El principal candidato del Partido Popular (OeVP) Sebastian Kurz asiste a la reunión de celebración de la victoria de su partido en Viena, Austria, el 15 de octubre de 2017.. (crédito de la foto: LEONHARD FOEGER / REUTERS)
Traducido para Porisrael.org por Dori Lustron
El canciller austríaco Sebastian Kurz tiene previsto ir al Muro de los Lamentos el domingo por la tarde, la primera vez en la memoria reciente que un líder de un país de la UE visitará el sitio sagrado, incluso por lo que se anuncia como una «visita privada».
Kurz, el joven canciller austríaco, que está en un gobierno de coalición con un partido de extrema derecha anatema para la comunidad judía de Austria, llegó para una visita de tres días la madrugada del domingo. Visitará el Muro Occidental como parte de una visita a la Ciudad Vieja que lo llevará al Hospicio de Austria en la Vía Dolorosa, una casa de huéspedes establecida por la Iglesia Católica de Austria en 1854, y la Iglesia del Santo Sepulcro.
Funcionarios diplomáticos israelíes calificaron la visita al Muro Occidental como «importante», incluso si no es formal. Señalaron que si bien los líderes estadounidenses, que comenzaron el año pasado con el presidente estadounidense Donald Trump, ahora visitan el sitio, no figura en el itinerario para los líderes europeos.
Esta es la primera visita de Kurz a Israel como canciller, aunque ha visitado tres veces en el pasado, incluido dos veces como ministro de Asuntos Exteriores.
Está previsto que se reúna con el Primer Ministro, Benjamin Netanyahu, con quien se reunió por última vez en febrero en una conferencia en Munich, el lunes. Kurz no irá a la Autoridad Palestina.
Kurz comenzó su visita el domingo en Yad Vashem, donde se enfureció en el Salón de la Memoria con Victor Klein, un sobreviviente del Holocausto que estuvo en el campo de concentración de Mauthausen que se encontraba en Austria.
«Como canciller de Austria debo declarar que Austria y el pueblo austriaco soportan una pesada carga por sus horrendos y vergonzosos crímenes cometidos durante la Shoah», dijo. «Pero déjame asegurarte que los austriacos sabemos que somos responsables de nuestra historia. Es nuestro deber y obligación garantizar que la Shoah nunca vuelva a suceder, y que mi generación y las generaciones futuras nunca olviden estos horribles crímenes «.
Kurz dijo que por esta razón su gobierno decidió recientemente establecer un sitio conmemorativo en Viena donde «todas las víctimas judías de la Shoah de Austria serán recordadas por su nombre». Unos 50,000 judíos austríacos fueron asesinados en el Holocausto.
Tras la visita a Yad Vashem, Kurz tenía previsto visitar el Museo Herzl, colocar una ofrenda floral en la tumba de Shimon Peres, conocer a sobrevivientes del Holocausto austríaco y visitar la escuela bilingüe Hand-in-Hand para niños judíos y árabes en Jerusalén. El lunes se dirigirá al Foro Global del Comité Judío de América.
La visita de Kurz se produce a pesar que Israel se niega a colaborar con el socio de la coalición de Kurz, el Partido de la Libertad de extrema derecha (FPÖ). Se espera que la continua negativa de Israel a comprometerse con el FPO sea uno de los temas de discusión entre Netanyahu y Kurz.
Kurz está acompañado por el ministro de Educación, Heinz Fassmann, pero no por la canciller Karin Kneissl, que fue nombrada por el FPÖ.
«Austria tiene una especial responsabilidad histórica en que nunca olvidará los terribles crímenes del Holocausto y está comprometida con la seguridad de Israel y sus ciudadanos», escribió Kurz en un mensaje de Twitter anunciando su visita el mes pasado. «Apoyamos activamente la vida judía en nuestro país y luchamos contra cualquier forma de antisemitismo. Solo si los judíos pueden vivir sin reservas en paz, la libertad y la seguridad pueden ‘Nunca olvidar’ convertirse en ‘Nunca más’.
Hasta ahora, Israel ha mantenido una política de no participación con el FPÖ debido a su pasado nazi -fue fundado en 1956 por ex nazis- y las inclinaciones antisemitas y racistas de algunos de sus miembros. En 1999, Israel recordó a su embajador en Viena por más de tres años porque el partido, entonces encabezado por Joerg Haider, se unió a la coalición gobernante.
El actual líder del FPÖ, el vicecanciller Heinz-Christian Strache, ha hecho esfuerzos para distanciarse del antisemitismo del pasado de su partido y presentar fuertes posiciones pro-Israel que han sido interpretadas en Jerusalén como un esfuerzo por obtener el «sello de aprobación» de Israel. «Algo que lo ayudaría a ganar legitimidad en otro lado».
La comunidad judía organizada de Austria se opone firmemente al FPÖ y se opone a cualquier compromiso israelí con el partido.
En marzo, en un discurso que marcó el 80 aniversario del Anschluss, cuando los nazis pusieron sus tanques en Austria y se encontraron con adoradores, saludando y vitoreando a los austriacos, Kurz reconoció que a Austria le llevó mucho tiempo ser «abierto y honesto» sobre su pasado.
Kurz dijo que la responsabilidad histórica de Austria con respecto a los judíos se extiende a Israel, un comentario nunca antes hecho por un canciller austríaco, un grupo que ha incluido la Organización de Liberación pro-Palestina Bruno Kreisky y el ex nazi Kurt Waldheim.
«También tenemos una responsabilidad especial con el Estado de Israel y las necesidades de seguridad del pueblo judío de allí, más de lo que hemos practicado en Austria en el pasado», dijo Kurz en ese momento.
Amén