¿Por qué Irán está luchando con el coronavirus?

Irán está luchando con un devastador brote de coronavirus, una economía quebrada y una grave escasez de equipos médicos. La falta de transparencia de Irán sobre su brote de coronavirus ha resultado  un riesgo catastrófico de salud pública no solo para el pueblo iraní sino también para sus vecinos. Teherán ha confirmado más de 47,000 casos y más de 3,000 muertes, aunque los expertos en salud pública estiman que la cifra real es significativamente mayor.

En lugar de asumir la responsabilidad y hacer todo lo posible para garantizar la salud y el bienestar de sus súbditos, los líderes de Irán están desperdiciando tiempo y recursos a medida que se desata la crisis del coronavirus. De acuerdo con su política de larga data de intentar desviar la culpa atacando a los partidos extranjeros, los mulás están tratando de distraer a los iraníes de su propio fracaso para manejar la crisis al difundir mentiras que Estados Unidos diseñó el virus. Los medios de comunicación iraníes están intensificando los fracasos del régimen al promover curas falsas, lo que ha llevado a cientos de iraníes a cegarse e incluso suicidarse al consumir metanol de contrabando. El régimen también evitó tomar medidas para frenar las visitas masivas a las tumbas de los imanes, una práctica que propagó exponencialmente el virus.

Irán informó sus primeros casos confirmados de coronavirus el 19 de febrero: dos muertes en la ciudad sagrada chiíta de Qom. En lugar de apresurarse a detener la propagación del virus, el régimen convirtió al país en un vector de infección al aplicar medidas como estas:

• El líder supremo Ali Khamenei imploró a los iraníes que salgan a votar en las elecciones parlamentarias, llegando a describir el virus como una estratagema para desalentar a las personas a votar. El régimen amenazó y encarceló a docenas de iraníes que dijeron la verdad sobre el brote.

• El gobierno se resistió a imponer el distanciamiento social. El 25 de febrero, el presidente Rouhani calificó el coronavirus como «una de las conspiraciones del enemigo para cerrar nuestro país al espantar el pánico».

• Después  que se informaron las primeras muertes por el virus en Qom el 19 de febrero, el régimen se negó a tomar medidas que podrían haber contenido el virus. Qom es un sitio sagrado que atrae a peregrinos de todo Irán y el extranjero. El gobierno mantuvo abiertos los santuarios de Qom hasta el 17 de marzo, y las empresas y restaurantes en Teherán permanecen abiertos.

• La aerolínea de los mullahs, Mahan Air, voló al menos 55 veces entre Teherán y China en febrero, transportando estudiantes religiosos entre China y Qom. Al menos cinco de los primeros casos de coronavirus de Irán se conectaron a estos vuelos.

• El gobierno rechazó todas las ofertas de ayuda, incluso revocando el permiso que había otorgado a Médicos sin Fronteras para establecer un hospital de campaña de 50 camas en Isfahan para tratar a pacientes con coronavirus.

• El régimen favoreció la economía sobre la salud pública . El 29 de marzo, Rouhani dijo que el gobierno tuvo que sopesar los efectos económicos de la cuarentena masiva en una economía ya asediada. «La salud es un principio para nosotros, pero la producción y seguridad de la sociedad también es un principio para nosotros», dijo en una reunión de gabinete. «Debemos unir estos principios para llegar a una decisión final». En la práctica, el gobierno no intentó encontrar tal equilibrio. Ignoraba por completo el lado de la salud del problema y se centró exclusivamente en el lado económico.

Irán se enfrenta ahora a un desastre de salud pública de proporciones potencialmente catastróficas debido a la paranoia, la falta de transparencia y la incompetencia del régimen iraní. Las cifras oficiales de Teherán sobre el número de iraníes que sufren o han muerto a causa del virus, si bien son altas, son solo una fracción de los números reales.

El Dr. Frank Musmar es un especialista en gestión financiera y de desempeño

Traducido para Porisrael.org por Dori Lustron

https://besacenter.org/perspectives-papers/iran-coronavirus-struggle/