Ineludiblemente, las imágenes no lo pueden mostrar todo, pero permiten tener una idea de la dimensión de los planes terroristas de Hezbolá para atacar a Israel , y del enorme esfuerzo de Irán por armar a sus aliado/proxy en territorio libanés. Esto es parte de lo incluido en una exhibición organizada por las Fuerzas de Defensa de Israel con los más de 85.000 objetos de guerra confiscados en más de 30 aldeas del sur del Líbano, convertidas por Hezbolá en bases terroristas.
Este es el detalle de las armas halladas en las aldeas en las que operaron las Fuerzas de Defensa de Israel.
– Aproximadamente 6.840 lanzadores de RPG, cohetes y misiles anti tanques, de los cuales 340 eran misiles Kornet anti tanques y sus lanzadores
– Cerca de 20 vehículos militares
– 9.000 cargas explosivas y municiones
– Aproximadamente 60,800 instrumentos de comunicaciones, equipos electrónicos, computadoras y documentos
-Cerca de 2.250 misiles tierra-tierra y cohetes
– 2700 rifles de distintos calibres
– Otros 2.860 armas diversas
– Cerca de 300 instrumentos de observación y binoculares
– Unos 60 misiles anti aéreos
Es imperioso recalcar: todo esto no fue hallado en depósitos de un ejército ordenado de un país soberano sino en infraestructuras armadas de la organización terrorista Hezbolá insertadas en aldeas supuestamente civiles. Y la intención no era defensiva. Hezbolá nunca ocultó sus planes de conquistar la Galilea, irrumpiendo con enorme cantidad de hombres al norte de Israel. Si lo hubiera logrado, el resultado habría empalidecido los cruentos ataques del 7 de octubre del año pasado en el sur de Israel.
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