo en Cisjordania, y todo por el respaldo absoluto de Irán.

Líbano, víctima de Hezbolá y culpable de su desgracia

P: ¿Diría que Hezbolá tomó a Líbano de rehén o habrá quienes aleguen que dado que la población chiita es mayoritaria, es legítimo que Hezbolá controle?

R: Lo que ocurrió en Líbano es que desde el 2019 casi toda la emigración es de cristianos, cientos de miles que se fueron. El 30% del personal médico de Líbano dejó el país, y la mayoría eran cristianos. También muchas profesiones libres. Hallaron refugio en Francia, Australia y Canadá mayormente. Lloran por la situación en Líbano pero el hecho es que se fueron porque no era vida con el control de Hezbolá. Buscaron otros sitios que pudieran servirles como lugar seguro para vivir con normalidad.

P:¿Es exacto decir que Hezbolá controla Líbano y es mucho más fuerte que el propio ejército libanés?

R: No hay ninguna duda al respecto. Y si Hezbolá toma control absoluto de Líbano, lo primero que hará será fundir el ejército libanés con Hezbolá, para tener 200.000 hombres, no 100.000. Y si Hezbolá logra hacer eso, cambiará absolutamente el carácter de Líbano como sociedad multicultural. Ya no sería el Líbano que conocemos.

P: De hecho, hace mucho no es el Líbano que era.

R: Eso es indudable. Pero sería más fuerte aún el proceso. Sería el fin del Líbano clásico y Líbano pasaría a ser otro país del mundo árabe con una minoría cristiana que no estaría prácticamente representada. Mira lo que pasa en Egipto, aunque los coptos son el 15% de la población. Lo que pasa en Siria, en todos lados. El problema es que al dominio de Hezbolá se suma la corrupción del Estado libanés, la mala conducción de los asuntos del país más allá del tema Hezbolá. Hezbolá tiene sus sistemas independientes, bancos, escuelas, hasta supermercados, no precisa los libaneses. Son varios elementos. El problema central es que los cristianos no pudieron preservar su supremacía y los musulmanes sunitas, desde que desapareció del horizonte político el otrora Primer Ministro Sa´ed Hariri, dejaron de existir como fuerza política. Los únicos que hablan en Líbano son los chiitas, Hezbolá, que supieron aprovechar muy bien todas las grietas en la estructura del Estado libanés. Eso, sumado a la agenda islamista iraní, creó la nueva realidad en el Estado libanés.

P: Gracias mil Jacques. Interesantísimo.

R: Gracias a usted por el interés.

 
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