Reuven (Rubi) Rivlin (74) será el próximo Presidente de Israel,el décimo desde la creación del Estado en 1948, y entrará en funciones a fin de julio,cuando finalice su período el hoy Presidente Shimon Peres.
Sus posturas en temas relacionados al conflicto con los palestinos, son conservadoras, propias de lo que en la terminología interna israelí se considera de “halcones”-supuestamente distintas de las de los así llamados “palomas” que tienden a concesiones en aras de la paz.
Rivlin no considera que retiradas de territorios en disputas, desmantelamiento de asentamientos y otras concesiones de parte de Israel, conducirán a una solución pacífica del conflicto sino a un debilitamiento de Israel que alentará a nuevos ataques. No cree, por ejemplo, en la creación de un Estado palestino independiente , sino en un Estado en el que todos los ciudadanos puedan vivir en paz.Y en el 2005, se opuso a la retirada de la Franja de Gaza y chocó por ello con el entonces Primer Ministro Ariel Sharon.
Pero más allá del hecho que como Presidente de Israel, sus posturas políticas son en principio irrelevantes porque su acción no es de gobierno, estas posiciones no impiden que haya sido siempre, desde que entró al Parlamento en 1988, uno de los diputados de derecha más respetados también por la izquierda e inclusive por los legisladores árabes, debido a la forma con que trata al prójimo.
Y ello se tornó especialmente notorio desde que asumió por primera vez en el 2003 como Presidente del Parlamento, ya que jugó un rol protagónico en la defensa de los derechos civiles de la ciudadanía toda-sea cual sea su comunidad-y a su férrea lucha por impedir iniciativas y proyectos de ley que puedan debilitar al régimen democrático. A nadie sorprendió que ayer, al finalizar su discurso de agradecimiento y saludo por su elección, visiblemente emocionado, haya dicho: “¡Viva la democracia!¡Viva el Estado de Israel!”.
En una entrevista que nos concediera hace unos años, cuando estaba al frente de la Kneset (Parlamento) explicó por qué su primera visita en dicho cargo fue a la ciudad árabe norteña de Umm el.Fahem. “Una semana antes habían estado allí ciudadanos judíos que querían hacer provocaciones en Umm el-Fahem, presentándose con banderas de Israel, como si esa ciudad no estuviera dentro del país”, nos dijo. “Por eso yo justamente en mi condición de judío sumamente convencido sobre nuestro derecho a nuestra tierra, digo también que no puedo aceptar bajo ningún concepto que no sea también, en forma absoluta, un estado democrático. Y cuando alguien prendió un fósforo para intentar encender una llama , yo decidí ir a Umm el-Fahem y decirles allí a los ciudadanos árabes residentes en la ciudad: “La Kneset los representa también a ustedes, al igual que representa a todos los demás ciudadanos, judíos, árabes, beduinos, drusos, de donde sean”.
Hace ya muchos años que Rivlin está intentando convertirse en el “ciudadano número uno”, tal cual llaman los israelíes a su Presidente, dado que por ley es en jerarquía el primero, jefe de Estado, aunque no puede intervenir en política ni ejercer acción de gobierno. Es un símbolo, con todo lo que ello trae aparejado: está por sobre las diferencias y debe representar a todos los variados ciudadanos de Israel , y como tal, no puede ser miembro de un partido ni movimiento político.
En el caso de Rivlin significa que ya este martes, al resultar electo, anunció que deja de inmediato la “casa” en la que creció, el partido Likud por el cual fue electo diputado, fue ministro y luego Presidente del Parlamento. “Desde ahora, soy un hombre del pueblo”, declaró con la voz entrecortada, en clara referencia a su intención de representar, como debe ser, a los israelíes todos, independientemente de sus posturas políticas, orígenes, etnias y otras muchas diferencias.
Pero en realidad,en general, inclusive quienes hubieran preferido a otro candidato como Presidente de Israel, consideran que “Rubi” siempre fue un “hombre del pueblo”. Su personalidad, su relacionamiento con la gente y su sencillez, lo convirtieron hace ya mucho en una figura muy querida, popular, respetada a todo nivel, y considerada limpia y derecha en su actividad pública.
Ayer, su esposa y compañera de toda la vida, Nejama-con la que tiene cuatro hijos y nueve nietos-aclaró que seguirán viviendo en su modesto departamento en Jerusalem, en un edificio sencillo y sin lujos. La residencia oficial del Presidente, servirá al parecer sólo como lugar de trabajo.
Rivlin se enorgullece de destacar que es “séptima generación” de nacidos en Jerusalem. El legado judío, la tradición del pueblo judío y el vínculo con la tierra de Israel, le son claves.
Cuando se lo entrevista por radio en Israel, siempre responde al saludo con el que se abre la transmisión, con las palabras: “Shalom desde la Jerusalem unificada, capital de Israel”.
Nacido en Jerusalem, es también uno de los hinchas más conocidos del equipo de fútbol “Betar Jerusalem”, los aurinegros a los que vio por primera vez cuando tenía 7 años y nunca abandonó, pero a cuya hinchada supo criticar cuando entonaba cantos racistas anti-árabes en los partidos.
Es conocido como una persona que tiende a emocionarse con facilidad y este martes, al anunciarse el resultado de la votación, cronistas israelíes comentaban-no en tono de burla sino, en realidad, de cariño- que “seguramente llorará cuando pronuncie su discurso”.
Lágrimas no se vieron, pero voz entrecortada por la emoción, sí. Y más de una vez.
Si actua y sigue los pasos de SIMON PERETZ nos daremos por contentos, pero, por sus principios, no lo creo.-