Traducido para Hatzad Hasheni
Los cristianos se aseguraron de destruir todos los restos del Templo y de contaminar la zona. A continuación llegaron los musulmanes. Durante más de 300 años llamaban a Jerusalén como “Beit al-Maqdes” (Casa del Templo) y en Al-Aqsa se llevaban a cabo rezos los lunes y los jueves mientras los musulmanes quemaban el incienso de acuerdo con la fórmula de los sabios judíos. El área servía para el rezo tanto para los judíos como para los cristianos: “Los musulmanes durante los primeros años se veían como seguidores de la celebración del culto de Templo judío”.
El Monte del Templo es el centro del culto religioso durante miles de años y es el centro neurálgico del caliente Oriente Medio e incluso del mundo en general. ¿Qué es lo que realmente ocurrió en este mismo lugar entre el Segundo Templo judío y la construcción de la Mezquita de Al-Aqsa? Un templo pagano, un basurero repleto de telas y de ruinas. Todo esto, hasta que los musulmanes llegaron para redimir al sitio, que ideológicamente era el lugar más sagrado para los judíos, de acuerdo con la Sura “Hijos de Israel” en el Corán.
El Profesor Guideón Avni, el arqueólogo de la Autoridad de Antigüedades y la historiadora Dr. Milka Levy-Rubin, dibujan la increíble historia del lugar sagrado para miles de millones, desde el año 70 d.e.c., el punto en el que fue destruido el Segundo Templo – hasta el presente, el mismo punto en el que la ONU rompió recientemente los nexos históricos entre el pueblo judío y el Monte del Templo.
Después de la destrucción de la época romana, el lugar logró sobrevivir como un templo pagano construido para uno de los dioses, cuenta el Profesor Avni. Sin embargo, con el surgimiento del cristianismo en la etapa del período bizantino, esta presencia también fue destruida. “Podemos empezar la historia con el estado del Monte del Templo a la hora de la llegada de los musulmanes a Israel”, dice. “El Monte, según testimonios obtenidos, se había convertido en un cubo de basura deliberadamente, por las ganas de demostrar la superioridad del cristianismo sobre el judaísmo. Debajo de este, el Santo Sepulcro se convirtió en el lugar sagrado”.
La Dr. Milka Levy-Rubin añade que “el templo era un vertedero de acuerdo con la profecía de Jesús que afirmaba que no quedaría piedra sobre piedra, y aquí Dios cumplió su palabra. En términos del cristianismo era la prueba ganadora y así se preocuparon que el lugar permaneciera desolado, en ruinas y maloliente”.
¿Un lugar sagrado? Puros intereses políticos…
Hasta tal punto se menosprecio el lugar sagrado que en el libro “Alabanzas para Jerusalén”, contaban que las mujeres cristianas bizantinas enviaban, especialmente, las telas sucias para contaminar el Monte del Templo”. Este fue el papel de los cristianos… contaminar el Monte y el papel de los musulmanes, al menos al principio del Islam en Israel, fue el de redimir la “gloria pasada”.
El Dr. Levy-Rubin explica que en “la tradición imperante en el Islam se santifica al Monte del Templo por el viaje nocturno y la ascensión del profeta Mahoma al cielo”. En la Sura (Revelación) “Los hijos de Israel”, se menciona la “Mezquita Sagrada” en la Meca y la Mezquita de la punta.
“En un momento determinado se arraiga una tradición que dice que Dios llevó a Mahoma a la Mezquita que está sobre el Monte del Templo, pero no sólo que no es obvio que este verso se refiere específicamente a este lugar, sino también ocurrió que dentro de la interpretación musulmana se produjo un animado debate sobre qué era la “Mezquita de la punta” (Aqsa), y dentro de la discusión intervinieron muchos intereses políticos y religiosos. Se creía que se trataba de un templo celestial, los chiitas afirmaban que se trataba de Kufa en Irak, y otros han argumentado que se trataba de Medina”.
Entonces… ¿Quién estaba interesado en santificar a Jerusalén? Según el Dr. Levy-Rubin, “La dinastía omeya gobernante en este espacio desde 660-750 d.c.. Ella tiene un interés en que su centro no esté en la Península Arábiga – el centro más importante hasta ese momento – sino que preferían que sea en Siria y en la tierra de Israel, y por lo tanto prefieren que el centro de santidad se ubique bajo su dominio, sobre todo cuando hay rivales que están en Arabia Saudita”.
“Beit al-Maqdes”
Una de las fuentes para arrojar luz sobre este periodo es el folleto “Alabanzas para Jerusalén”, de origen muy antiguo que se desarrolló a mediados del siglo VII. “Ningún erudito musulmán de hoy desconoce que Jerusalén fue llamada por más de 300 años, Beit al-Maqdes, a saber, la casa del templo”, dice el doctor Levy-Rubin. “No sólo eso, el lugar de oración de la Cúpula de la Roca se llama “Heijal” (Santuario), y la roca que está dentro se la llama “Sakarat Beit al-Maqdes. Estos nombres indican claramente la tradición judía que se encuentra allí”.
“Jerusalén en sí misma no se menciona en el Corán, pero probablemente fue la primera dirección de la oración de Mahoma, antes de cambiar y decidir que la dirección de rezo debía ser la Meca. La tradición formalizada sobre el viaje nocturno y la ascensión al Monte del Templo se produjeron en algún lugar de principios del siglo VIII, después que la construcción de la Cúpula de la Roca se hubiese completado porque no hay ningún rastro de esta tradición en alguna de las muchas inscripciones antiguas de la bóveda del Domo de la Roca propiamente dicho.
¿Por qué se produjo la separación entre el Islam y el judaísmo que tanto se ha profundizado?
“Pasó con el Islam lo que sucedió a muchas religiones. El Islam era entonces muy joven y no cohesiva, y por lo tanto estaban abierto a las influencias. Del mismo modo que el cristianismo nace del judaísmo, maduró desde ella y tuvo que producir límites para diferenciarse de la misma fuente. Mahoma fue influenciado por las tradiciones judías y cristianas. Las historias bíblicas acerca de José y Moisés que son de Midrashim judíos llegó al Islam desde Mahoma que las escuchó junto al Midrash, y esto también se aplica al Monte del Templo”.
El renovado culto del Monte del Templo y los redentores de la casa de David
En 691, en medio de las controversias en torno a la santidad de Jerusalén, se construyó una cúpula sobre la roca. El ombligo del mundo según la creencia judía, se convierte en el centro del mundo también de acuerdo con los musulmanes. El Monte del Templo es, según la tradición judía, la apertura del Paraíso o la “Puerta del Cielo” y el “trono del juicio de David” – se conectó a una tradición común que incluye la resurrección. A estas tradiciones también entran tradiciones cristianas como la cuna de Jesús, el árbol de palma que alimentó a su madre María y otros.
“En las Alabanzas para Jerusalén, se escribe sobre Abed al-Malik, el califa que construye la Cúpula de la Roca”, dice el doctor Levy-Rubin, “Voy a enviar a usted al servidor Abed al-Malik para restaurar el reino como antes, voy a poner mi silla en la roca, yo soy Dios, y David es el rey de los hijos de Israel”. Esta tradición ha mantenido que el Califa Omar y los califas que vienen detrás de él, son la prosecución de la casa de David.
“Ellos no sólo reciben la santidad de la montaña, la limpiarán, también verán a los bizantinos que la contaminaron como los enemigos de Dios. La Escritura continúa amenazando a Constantinopla que será castigada por haber destruido el templo y están orgullosos de eso. Una vez más, hay un asunto religioso integrada a intereses políticos frente a los que tenían como el mayor enemigo para el Islam”.
Pero el elemento más sorprendente que describe Levy-Rubin es el ritual que tuvo lugar durante esos momentos en la mezquita de la Roca – y su similitud sorprendente con la que se utilizaba para el culto (judío) en el templo. “En primer lugar el ritual se llevaba a cabo los lunes y jueves, y cualquiera que esté familiarizado con la tradición judía sabe cuál es el significado de estos días, son los días de la semana en los que se lee la Torá”.
“Los musulmanes también ungen el incienso de piedra, según los textos rabínicos que indican el tema. En el propio sitio también sirven judíos y cristianos. La ropa de los diáconos era muy similar a la de los sacerdotes que se describen en la Biblia: camisas de tela, mitra y fajas decoradas con telas preciosas. Los diáconos también se limpiaban antes de culto. Al parecer, los musulmanes al comienzo les gustaba verse como que estaban celebrando el ritual del templo judío y así se comportan pero esto no les dura mucho tiempo”.
Las tradiciones dobles en el Monte del Templo
No sólo el Monte del Templo mezcla las tradiciones dobles (o triples) de las tres religiones; también lo hace la “Puerta de la Misericordia” judía. La tradición musulmana considera también que la resurrección ocurrirá en frente de esta puerta, por lo que el viejo cementerio musulmán está situado fuera”, dice el Prof. Avni. “Por otro lado, estas puertas están en la dirección hacia el Santo Sepulcro, y los cristianos consideran que la puerta conducía a la iglesia del Santo Sepulcro, no hacia el Monte del Templo. Todavía hay un debate sobre si el cierre de la puerta es lo último que hicieron los cristianos de Jerusalén o si fueron los primeros musulmanes los que lo hicieron”.
Como arqueólogo, usted puede hablarme sobre el Monte del Templo como algo hipotético solamente ya que no existe la posibilidad de cavar allí…
“Sí, y es una gran frustración. Pero también me gustaría excavar en el Santo Sepulcro y eso tampoco va a suceder. No hay duda que el Monte del Templo es el lugar más interesante para excavar. Pero, por otro lado, es un error creer que no se sabe lo que hay allí. Tenemos una gran cantidad de documentación sobre los espacios entre las rocas y los espacios subterráneos de la montaña. La documentación se remonta al siglo XIX ya que los investigadores franceses e italianos que vinieron aquí fueron capaces de entrar en el recinto y en la montaña, y testimoniaron lo que veían de forma excelente”.
“Además, hay extensas excavaciones realizadas cerca del Monte del Templo, en la ciudad de David y en la pared sur, allí se encontraron pruebas de la renovación de los asentamientos judíos en Jerusalén por familias judías de Tiberíades, hecho que se produjo después de la conquista musulmana. Sabemos por la arqueología que el barrio judío se estaba construyendo entre el Monte del Templo y las zonas cristianas, un terreno que es el “abuelo” del barrio judío contemporáneo”.
El profesor Avni añadió que “La mezquita de al-Aqsa en sí fue destruida varias veces por terremotos, pero hoy en día también es posible entender y recuperar la última destrucción que sufrió y cuándo ocurrió”.
¿Y el templo?
“De los días del Segundo Templo se puede ver y estudiar la carcasa exterior. El Muro de los Lamentos es parte del Muro Occidental del Monte del Templo. Hay restos de grabados, condecoraciones y objetos derivados del Monte del Templo y sus alrededores durante el primer y segundo templo. Hay sellos pertenecientes al primer templo y artefactos del segundo templo”.
“Durante el período bizantino y musulmán se produjo un cambio muy grande en torno al Monte del Templo. Los bizantinos construyeron barrios para los ricos, y los musulmanes construyeron una serie de mansiones que cubrían todo lo que estaba allí. Todos estos períodos se encuentran allí juntos. Si usted camina alrededor del Monte del Templo, es también donde se pueden encontrar las pistas… No, del Templo no hay restos ya que fue destruido por los romanos por completo, pero si, se puede ver restos del templo pagano romano, parte de las piedras fueron usadas en las estructuras musulmanas: Piezas de columnas, suelos y las inscripciones latinas del gobernador romano que los musulmanes las han usado en las murallas del Monte del Templo a la inversa, deliberadamente, al parecer por motivos ideológicos para mostrar el triunfo del Islam”.
¿Usted entiende que hoy en el mundo musulmán dicen que no había un templo judío?
“Hay que distinguir entre el mundo de la investigación y el de la política… entre la ONU y la Universidad. Todavía no he encontrado ningún estudioso serio que niegue la presencia de templos en el monte. Hay libros de investigadores europeos y americanos que revisan la historia del Monte del Templo. Así que, por lo tanto, argumentan cuán grande era la ciudad durante el Primer Templo… pero, nadie va a decir que no hubo un templo. La resolución de la ONU no se basa en ninguna realidad histórica de hechos, pero – por decirlo suavemente – se basan en puntos de vista políticos de los implicados al examinar los datos, ningún investigador niega la presencia del templo”.
“Es suficiente con visitar el Muro Occidental y verlo como un arqueólogo, constatar la época de las construcciones de Herodes y la pavimentación del Monte. Incluso un arqueólogo de Perú que venga desconectado del contexto religioso diría que hay una estructura enorme, un templo construido en este periodo y que fue renovado durante ese período, fue extendido en las manos de alguien que construyeron más sitios en el país y hasta los podría comparar (por ejemplo, en Hebrón). Por cierto, antes que David y Salomón había un templo cananeo en su lugar. Esto también es un hecho. Mi trabajo, como arqueólogo, es decir lo que había y dónde estaba. ¿Lo que hagan los políticos? Eso es una historia diferente”.
Ja.ja,ja, descienden de Ismael hijo de Abraham con la esclava Agar.