Incluso para los estándares de la ONU, lo del Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco reunido en Cracovia (Polonia) fue teatro diplomático del más absurdo: mientras los lugares sagrados musulmanes y cristianos están siendo reducidos a escombros en Irak y Siria, donde se están perpetrando operaciones de limpieza étnica y religiosa; cuando el auge del ISIS ha llevado la muerte y la destrucción a la región, la Unesco decide centrarse en la inexistente amenaza que representa el control israelí sobre la Cueva de los ...