El silencio antes de la nueva tormenta

Duele decirlo y tenerlo tan claro. Seguramente le duele más todavía a la población de las comunidades civiles del sur de Israel. Pero no tengo duda alguna que la calma que se siente ahora, el así llamado alto el fuego que entró en vigencia en la práctica anoche (lo planteo así ya que el gobierno israelí insiste en que no llegó a ningún acuerdo sobre alto el fuego), es solamente el silencio previo al nuevo estallido. La calma previa a la tormenta.

Y no es de descartar que dure muy poco.

Ya para hoy, viernes, Hamas nuevamente organizó sus ya tradicionales provocaciones a lo largo de la cerca fronteriza con Israel. Terroristas tratan de infiltrarse a territorio israelí y según un informe que recibí hace corto rato, también hubo disparos hacia las tropas.

Los soldados respondieron abriendo fuego y ya hay varios palestinos heridos, uno de ellos de gravedad.

Y si muere? Hamas va a decir que Israel rompió el alto el fuego??

Hamas quiere imponer una ecuación que dice «a fuego, respondemos siempre con fuego», tratando de establecer un equilibrio inexistente. Es falso, porque Israel dispara SIEMPRE como respuesta a un ataque previo de Hamas. Pero Hamas pretende que Israel no responda.

Increíble pero cierto.

En esta situación, creo que el alto el fuego ha sido un error. Claro que siempre es más agradable no tener que lidiar con alarmas, cohetes, y por supuesto no tener que atacar a Hamas. Pero en una situación en la que Hamas se creyó con derecho a disparar 200 cohetes hacia comunidades civiles israelíes porque Israel había matado a dos de sus hombres después que estos habían disparado a una tropa de Guivati, aceptar el alto el fuego cuando Hamas dice «esta vuelta ha terminado», nos parece contraproducente.

Deja a Hamas con la sensación de que puede imponer su palabra y su decisión a su antojo. Eso es una receta segura para más terrorismo.

El problema, claro está, es que seguir atacando a Hamas puede deteriorar la situación hasta una guerra de gran envergadura que tiene otros riesgos.

Pero la dinámica que se dio estos días, también es un riesgo. Por algo las autoridades regionales del sur, al menos varias de ellas, han calificado de error el alto el fuego. No porque quieran guerra sino todo lo contrario: porque no quieren que esta vuelta termine de modo que Hamas se sienta el ganador que decide. Si eso pasa, claro está que la próxima escalada, está en puerta.