El Golfo Pérsico está cambiando. Los países ribereños, empezando por Arabia Saudí, introducen reformas liberalizadoras, suavizan la estricta aplicación legal del islam, buscan un modelo económico más allá del petróleo y aceptan la existencia de Israel. El motor de este cambio es el príncipe heredero saudí, Mohamed ben Salman (MbS), hombre fuerte de Riad que, con 32 años, está introduciendo elementos disruptivos en las estructuras políticas, sociales y económicas del reino. Llevamos tiempo con el foco puesto en el que, según nuestro director, ...