Ana Jerozolimski
Semanario hebreo. Uruguay
Israel está acostumbrado a lidiar con desafíos en el plano de su seguridad nacional, pero es indudable que en los últimos tiempos-aún sin hablar del esfuerzo nuclear de Irán- estos se están complicando.
Por un lado, desde la Franja de Gaza, vuelven a registrarse en las últimas semanas disparos hacia el sur de Israel. Comenzaron, tras cinco meses sumamente tranquilos posteriores al operativo “Pilar de Defensa”, hace ya una quincena. Hubo disparos hacia Sderot durante la visita del Presidente Obama, varios morteros fueron lanzados hacia kibutzim de la zona y esta semana, nuevamente, morteros a los poblados más cercanos a la frontera y cohetes Kassam hacia Sderot. Israel respondió ahora desde el aire, por primera vez desde la finalización del mencionado operativo.
Por otro, la frontera con Siria en el Golan, que durante 40 años fue de las más tranquilas de Israel-aunque la hostilidad siria se manifestaba por cierto a través de la frontera libanesa con la ayuda constante de Damasco a los terroristas de Hezbolá- parece que se complica cada vez más. Son ya numerosos los incidentes en los que disparos desde territorio sirio hicieron impacto directo en Israel y nadie en la cúpula de seguridad parece tener claro si se trata de disparos intencionales efectuados por alguien interesado en involucrar a Israel en la terrible guerra civil en Siria, o de disparos que “se escapan” y llegan al otro lado de la frontera.
Sea como sea, también en este caso el nuevo Ministro de Defensa Moshe Yaalon ha ordenado responder, dejando en claro que Israel no puede abstenerse de reaccionar cuando se dispara hacia su territorio.
Pero tanto en el caso de Gaza como de Siria, se ha respondido en forma muy medida, intentando maniobrar entre el deseo de no permitir una erosión de la capacidad disuasiva de Israel y el deseo no menos fuerte de que la situación no se deteriore y se convierta en una guerra abierta.
El gran problema en esta cuerda floja, es que el desenlace final no depende únicamente de Israel, sino también de las otras partes..Aquí, Israel es quien reacciona.Y en lo que a la actitud de las otras partes se refiere, cabe recordar que mientras en Gaza existe un gobierno central fuerte, de Hamas, que puede si lo desea controlar lo que se dispara de su territorio (y se estima que no fue Hamas quien disparó sino grupos de la jihad mundial), en Siria el gobierno central ya no tiene autoridad ninguna , el ejército no funciona en el así llamado “Golan sirio” y cada grupo armado-muchos de los cuales son tipo Al Qaeda- hace lo que le plazca.
Otra pieza compleja en el mosaico es la situación con los palestinos. Las tensiones han vuelto a aumentar en los últimos días a raíz del fallecimiento de un preso palestino en el hospital Soroka de Beer Sheba. El hombre, Maysara Abu Hamdiya, de 64 años, padecía cáncer de laringe, que le fue diagnosticado en febrero. El Servicio Penitenciario de Israel había comenzado el proceso para liberarlo debido al deterioro de su salud, pero falleció antes de finalizado el trámite ante la justicia.
Abu Hamdiya había sido condenado a cadena perpetua por enviar a un terrorista suicida a detonar explosivos dentro de un café en Jerusalem. El atentado fue frustrado a tiempo.
La Autoridad Palestina acusa a Israel de haber actuado en forma negligente y no haberle dado al preso el tratamiento debido, lo cual es rotundamente negado por las autoridades que recuerdan que falleció mientras estaba internado en el Soroka. En algunos de los comunicados de organizaciones palestinas que llegan a la casilla de correo electrónico de los periodistas, se hace referencia a los dolores y sangrados que había sufrido, sin hacer mención del cáncer, que fue la razón de la muerte.
El problema es que cuando la situación es álgida en el terreno, se requiere una gran responsabilidad de parte de todos los involucrados, para que no se pierda el control.
El sábado llega a la zona nuevamente el Secretario de Estado norteamericano John Kerry. Tratará denodadamente de concretar el relanzamiento del proceso de paz.
Pues…negociaciones puede haber..quizás…lo que no es seguro que se logre pronto, es la paz.
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