Como todos sabemos, el viernes pasado, el líder del movimiento terrorista Hezbollah, auto denominado Partido de Dios, Hassan Nasrallah murió en un bombardeo junto a los principales jefes del grupo, en su cuartel general, emplazado en el centro mismo de Beirut, de forma de tener a una numerosa población alrededor como eventuales escudos humanos. Los familiares de las víctimas de la AMIA y de la voladura de la Embajada de Israel en Argentina, quizás han podido ver una pequeña lucecita ...