Mujeres palestinas discuten con policías israelíes en el lugar del suceso, en la frontera con CisjordaniaAMMAR AWADREUTERS
- Tras no hacer caso a las advertencias de los policías fronterizos, una mujer palestina sacó su cuchillo y lo dirigió a un policía fronterizo
- La Intifada 2.0 ‘recluta’ a las mujeres
En un nuevo capítulo de la «Intifada de los Cuchillos», dos hermanos palestinos han sido abatidos por miembros de la Policía Fronteriza de Israel tras intentar apuñalarles en el puesto de control de Kalandia (entre Ramala y Jerusalén), según ha informado la Policía israelí.
Una mujer y su hermano, de 16 años, se acercaron esta miércoles a la zona reservada a los coches en el conocido ‘checkpoint’ negándose a parar tal y como los agentes pidieron. Tras no hacer caso a las peticiones para que no avanzasen más, la mujer sacó su cuchillo y lo dirigió a un policía antes de ser disparados, según el organismo policial.
Los organismos de seguridad israelíes indican que hallaron dos cuchillos más en la ropa del palestino abatido. El portavoz de la Policía israelí, Micky Rosenfeld, ha distribuido en Twitter una imagen de los puñales hallados con el texto: «Dos terroristas intentaron llevar a cabo un ataque en el paso de Kalandia. La Policía respondió en el lugar. Cuchillos aprehendidos».
«Los agentes pidieron varias veces a los dos sospechosos que no siguieran avanzando hacia su posición. La sospechosa sacó un cuchillo y lo lanzó a uno de los agentes mientras el varón estaba detrás con una mano en la espalda escondiendo algo», ha señalado.
El Ministerio palestino de Sanidad ha identificado a la mujer como Maram Salij Hasan Abu Ismail, de 23 años y al adolescente como Ibrahim Taha. Éste, que según la Policia llevaba dos cuchillos, se acercó para atender a su hermana herida antes de ser abatido, indica la agencia palestina Maan . Los dos eran originarios de Beit Surik, en la zona de Ramala, la capital de Cisjordania.
Dos horas después, el paso de Kalandia situado en una zona estratégica al norte de Jerusalén y entrada a la principal ciudad palestina en Cisjordania (Ramala) seguía marcado por una mayor presencia de soldados, policías y cámaras de televisión. Muy cerca del ‘checkpoint’, se levanta el campo de refugiados donde las milicias de Al Fatah tienen una gran presencia. De momento, no participan activamente en los ataques de los últimos meses, que en su mayoría son realizados con cuchillos por «lobos solitarios».
Hamas llama a «continuar Intifada»
Lo que los israelíes definen como «nuevo ataque terrorista frustrado», el grupo islamista Hamas lo llama «nueva ejecución de palestinos a cargo de la ocupación». Desde su canal de televisión y con las imágenes de los dos cadáveres tendidos en Kalandia, Hamas pide a los palestinos que continúen la «Intifada Al Quds».
Petición que el movimiento integrista considera más urgente que nunca tras tres semanas de clara reducción de la ola de violencia iniciada el 1 de octubre con el asesinato de una pareja de israelíes en una carretera cerca de una colonia en Cisjordania. El ataque en esa zona ocupada por Israel en la guerra del 67 fue obra de un comando palestino vinculado a Hamas. Desde entonces, han muerto alrededor de 200 palestinos, entre ellos más de dos tercios abatidos por fuego israelí en sus ataques o intentos de ataques contra civiles, policias y soldados de Israel. Debido a los apuñalamientos, atropellos intencionados y disparos palestinos en los últimos seis meses, han muerto 29 israelíes y 4 extranjeros.
Tras unos días de relativa tranquilidad, la escalada parecía tomar una dimensión diferente y más grave hace nueve días con el atentado suicida en un autobús de Jerusalén (20 heridos). 24 horas después, el militante de Hamas que activó el explosivo en la parte trasera del autobús israelí falleció de sus heridas en un hospital.
«El atentado terrorista en el autobús nos hizo volver a todos a principios de la Segunda Intifada hace 15 años», reconoce uno de los seis comandantes de brigada israelíes en Cisjordania. En una entrevista conjunta al diario Yediot Ajaronot, advierten: «La calma de los últimos días no es estable. La próxima ola de terror será más peligrosa«.
El proceso de paz israelopalestino se encuentra profundamente estancado desde elcolapso en las conversaciones hace dos años. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu y el presidente palestino Abu Mazen se acusan mutuamente del fracaso tanto en aquella negociación como en los posteriores y tímidos intentos de reanudarla.
Israelíes y palestinos creen que el presidente estadounidense, Barak Obama, hará un último intento para relanzar el proceso de paz basado en la solución de dos Estados (Israel y Palestina) antes de abandonar la Casa Blanca.
Bien hecho, los israelíes deben defenderse. (Y)