Antisemitismo en EE.UU: causas y desafios

Oriente Medio News.- Muchas gracias por conversar con nosotros, por favor cuéntanos algo sobre tu biografía y perfil académico.

Corinne Blackmer.- Me crié en Connecticut y California, serví en las Fuerzas de Defensa de Israel durante la Guerra de Yom Kippur y fui educada en la Universidad de California, Los Ángeles. Me especializo en Estudios Judaicos, de la Mujer y de la Sexualidad y literatura americana de los siglos 19 y, en particular, de los siglos 20 y 21. También enseño Biblia hebrea y otros cursos en Estudios Judaicos.

He publicado ampliamente en los campos anteriores, y recientemente he terminado una antología, Poisoning the Wells: Antisemitism in Contemporary America, además de mi próximo libro Queering Anti-Zionism: Academic Freedom, LGBTQ Intellectuals, and Israel/Palestine Campus Activism.

OMN.- En los últimos años está claro que hay un problema de antisemitismo en los campus universitarios de Estados Unidos. Los estudiantes judíos son acosados, los profesores israelíes visitantes son boicoteados, incluso el vandalismo tiene lugar. Al mismo tiempo, hay estudios de la situación que se contradicen entre sí, algunos dicen que la situación es muy grave, otros sostienen que no lo es. ¿Cuál es tu evaluación de este fenómeno?

CB.- Las contradicciones en los estudios de antisemitismo en el campus parecen ciertas solo a primera vista. Si bien el antisemitismo es un problema constante y persistente en algunos campus universitarios, en la mayoría tiene un carácter intermitente, aunque también intenso. Cualquier campus dado puede ser pacífico durante meses, incluso más de un año o dos, y luego surgir una serie de incidentes antisemitas que involucran la desfiguración de la propiedad, el boicot a los oradores, el acoso a los estudiantes judíos e incluso los crímenes de odio dirigidos contra los estudiantes, la facultad o el personal. Este último es el caso en mi campus, que también puede durar unos años sin incidentes de ningún tipo.

OMN.- Sabemos que hay antisemitismo proveniente de la derecha y la izquierda (además de los islamistas militantes). Pero los militantes (judíos y no judíos) de izquierda o derecha tienden a atribuir el problema del antisemitismo solo al campo ideológico opuesto. ¿Por qué crees que sucede esto? ¿Cómo se puede enfrentar el partidismo o la politización del antisemitismo?

CB.- En gran parte debido al Holocausto, pero también porque el antisemitismo tiene un pedigrí muy largo en la cultura occidental, es odioso que las personas sean tildadas de antisemitas. Esa no es una etiqueta que nadie quiera abrazar para sí mismo fuera de los neonazis o los nacionalistas blancos y los supremacistas. Por lo tanto, siempre es algo de lo que alguien más es culpable.

He descubierto que la mayoría de las personas que encuentran antisemitismo en la izquierda reconocerán fácilmente que el antisemitismo también existe en la derecha, pero no es lo mismo en sentido contrario. Esto se debe en gran parte a que la mayoría de la izquierda no quiere admitir que algunas, si no todas, sus creencias antiisraelíes están motivadas por el antisemitismo, y que el odio a Israel se ha convertido en la nueva forma de expresar y disfrazar el antisemitismo. Enfrentaría este partidismo y polarización a través de la educación, que puede ser extremadamente difícil de lograr, por lo que aún no tengo una respuesta lista a esta pregunta.

 OMN.- El antisemitismo tiene un componente altamente irracional y emocional. No luchas con la lógica ni con los hechos, un ejemplo de esto, recientemente, un usuario musulmán en Twitter acusó de «apropiación cultural» la milenaria canción religiosa Shalom Aleichem, «robando» el saludo árabe Salaam Aleicum. Cuando algo puede ser apropiación cultural, o cualquier cosa puede ser leída como una conspiración judía, ¿qué recursos simbólicos quedan para enfrentar esto?

CB.- Creo que hay que empezar por admitir que prácticamente todas las culturas son sincréticas, y que todas ellas se han dedicado a los préstamos o, si se quiere, a la apropiación cultural. El problema no es la apropiación cultural, en mi opinión, sino el espíritu y las intenciones que la sustentan. Si estos son odiosos o degradantes, como el uso de la cara negra para imitar a los negros (práctica conocida como Blackface), entonces deben ser rechazados en los términos más enérgicos. Creo que, cuando se trata de criticar al pueblo judío o al judaísmo de apropiación cultural, la respuesta debe ser señalar que ambas son las formaciones culturales más antiguas del antiguo surgimiento del monoteísmo, y que el judaísmo mismo ha sido sometido a formas extensas y, en gran medida, lamentables e irrespetuosas de apropiación cultural.

OMN.- Una de las penetraciones exitosas del antisemitismo antiisraelí, que encuentra eco en círculos progresistas de Estados Unidos, en el movimiento queer es el «argumento» del pinkwashing (los derechos sexuales liberales de Israel se utilizan para oprimir a los palestinos). ¿Cómo logran hacer creer que la liberalidad sexual, que fue conquistada con sudor y lágrimas por los ciudadanos israelíes, es una mera fachada inventada para mostrarse como más liberales que los palestinos y oprimirlos?

CB.- El fenómeno del «pinkwashing», o la presunción de que la cultura judía israelí utiliza su impresionante historial de derechos civiles para las personas LGBT como una tapadera para disfrazar su opresión de los palestinos, es parte de un problema mucho mayor. Todo lo que Israel haga y que sea digno de elogio o valioso para esta perspectiva es un engaño que oculta la verdad de su opresión de los palestinos. Por lo tanto, no solo hay pinkwashing, sino también greenwashing (los avances israelíes en ecología); brownwashing (los avances de Israel en la inclusión de judíos de color) y así sucesivamente. No sé si creen o no las mentiras que se dicen a sí mismos, pero la verdad brutal es que los palestinos LGBT sufren una violencia y un miedo horribles, mientras que las personas LGBT israelíes disfrutan de algunos de los derechos civiles más extensos para la sexualidad en el mundo.

En cuanto al movimiento progresista de Estados Unidos, muchos miembros se oponen ferozmente a Israel, que es un país que la mayoría de los judíos estadounidenses apoyan, y esta división hace que los judíos estadounidenses sean rechazados por los progresistas a pesar de su apoyo a otras causas progresistas. Los judíos estadounidenses se sienten marginados, oprimidos y solos debido a esta situación.

 OMN.- Históricamente se sabe que lo que comienza con los judíos termina no sólo con ellos sino con toda la sociedad. Esto demuestra que la lucha contra el antisemitismo no puede separarse de la lucha contra los peligros de género del fanatismo o el autoritarismo en la sociedad. ¿Cómo se puede combatir las raíces sociales que conducen al antisemitismo que destruye el tejido social?

CB.- El antisemitismo es intratable, terco e inevitablemente atractivo para aquellos que creen en las teorías de conspiración. Hay tres medios efectivos para controlar el antisemitismo que, desafortunadamente, no creo que puedan ser aplicados actualmente.

Uno es la aplicación vigorosa de la ley, lo que significa el control y el desaliento de los elementos fascistas extremos de la sociedad, como los grupos nacionalistas blancos y neonazis de diversas tendencias. Como vemos en eventos recientes, estos grupos se están generalizando y son más difíciles de controlar para las fuerzas del orden. Por lo tanto, la aplicación de la ley necesita nuevas unidades especiales dedicadas a perseguir el extremismo doméstico y el terrorismo. El segundo implicaría el uso de legislación para desalentar las actividades del BDS (boicot, desinversión y sanciones) en los campus universitarios. El tercero y más importante son las mejoras universales en los estándares de educación y la adquisición de habilidades avanzadas en el pensamiento crítico.

En el sentido de mejor educación y adquirir más conocimientos e información sobre este tema me gustaría recomendar el libro de Robert Wistrich A Lethal Obsession: Antisemitism from Antiquity to the Global Jihad y consultar la página de ISGAP el Instituto de Estudio del Antisemitismo Global (isgap.org) en la cual encontrarán mucho material y recursos sobre todos los aspectos relacionados al antisemitismo. Incluso hay cursos en línea accesibles para todo público.

Entrevistaron: Jorge Iacobsohn / Manuel Férez