Las rotundas y contundentes victorias de Hillary Clinton, en el bando demócrata, y de Donald Trump, en el republicano, en las emblemáticas primarias celebradas en Nueva York dejan claro que el pulso político hacia la Casa Blanca queda en manos de estos dos candidatos. Clinton ya se acerca a casi la mitad de los delegados que necesita para ser nominada a la presidencia y saca casi ochocientos delegados a su más inmediato competidor, el senador Bernie Sanders. Clinton está ya ...