-En cada uno de los rollos de la Ley-dijo una vez el Rabí Nahum de Odesa a sus discípulos-hay guardadas cientos de olas del Espíritu. Olas que, si nos sumergimos en ellas, deshacen su espuma de luz a la altura de nuestros lóbulos frontales refrescando nuestro ánimo y salando la insipidez de nuestras vidas. Los alumnos lo miraron con atención, sin parpadear. El maestro se había quedado ciego en un incendio, tras caerle una viga en llamas sobre la cabeza. Mantenía ...