La construcción en los barrios de Ramot y Pisgat Ze’ev en Jerusalén lleva al mundo «más lejos de un acuerdo de paz negociado» en el Medio Oriente, dijo el martes en un comunicado el nuevo ministro británico de Medio Oriente, Andrew Murrison.
Murrison, quien visitó Jerusalén la semana pasada para su primera visita oficial desde que fue nombrado para su nuevo cargo unas tres semanas antes, emitió un comunicado en el que condenaba las ofertas emitidas por la Autoridad de Tierras de Israel la semana pasada para construir cientos de unidades de vivienda en los barrios de Jerusalén más allá de la Línea Verde. .
Según Peace Now, el Ministerio de Vivienda publicó el jueves las licitaciones para la construcción de 460 unidades de vivienda en Pisgat Ze’ev y 345 en Ramot. Entre las licitaciones emitidas había una para 250 unidades en un centro de vida asistida para ancianos.
Incluso el anti-asentamiento Peace Now reconoció que los planes «tienen la intención de agregar unidades de vivienda a los vecindarios existentes de una manera que aumente la densidad del área edificada y en realidad no amplíe el área en la que se extienden los vecindarios».
En las diversas rondas de discusiones entre Israel y la Autoridad Palestina en los últimos años, la idea de que Israel cedería a Ramot o Pisgat Ze’ev nunca fue considerada seriamente. Ambos barrios, construidos en tierra más allá de la Línea Verde, son una parte intrincada del tejido urbano de Jerusalén.
Sin embargo, el gobierno del Reino Unido, dijo Murrison en una declaración, «está gravemente preocupado por los planes anunciados el 30 de mayo para adelantar las licitaciones de cientos de unidades de viviendas en asentamientos en la parte este de Jerusalén ocupada».
«Estamos claros», continuó la declaración, «que los asentamientos construidos en el territorio palestino ocupado son contrarios al derecho internacional y constituyen un obstáculo para una solución de dos estados. Lamentablemente, esto nos aleja más de un acuerdo de paz negociado «.
Dijo que cuando visitó Jerusalén, reiteró el apoyo de su país a una solución de dos estados, «con Jerusalén como capital compartida para ambos estados».
La declaración del Reino Unido fue seguida tres días después por una declaración similar emitida por la UE.
«La declaración dice que .
- El Ministerio de Relaciones Exteriores, acostumbrado a la reacción casi reflexiva de la UE y algunos estados europeos individuales después del anuncio de cualquier edificio más allá de la Línea Verde, no respondió a las declaraciones.
Traducido para Porisrael.org por Dori Lustron
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