Israel sigue con preocupación el desenlace delcaso AMIA

Jana Beris

Jerusalem

Desde la publicación hace pocas semanas de la noticia sobre el acuerdo entre Argentina e Irán para crear la “Comisión de la Verdad” en relación al caso del atentado contra la AMIA, el tema se sigue en Israel con una mezcla de cercano interés y gran incredulidad. Aquí, donde se conoce de cerca el rol de la República Islámica de Irán en el terrorismo internacional y se percibe como claramente peligroso al  régimen de los Ayatollas, nadie parece creer que el acuerdo en cuestión vaya a conducir a nada positivo.

“Si ya había una investigación seria, en base a la cual fueron emitidas órdenes de arresto internacionales a varios jerarcas iraníes ¿para qué se necesitaba el acuerdo recién firmado?”, se pregunta retóricamente el Profesor Yehuda Blum, experto en Derecho internacional. Blum, que fue en el pasado embajador de Israel ante las Naciones Unidas, dice a “La Nación” no tener dudas: “Está claro que este acuerdo no conducirá a nada ya que los propios iraníes ya han aclarado que su gente no comparecerá ante nadie, con lo cual se sabe que de acá no sale nada nuevo”.

El tema del acuerdo, la polémica que desató en Argentina, la subida de tono en los comentarios públicos al respecto, han aparecido en diferentes medios impresos israelíes cada vez que fueron titular también en Argentina. Días atrás, en el matutino “Haaretz”, se citaba a la Presidenta Cristina Fernández “dando a entender” que el Presidente de la AMIA tenía información sobre una red de espionaje internacional que planeaba un tercer atentado en Argentina.

La mayor parte de las notas publicadas en la prensa local, es informativa, no de tono editorial o de opinión. Donde nadie pretende ser delicado, es en los comentarios que las distintas notas suscitan  y que aparecen publicados en las ediciones digitales, con críticas abiertas a las autoridades argentinas.
No menos gráfico en este sentido ha sido, en conversación con este diario, Yoram Schweitzer, experto en Hezbolá y terrorismo islámico del Centro de Estudios de Seguridad Nacional en Tel Aviv. Conversando con él sobre la reciente acusación de Bulgaria a Hezbolá –proxy de Irán en Líbano-por su rol en el atentado cometido en julio último en Burgas en el que  fueron muertos cinco turistas israelíes, Schweitzer trajo a colación el tema de la AMIA.

“A muchos países no les gusta complicarse con organizaciones poderosas como Hezbola o con países como Irán que está detrás de ellos. Basta con ver el ejemplo de Argentina e Irán”, dijo a “La Nación”. “Ahora los argentinos  hacen participar a los asesinos, a Irán, en la investigación del atentado, aunque no  me parece que en Argentina haya alguien tan ingenuo como para pensar que Irán va a revelar su involucramiento en el atentado. Hay de fondo otra cosa”.  Al pedírsele detalles sobre lo que estaba pensando, respondió: “Sea como sea,  me hace acordar a Don Corleone. se le llama a actuar como una especie de árbitro entre las camarillas de la mafia en Sicilia”.

Uno de los puntos que más polémica despertaron en Israel en toda esta situación-además de la incapacidad de creerle a Irán-fueron los comentarios del Canciller Héctor Timerman tras el llamado de la Cancillería israelí al embajador argentino Claudio García. Timerman señaló que Israel no tiene por qué intervenir en relación a un atentado en suelo argentino y contra ciudadanos argentinos. En la Cancillería israelí ya dijeron días atrás a “La Nación” que el vínculo especial de Israel con los judíos del mundo, es bien conocido también por Argentina.

Quien fue tajante al respecto, fue el conocido escritor y respetado intelectual A.B.Yehoshua, quien en conversación con este diario no se limitó a recalcar esa ligazón especial entre Israel y los judíos del mundo. “Sabemos que fueron Irán o Hezbolá quienes  hicieron este atentado pero no por los judíos de Argentina sino por Israel, así que fueron quienes dejaron sentado este vínculo. Es natural por lo tanto que Israel intervenga”, comentó. “¿Qué tiene Hezbolá o qué tiene Irán con un judío argentino? Nada. Ellos, al poner la bomba en la AMIA,  fueron los que determinaron el vínculo entre esos judíos e Israel. Entonces ¿por qué debemos ser nosotros los que evitemos ese vínculo?”.

Y en medio de los análisis, está el dolor de los sobrevivientes y sus familiares.Como el de Bernardo Rojman, que trabajaba en la AMIA  y aquella mañana logró salvarse. Rojman, residente desde hace unos años en Israel, comienza analizando y comentando que “está claro que los iraníes no van a entregar a la justicia argentina a los responsables…y no hay que ser demasiado capacitados para darse cuenta”.

Luego, pasa a su sentir personal. “A m{i me hace mal pensar que firmaron un acuerdo con Irán, sabiendo que Irán es enemigo acérrimo de Israel. No van a ayudar de ninguna manera a esclarecer nada. Por el contrario. Si pueden entorpecerlo, lo van a hacer. ¿Pero qué más van a entorpecer, si todo está muerto?”. Y resume: “La verdad…esto me produce repugnancia. No entiendo qué quiere la Presidenta conseguir con esto. Es tiempo perdido. Un macaneo. Yo creo que es para distraer el pueblo y dar a entender que están preocupados, pero honestamente…. no les creo”.