Si obviamos por un momento las densas capas de presión que le envuelven con cada vez mayor agobio, Kobi Marimi (27) parece un chico feliz. Su poderosa voz le ha catapultado a Eurovisión donde el próximo 18 de mayo representará a Israel no muy lejos de su piso en Tel Aviv. «No puedo explicar con palabras lo que siento por participar en mi casa en un concurso que sigo desde niño», admite en una entrevista exclusiva con Papel.
El israelí que hace unos años estudió interpretación para combatir el vértigo en el escenario nos recibe en un ático con rascacielos como paisaje de fondo. Los expertos no le dan muchas opciones ya sea porque la historia juega contra los anfitriones o porque el tema elegido (Home) no cuenta con el mismo entusiasmo que arrancó el Toy de Netta Barzilai. «Como toda nueva obra creativa hay comentarios más y menos positivos.Recibí buenas reacciones en el mundo pero ahora estoy centrado en la preparación», comenta este tímido convertido en estrella.
- Entonces, ¿satisfecho de la canción?
- Muchísimo. La primera vez que la escuché me emocioné mucho. Tiene un mensaje muy importante y poderoso. Quiero dedicárselo a todo aquel que alguna vez perdió la confianza en sí mismo o pensó que no es suficientemente bueno. Todos tienen un lugar en el mundo y el derecho a cumplir sus sueños y creer en sus posibilidades. Todos tienen que sentirse en casa.
- ¿Se siente más cómodo con baladas como ésta?
- Me siento cómodo con todos los estilos. Yo solo pedí que la canción fuera escrita con el corazón para que pueda estar conectado con ella. Parece pensada en mi historia.
- ¿Ser el anfitrión es una doble presión?
- Prefiero llamarlo emoción y no presión. Representar a tu país en tu casa es un gran honor que debo disfrutar. Siempre soñé estar en el escenario de Eurovisión.
- ¿Qué es Eurovisión para usted?
- Soy aficionado desde pequeño. Con mis hermanas no nos perdíamos ninguna. Cada año, me imaginaba cantando la canción ganadora y ahora imagínate…
- Netta dice que tiene «una voz espectacular». ¿Qué consejos le dio la ganadora de la última edición?
- Respirar profundamente y ser fiel a mí mismo convirtiendo en algo íntimo todo lo que hay alrededor que es enorme. Desde mi primer casting, Netta me dio mucha fuerza. Me inspira a seguir.
- ¿Qué influencias musicales tuvo en casa?
- En casa escuchaba música árabe ya que mi padre es de origen iraquí. La familia maternal vive aquí desde hace ocho generaciones. También me atraía música griega, israelí, soul, Aretha Franklin,…Me atraían cantantes que triunfan por su talento y fuerza sin necesidad de verles.
- Pase lo que pase, ¿Quiere ser cantante profesional o volver a ser actor?
- Ojalá pueda seguir progresando como cantante. La música siempre fue mi gran amor y pasión.
- ¿Por qué estudió ser actor? ¿Fue realmente terapia contra su famosa timidez?
- Dudé bastante entre interpretación y música pero tenía miedo que mi hobby se convirtiera en profesión con reglas establecidas por otro. Decidí ser actor también para superar el miedo al público. Todo cantante es un actor. Ojalá mi canción y palabras puedan ayudar a alguien a sentirse mejor.
- Para Julio Iglesias cantar es como el aire que respirar. ¿Para usted?
- ¡Uau el gran Julio! Así es. Por cierto, cuando actuó en Israel el año pasado me ofrecieron ser parte del coro pero tuve que viajar a Barcelona a un casting de una producción de Nueva York…
- En Europa, activistas propalestinos piden el boicot a la Eurovisión en Israel…
- No es una competición política sino un evento donde muchos países se reúnen para compartir y festejar su amor a la música. Esto es lo más importante. Invito a todos a venir aqui, es un lugar increíble. La comida es deliciosa (se ríe)…
- ¿Hacia dónde va Eurovisión?
- Es un concurso importante con muchísimos seguidores y vive su momento más álgido. Los países se lo toman en serio y envían canciones muy buenas.
- ¿Ha escuchado la de Miki?
- ¡Claro! Me encanta. «La venda» contagia alegría (se pone a cantar). Tiene posibilidades de ganar. Tengo muchas ganas de encontrar a Miki. Me gusta España. Barcelona es una ciudad increíble. La comida, la gente,…Cuando paseas por Madrid parece que estás en una novela histórica. Cada calle y cada plaza es arte arte. A mí me gusta mucho Lorca y cuando vi su estatua me quedé asombrado y enamorado del lugar.
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