Después del primer ataque terrorista, propuse «Charlie es judío». Algún lector opinó que la asociación era caprichosa. Lamentablemente, un día más tarde el segundo ataque confirmó que no lo era. Lo asombroso es que el golpe terrorista al mercado kosher no sólo no es arbitrario ni desvinculado del primero, sino que pone en evidencia el fondo y el sentido de este. Al igual que el nazismo, que en su devastadora acción asesinó a cristianos, gitanos y millones de individuos de diferentes orígenes ...
Charlie Kosher
Ni manifestaciones masivas, ni pancartas ni titulares periodísticos expresando horror y solidaridad con las víctimas. Nadie dijo «Je suis Super Kosher». Parece que hay muertos de primera y segunda categoría. Sin duda, es mucho más lucido identificarse con reconocidos artistas o intelectuales que con ignotos judíos, supuestamente religiosos, que simplemente van a comprar su comida al super.